Adenoma tubular: que es, como identificarlo y tratarlo
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El adenoma tubular corresponde al crecimiento anormal de las células tubulares presentes en el intestino, no dando lugar a la aparición de signos o síntomas y siendo identificado solo durante la colonoscopia.
Este tipo de adenoma a menudo se considera benigno, con el riesgo de convertirse en un tumor. Sin embargo, es importante que se realicen exámenes de rutina para monitorear la evolución del adenoma tubular, especialmente en el caso de personas que presentan factores de riesgo como dieta alta en grasas, consumo frecuente de bebidas alcohólicas y tabaquismo, ya que en estos casos existe una riesgo de desarrollo de cáncer colorrectal.
Cómo identificar el adenoma tubular
La mayoría de los casos de adenoma tubular no dan lugar a la aparición de signos o síntomas, sin embargo, algunas personas pueden experimentar cambios en los hábitos intestinales, cambios en el color de las heces, dolor abdominal y síntomas relacionados con la anemia.
Así, el adenoma tubular en la mayoría de los casos se identifica durante la colonoscopia, que es un examen indicado por el gastroenterólogo o médico de cabecera en el que se realiza la valoración de la mucosa intestinal con el fin de identificar cambios. Comprende cómo se realiza la colonoscopia.
¿El adenoma tubular es severo?
La mayoría de los casos de adenoma tubular no son graves, pero es necesario un seguimiento periódico para comprobar la evolución del adenoma. En algunos casos, durante la colonoscopia, la lesión se elimina, según cómo aparezca en el examen.
Sin embargo, cuando el adenoma tubular aparece en personas que tienen hábitos de vida poco saludables, como dieta alta en grasas, inactividad física, consumo excesivo de alcohol, sobrepeso o tabaquismo, existe un mayor riesgo de transformación maligna del adenoma, aumentando el riesgo de cáncer colorrectal. . Aprenda a identificar el cáncer colorrectal.
Como es el tratamiento
El adenoma tubular se considera a menudo benigno y, por lo tanto, no es necesario un tratamiento específico.
Como la aparición del adenoma suele estar relacionada con el estilo de vida, su tratamiento consiste en mejorar los hábitos alimentarios, dar preferencia a alimentos ricos en fibra y vegetales y con menor contenido graso, realizar actividad física regular y reducir la cantidad de bebidas alcohólicas consumidas. Por tanto, es posible disminuir la tasa de crecimiento del adenoma y el riesgo de malignidad.
Por otro lado, en los casos en que el médico verifique que existe riesgo de desarrollar cáncer, la extirpación del adenoma tubular se puede realizar durante la colonoscopia.