Hematoma subdural crónico
Contenido
- Causas y factores de riesgo
- Síntomas del hematoma subdural crónico
- Diagnóstico de hematoma subdural crónico
- Opciones de tratamiento para el hematoma subdural crónico
- Perspectivas a largo plazo para el hematoma subdural crónico
- Cómo prevenir el hematoma subdural crónico
Hematoma subdural crónico
Un hematoma subdural crónico (SDH) es una acumulación de sangre en la superficie del cerebro, debajo de la cubierta externa del cerebro (duramadre).
Por lo general, comienza a formarse varios días o semanas después de que comienza el sangrado. El sangrado generalmente se debe a una lesión en la cabeza.
Un SDH crónico no siempre produce síntomas. Cuando lo hace, generalmente requiere tratamiento quirúrgico.
Causas y factores de riesgo
Un traumatismo mayor o menor en el cerebro por una lesión en la cabeza es la causa más común de una SDH crónica. En casos raros, uno puede formarse debido a razones desconocidas, no relacionadas con la lesión.
El sangrado que conduce a una SDH crónica ocurre en las pequeñas venas ubicadas entre la superficie del cerebro y la duramadre. Cuando se rompen, la sangre se filtra durante un tiempo prolongado y forma un coágulo. El coágulo ejerce una presión cada vez mayor sobre su cerebro.
Si tiene 60 años o más, tiene un mayor riesgo de tener este tipo de hematoma. El tejido cerebral se encoge como parte del proceso normal de envejecimiento. La contracción estira y debilita las venas, por lo que incluso una lesión menor en la cabeza puede causar una SDH crónica.
El consumo excesivo de alcohol durante varios años es otro factor que aumenta el riesgo de SDH crónico. Otros factores incluyen el uso de medicamentos anticoagulantes, aspirina y medicamentos antiinflamatorios durante mucho tiempo.
Síntomas del hematoma subdural crónico
Los síntomas de esta afección incluyen:
- dolores de cabeza
- náusea
- vomitando
- dificultad para caminar
- deterioro de la memoria
- problemas de visión
- convulsiones
- problemas con el habla
- dificultad al tragar
- confusión
- cara, brazos o piernas entumecidos o débiles
- letargo
- debilidad o parálisis
- coma
Los síntomas exactos que aparecen dependen de la ubicación y el tamaño de su hematoma. Algunos síntomas ocurren con más frecuencia que otros. Hasta el 80 por ciento de las personas con este tipo de hematoma tienen dolores de cabeza.
Si su coágulo es grande, puede ocurrir una pérdida de la capacidad de movimiento (parálisis). También puede perder el conocimiento y entrar en coma. Un SDH crónico que ejerce una presión severa sobre el cerebro puede causar daño cerebral permanente e incluso la muerte.
Si usted o alguien que conoce presenta síntomas de esta afección, es importante buscar ayuda médica de inmediato. Las personas que sufren convulsiones o pierden el conocimiento necesitan atención de emergencia.
Diagnóstico de hematoma subdural crónico
Su médico realizará un examen físico para buscar signos de daño en su sistema nervioso, que incluyen:
- Coordinacion pobre
- problemas para caminar
- Discapacidad mental
- dificultad para equilibrar
Si su médico sospecha que tiene un SDH crónico, deberá someterse a más pruebas. Los síntomas de esta afección son como los síntomas de varios otros trastornos y enfermedades que afectan el cerebro, como:
- demencia
- lesiones
- encefalitis
- trazos
Pruebas como la resonancia magnética (IRM) y la tomografía computarizada (TC) pueden conducir a un diagnóstico más preciso.
Una resonancia magnética usa ondas de radio y un campo magnético para producir imágenes de sus órganos. Una tomografía computarizada utiliza varios rayos X para tomar imágenes transversales de huesos y estructuras blandas de su cuerpo.
Opciones de tratamiento para el hematoma subdural crónico
Su médico se concentrará en proteger su cerebro de daños permanentes y facilitar el manejo de los síntomas. Los medicamentos anticonvulsivos pueden ayudar a reducir la gravedad de las convulsiones o evitar que ocurran. Los medicamentos conocidos como corticosteroides alivian la inflamación y, a veces, se usan para aliviar la hinchazón en el cerebro.
La SDH crónica se puede tratar quirúrgicamente. El procedimiento consiste en hacer pequeños orificios en el cráneo para que la sangre pueda salir. Esto elimina la presión sobre el cerebro.
Si tiene un coágulo grande o grueso, su médico puede extraer temporalmente un pequeño trozo de cráneo y extraer el coágulo. Este procedimiento se llama craneotomía.
Perspectivas a largo plazo para el hematoma subdural crónico
Si tiene síntomas asociados con un SDH crónico, es probable que necesite cirugía. El resultado de una extirpación quirúrgica es exitoso para el 80 al 90 por ciento de las personas. En algunos casos, el hematoma regresará después de la cirugía y debe ser eliminado nuevamente.
Cómo prevenir el hematoma subdural crónico
Puede proteger su cabeza y reducir su riesgo de SDH crónica de varias formas.
Use un casco cuando ande en bicicleta o motocicleta. Abróchese siempre el cinturón de seguridad en el automóvil para disminuir el riesgo de una lesión en la cabeza durante un accidente.
Si trabaja en una ocupación peligrosa como la construcción, use casco y equipo de seguridad.
Si tiene más de 60 años, tenga especial cuidado en sus actividades diarias para evitar caídas.