El mejor ejercicio para la fibromialgia
Contenido
- Ejercicio aerobico
- Caminando
- Ejercicios en piscina
- Extensión
- Entrenamiento de fuerza
- Tareas del hogar
- No te rindas
Visión de conjunto
La fibromialgia causa dolor corporal crónico. La sensibilidad constante de los músculos y los tejidos también puede provocar problemas para dormir. Los dolores punzantes que pueden ser bastante severos se originan en partes de su cuerpo conocidas como "puntos sensibles". Las áreas dolorosas pueden incluir su:
- cuello
- espalda
- codos
- rodillas
Aunque la fibromialgia puede dificultar el ejercicio, es importante estar lo más activo posible. Según el Instituto Nacional de Artritis y Enfermedades Musculoesqueléticas y de la Piel, el ejercicio regular es uno de los tratamientos más útiles para la fibromialgia.
Ejercicio aerobico
La investigación ha demostrado repetidamente que el ejercicio aeróbico regular mejora el dolor, la función y la calidad de vida en general en personas con fibromialgia.
Muchos médicos recomiendan el ejercicio aeróbico suave como primera línea de tratamiento para la fibromialgia. Esto es antes de que se considere cualquier tipo de medicamento. Incluso si su médico le receta medicamentos para su afección, es importante mantenerse activo.
En un estudio de más de 400 mujeres, menos tiempo sedentario y más actividad física ligera se asoció con menos dolor, fatiga e impacto general de la enfermedad.
Si es demasiado doloroso o está demasiado cansado para hacer ejercicio, puede comenzar caminando, moviéndose en una piscina u otras actividades suaves. Si hace esto con regularidad, puede desarrollar su fuerza y resistencia con el tiempo.
Caminando
Un fisioterapeuta puede ayudarlo a desarrollar un programa de ejercicios en el hogar, pero primero, ¿por qué no intentar simplemente caminar? La forma más simple de actividad suele ser la mejor.
Puedes hacerlo en cualquier lugar y todo lo que necesitas es un par de zapatos decentes. Comience con una caminata corta y fácil y continúe caminando durante períodos más largos o a paso rápido. Un buen objetivo, según la Clínica Mayo, es trabajar hasta al menos 30 minutos de actividad aeróbica tres veces por semana.
Ejercicios en piscina
El agua tibia y el ejercicio ligero son una combinación relajante que ayuda a aliviar el dolor de la fibromialgia.
La investigación en mujeres de entre 18 y 50 años, publicada en el, mostró que el ejercicio en una piscina era mejor que el ejercicio aeróbico en el gimnasio o el ejercicio de estiramiento y fortalecimiento en el hogar para aliviar los síntomas de la fibromialgia.
Extensión
No es necesario que empiece a sudar para que el ejercicio sea útil. Por ejemplo, intente:
- estiramiento suave
- ejercicios de relajación
- manteniendo una buena postura
Tenga cuidado de no exagerar. Es mejor estirar los músculos rígidos después de haber hecho un poco de ejercicio aeróbico ligero para calentar. Esto le ayudará a evitar lesiones. Aquí hay algunos otros consejos para un estiramiento saludable:
- Muévete suavemente.
- Nunca se estire hasta el punto del dolor.
- Mantenga los estiramientos ligeros hasta por un minuto para obtener el mejor beneficio.
Entrenamiento de fuerza
El entrenamiento de fuerza puede mejorar significativamente la calidad de vida de las personas con fibromialgia, según a. El entrenamiento de fuerza incluye ejercicios de resistencia y levantamiento de pesas. Es importante aumentar la intensidad lentamente y usar pesos ligeros.
Empiece desde 1 a 3 libras. El entrenamiento de fuerza regular puede resultar en una reducción significativa en:
- dolor
- fatiga
- puntos sensibles
- depresión
- ansiedad
Tareas del hogar
Todos los tipos de actividad física cuentan. Es posible que la jardinería, pasar la aspiradora o fregar no reduzcan el dolor, pero se ha demostrado que actividades diarias como estas reducen la fatiga y mejoran la función física y la calidad de vida.
Los resultados de las edades de 20 a 70 mostraron que aquellos que realizaban la menor cantidad de actividad física diaria tenían un funcionamiento más deficiente y una mayor fatiga que aquellos que eran más activos físicamente en su vida diaria.
No te rindas
Para obtener los beneficios de la actividad física, es importante seguir con ella. Desarrolle gradualmente un hábito de actividad regular. Es probable que sus síntomas mejoren.
Si necesita ayuda para comenzar, pídale a su médico o fisioterapeuta que le recomiende ejercicios para hacer en casa. Controle su ritmo para evitar exagerar cuando se sienta bien. Bájelo un poco cuando sienta un brote de fibro. Escuche a su cuerpo y encuentre un equilibrio saludable.