Cómo manejar un episodio depresivo
Contenido
- Detectar los síntomas de los episodios de depresión.
- ¿Qué desencadena episodios de depresión?
- Tratamiento de episodios de depresión
- Medicamentos para la depresión.
- Terapia de conversación
- Manejo de los síntomas de depresión
La depresión puede ser una niebla espesa que te cubre de tristeza día tras día. O bien, puede venir en ondas oscuras llamadas episodios que se apoderan de ti y mantienen tu cabeza bajo el agua durante dos semanas o más a la vez.
Más de 16 millones de adultos en los Estados Unidos, o casi el 7 por ciento de la población, han tenido al menos un episodio de depresión mayor. Incluso si ya ha lidiado con la depresión anteriormente, un nuevo episodio puede dejarlo ciego y dejarlo inseguro de cómo sobrellevarlo.
Aquí hay un vistazo a lo que desencadena los episodios depresivos, cómo reconocerlos cuando aparecen y las mejores formas de manejarlos.
Detectar los síntomas de los episodios de depresión.
Sentirse deprimido de vez en cuando no es necesariamente un síntoma de depresión. Lo que distingue un verdadero episodio depresivo es que tiene síntomas como estos durante la mayor parte del día, casi todos los días, durante al menos dos semanas:
- humor triste
- sentimiento de desesperanza, inutilidad, culpa o vacío
- ansiedad
- inquietud
- ira o irritabilidad
- pérdida de interés en actividades que alguna vez amó
- falta de energía
- fatiga
- pensamiento o movimientos lentos
- dificultad para concentrarse, recordar o tomar decisiones
- durmiendo demasiado o muy poco
- pérdida de apetito o comer en exceso y ansiar ciertos alimentos
- dolores de cabeza, dolores de estómago u otros dolores de estómago inexplicables que no tienen una explicación médica clara
- pensamientos de muerte o suicidio
Si tiene alguno de estos síntomas durante un período prolongado, consulte a un psicólogo, psiquiatra o a su médico de atención primaria para una evaluación. Si los episodios comienzan de nuevo, incluso una vez que esté en tratamiento, es posible que deba ajustar su medicación o intentar un enfoque diferente.
¿Qué desencadena episodios de depresión?
La depresión no siempre necesita un desencadenante. La tristeza puede llegar sin ningún evento desagradable o advertencia.
Sin embargo, se sabe que ciertas situaciones desencadenan un estado de ánimo negativo. Los desencadenantes comunes de la depresión incluyen:
- un cambio importante en la vida, como una mudanza, graduación o un nuevo trabajo
- problemas financieros, incluyendo bancarrota o deuda
- problemas de relación como la tensión en la familia, una ruptura o un divorcio (propio o de un ser querido)
- la muerte de un ser querido
- dar a luz a un niño (esto se llama depresión posparto)
- soledad, por ejemplo, si amigos y familiares se han mudado
- estrés en el trabajo o en el hogar
- usando alcohol o drogas
- enfermedad mayor
Algunos de estos desencadenantes están bajo su control.Por ejemplo, puede evitar beber alcohol o usar drogas si empeoran su tristeza. Otros, como una enfermedad crónica, son más difíciles de evitar.
Cuando no puede evitar la depresión, su enfoque debe centrarse en manejarla. Es posible que no pueda cambiar sus circunstancias, pero puede trabajar con un psicólogo o consejero para ayudarlo a sobrellevar su tristeza.
Tratamiento de episodios de depresión
Cuando la depresión llega como un visitante desagradable, no tiene que renunciar a su calidad de vida. La medicación, la terapia y las técnicas de afrontamiento en el hogar pueden hacer que los síntomas sean más manejables.
Medicamentos para la depresión.
Los antidepresivos son la principal terapia de medicamentos para la depresión. Aumentan los niveles de químicos cerebrales como la serotonina y la noradrenalina para aliviar los síntomas.
Hay varias clases diferentes de antidepresivos.
Los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) son el tipo más común de antidepresivos que recetan los médicos. Incluyen:
- citalopram (Celexa)
- escitalopram (Lexapro)
- fluoxetina (Prozac)
- paroxetina (Paxil)
- sertralina (Zoloft)
Los inhibidores de la recaptación de serotonina-noradrenalina (IRSN) son los segundos antidepresivos más comúnmente recetados. Incluyen:
- desvenlafaxina (Pristiq)
- duloxetina (Cymbalta)
- venlafaxina (Effexor)
Los inhibidores de la recaptación de norepinefrina-dopamina (NDRI) son otra opción. Incluyen:
- bupropion (Wellbutrin)
- mirtazapina (Remeron)
Los antidepresivos pueden tomar hasta tres meses para comenzar a funcionar. Si después de ese tiempo, aún no han controlado sus síntomas, su médico puede cambiar su dosis, cambiarlo a una clase diferente de medicamento o agregar otro medicamento.
Terapia de conversación
El segundo elemento para tratar la depresión es la psicoterapia, o terapia de conversación. La investigación encuentra que combinar antidepresivos con terapia funciona mejor que cualquier tratamiento solo.
Existen varios tipos diferentes de terapia para la depresión. La terapia cognitiva conductual (TCC) es muy efectiva porque ayuda a revertir los patrones negativos de pensamiento que contribuyen a la tristeza. La TCC se realiza en una serie de 8 a 16 sesiones.
La terapia interpersonal (IPT) es otro enfoque. IPT se enfoca en problemas en sus relaciones que contribuyen a su depresión. Las sesiones de terapia también pueden involucrar a su pareja u otros miembros de la familia si sus relaciones son problemáticas.
Manejo de los síntomas de depresión
Junto con los medicamentos y la terapia, aquí hay algunos consejos de estilo de vida para ayudarlo a sobrellevar los síntomas de depresión:
- Ejercicio. Correr, andar en bicicleta, nadar: cualquier actividad que elija aumentará los niveles de químicos cerebrales que lo harán sentir mejor. Trate de mantenerse activo en la mayoría de los días de la semana, si no en todos.
- Dormir lo suficiente. Intenta descansar de siete a nueve horas por noche. Dormir muy poco puede acentuar los síntomas de depresión, como la irritabilidad y la fatiga mental.
- Mantente conectado. La soledad puede empeorar la depresión. Intente salir con amigos o conéctese con ellos por teléfono o computadora.
- Comer bien. Evite el azúcar y los alimentos pesados en carbohidratos como papas fritas y galletas Causan picos y caídas de azúcar en la sangre que pueden hacer que se sienta peor. En cambio, alimente su cuerpo y mente con alimentos ricos en nutrientes como frutas, verduras, pescado y granos integrales.
- Limite el alcohol. Beber unas copas de vino puede hacerte sentir mejor en este momento, pero no es una estrategia de afrontamiento efectiva. El alcohol actúa como un depresor del sistema nervioso central, y puede empeorar los síntomas de depresión.