¿Qué es la metanfetamina y cuáles son los efectos en el cuerpo?
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La metanfetamina es una droga sintética, que generalmente se produce en laboratorios ilegales en forma de polvo, píldoras o cristales. Por tanto, dependiendo de la forma en que se encuentre el fármaco, se puede ingerir, inhalar, fumar o inyectar.
A pesar de haber sido utilizada durante algunos años como medicamento estimulante, en la actualidad, la metanfetamina es una sustancia prohibida por ANVISA. No debe confundirse con la anfetamina, que todavía se utiliza como medicamento, en los casos estrictamente indicados por el médico, como estimulante del sistema nervioso. Comprenda qué son las anfetaminas y cuáles son sus efectos.
Como esta hecho
La metanfetamina es una droga fabricada en el laboratorio, derivada de la anfetamina y, en laboratorios clandestinos, puede obtenerse mediante la manipulación de efedrina, sustancia presente en los medicamentos para el resfriado y la gripe.
Este fármaco se presenta en forma de un polvo blanco, cristalino, inodoro y de sabor amargo, que es soluble en líquidos y se utiliza de forma inadecuada de varias formas, inhalado, fumado, ingerido o inyectado. También se puede transformar en clorhidrato de metanfetamina, que tiene una forma cristalizada, lo que la hace fumable y con un mayor potencial de causar adicción.
Cuales son los efectos
Las anfetaminas tienen varios efectos en el cuerpo, ya que aumentan de manera potente los neurotransmisores cerebrales como la serotonina, la dopamina y la noradrenalina. Inmediatamente después de su consumo, algunos de los efectos que se sienten incluyen euforia, extraversión y energía, intensificación de la sexualidad e inhibición del apetito.
Las personas que usan este medicamento también pueden tener alucinaciones y un mejor desempeño en las tareas físicas e intelectuales.
Cuáles son los riesgos asociados con el uso
Los efectos más comunes causados por la metanfetamina son el aumento de la frecuencia cardíaca, la presión arterial y la temperatura corporal, lo que provoca sudoración intensa.
En dosis elevadas puede provocar inquietud, irritabilidad y ataques de pánico o incluso provocar convulsiones y provocar la muerte por insuficiencia respiratoria, infarto o insuficiencia cardíaca.
Dado que este fármaco provoca disminución del apetito, su uso prolongado puede provocar desnutrición, pérdida de peso y dependencia psicológica. Las personas que usan metanfetamina durante un período prolongado, cuando dejan de usarla, pueden experimentar un período prolongado de ansiedad, irritabilidad, trastornos del sueño, dolores de cabeza, problemas dentales, depresión profunda, deterioro cognitivo, cansancio y apariencia envejecida. Busque señales de que alguien esté consumiendo drogas.
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