¿Qué es el síndrome clínicamente aislado y se convertirá en esclerosis múltiple?
Contenido
- ¿Qué es el síndrome clínicamente aislado (CIS)?
- ¿En qué se diferencia CIS de la EM?
- ¿Qué causa la CEI y quién está más en riesgo?
- ¿Cómo se diagnostica el CIS?
- Análisis de sangre
- Resonancia magnética
- Punción lumbar (punción lumbar)
- Potenciales evocados
- ¿Cómo progresa CIS a la EM?
- ¿Cómo se trata el CIS?
- ¿Cuál es la perspectiva?
¿Qué es el síndrome clínicamente aislado (CIS)?
El síndrome clínicamente aislado (CIS) es un episodio de síntomas neurológicos. El CIS implica la desmielinización en su sistema nervioso central. Eso significa que ha perdido algo de mielina, el recubrimiento que protege las células nerviosas.
Para ser clasificado como CIS, el episodio debe durar al menos 24 horas. No se puede asociar con fiebre, infección u otra enfermedad.
CIS, por su propio nombre, indica que ha tenido un incidente aislado. No significa que deba esperar más o que definitivamente desarrollará esclerosis múltiple (EM). Sin embargo, CIS es a veces el primer episodio clínico de EM.
Continúe leyendo para obtener más información sobre la conexión entre CIS y MS, cómo se hace la distinción y cuáles deberían ser sus próximos pasos.
¿En qué se diferencia CIS de la EM?
La gran diferencia es que CIS es un episodio único, mientras que la EM involucra múltiples episodios o brotes.
Con CIS, no sabes si volverá a suceder. Por el contrario, la EM es una enfermedad de por vida sin cura, aunque se puede controlar.
Algunos síntomas de CIS son:
- Neuritis óptica. Esta es una condición en la cual su nervio óptico está dañado. Esto puede causar mala visión, puntos ciegos y visión doble. También puede experimentar dolor en los ojos.
- Mielitis transversa. Esta condición implica daño a su médula espinal. Los síntomas pueden incluir debilidad muscular, entumecimiento y hormigueo, o problemas de vejiga e intestinos.
- El letrero de Lhermitte. También conocido como fenómeno de la silla de peluquero, esta condición es causada por una lesión en la parte superior de la médula espinal. Una sensación de choque eléctrico va desde la parte posterior del cuello hasta la columna vertebral. Esto puede suceder cuando dobla el cuello hacia abajo.
CIS puede causar dificultades con:
- equilibrio y coordinación
- mareos y temblores
- rigidez muscular o espasticidad
- función sexual
- caminando
Tanto CIS como MS implican daños en la vaina de mielina. La inflamación provoca la formación de lesiones. Estas señales de interrupción entre su cerebro y el resto del cuerpo.
Los síntomas dependen de la ubicación de las lesiones. Pueden variar desde apenas detectables hasta discapacitantes. Es difícil distinguir CIS de MS en función de los síntomas solamente.
La diferencia entre las dos condiciones puede ser detectable a través de una resonancia magnética. Si hay evidencia de un solo episodio, probablemente tenga CIS. Si las imágenes muestran múltiples lesiones y evidencia de otros episodios separados por espacio y tiempo, es posible que tenga EM.
¿Qué causa la CEI y quién está más en riesgo?
CIS es el resultado de inflamación y daño a la mielina. Esto puede ocurrir en cualquier parte del sistema nervioso central. No está exactamente claro por qué sucede esto. Se han identificado algunos factores de riesgo:
- Años. Aunque puede desarrollar CIS a cualquier edad, tiende a diagnosticarse en adultos jóvenes de entre 20 y 40 años.
- Genética y medio ambiente. Su riesgo de desarrollar EM es mayor si tiene un padre que lo tiene. En general, la EM también es más común en áreas más alejadas del ecuador. Es posible que sea una combinación de un desencadenante ambiental y una predisposición genética.
- Género. El CIS es dos o tres veces más común en mujeres que en hombres.
Un episodio de CIS en su pasado lo pone en mayor riesgo de desarrollar EM.
¿Cómo se diagnostica el CIS?
Su médico de atención primaria probablemente lo derivará a un neurólogo. Su historial médico completo y la discusión de sus síntomas es el primer paso. Luego, necesitará un examen neurológico, que podría incluir verificar su:
- equilibrio y coordinación
- movimientos oculares y visión básica
- reflejos
Algunas pruebas de diagnóstico para ayudar a encontrar la causa de sus síntomas son:
Análisis de sangre
No hay análisis de sangre que puedan confirmar o descartar CIS o MS. Pero los análisis de sangre juegan un papel importante en descartar otras afecciones que se presentan con síntomas similares.
Resonancia magnética
Una resonancia magnética de su cerebro, cuello y columna vertebral es una forma efectiva de detectar lesiones causadas por la desmielinización. El tinte inyectado en una vena puede resaltar áreas de inflamación activa. El tinte de contraste ayuda a determinar si este es tu primer episodio o si has tenido otros.
Cuando tiene un síntoma causado por una lesión, se denomina episodio monofocal. Si tiene varios síntomas causados por múltiples lesiones, ha tenido un episodio multifocal.
Punción lumbar (punción lumbar)
Después de una punción lumbar, se analiza el líquido cefalorraquídeo para buscar marcadores de proteínas. Si tiene más de la cantidad normal, puede sugerir un mayor riesgo de EM.
Potenciales evocados
Los potenciales evocados miden cómo responde su cerebro a la vista, el sonido o el tacto. Alrededor del 30 por ciento de las personas con CIS tienen resultados anormales a potenciales evocados visuales.
Antes de que se pueda hacer un diagnóstico, se deben excluir todos los demás diagnósticos posibles.
Algunos de estos son:
- trastornos autoinmunes
- Enfermedades genéticas
- infecciones
- trastornos inflamatorios
- desordenes metabólicos
- neoplasias
- enfermedad vascular
¿Cómo progresa CIS a la EM?
CIS no necesariamente progresa a MS. Puede ser para siempre un evento aislado.
Si su IRM detectó lesiones similares a la EM, existe una probabilidad del 60 al 80 por ciento de que tenga otro brote y un diagnóstico de EM en unos pocos años.
Si la resonancia magnética no encontró lesiones similares a la EM, la probabilidad de desarrollar EM dentro de unos años es de aproximadamente el 20 por ciento.
Los brotes repetidos de actividad de la enfermedad son característicos de la EM.
Si tiene un segundo episodio, es probable que su médico quiera otra resonancia magnética. La evidencia de múltiples lesiones separadas por tiempo y espacio apunta hacia un diagnóstico de EM.
¿Cómo se trata el CIS?
Un caso leve de CIS puede desaparecer por sí solo en unas pocas semanas. Puede resolverse antes de llegar a un diagnóstico.
Para los síntomas graves como la neuritis óptica, su médico puede recetar un tratamiento con esteroides en dosis altas. Estos esteroides se administran por infusión, pero en algunos casos se pueden tomar por vía oral. Los esteroides pueden ayudarlo a recuperarse de los síntomas más rápido, pero no afectan su pronóstico general.
Existen varios medicamentos modificadores de la enfermedad para tratar la EM. Están diseñados para reducir la frecuencia y la gravedad de los brotes. En personas con CIS, estos medicamentos pueden usarse con la esperanza de retrasar la aparición de la EM.
Algunos de los medicamentos aprobados para CIS son:
- Avonex (interferón beta-1a)
- Betaseron (interferón beta-1b)
- Copaxona (acetato de glatiramer)
- Extavia (interferón beta-1b)
- Glatopa (acetato de glatiramer)
- Mayzent (siponimod)
- Tysabri (natalizumab)
- Vumeridad (fumarato de diroximel)
Pregúntele a su neurólogo sobre los posibles beneficios y riesgos de cada uno antes de elegir tomar uno de estos medicamentos potentes.
¿Cuál es la perspectiva?
Con CIS, no hay forma de saber con certeza si eventualmente desarrollará EM. Puede que nunca tengas otro episodio.
Pero si parece que tiene un alto riesgo de desarrollar EM, tiene mucho que considerar.
El siguiente paso es consultar con un neurólogo experimentado en el tratamiento de CIS y MS. Antes de tomar decisiones de tratamiento, puede ser conveniente buscar una segunda opinión.
Ya sea que elija tomar medicamentos para la EM o no, asegúrese de notificar a su médico a la primera señal de otro episodio.
La EM afecta a todos de manera diferente. Es imposible predecir la perspectiva a largo plazo de una persona. Después de 15 a 20 años, un tercio de las personas con EM tienen una discapacidad mínima o nula. La mitad tiene una forma progresiva de EM y discapacidades crecientes.