Perforación gastrointestinal

La perforación es un agujero que se desarrolla a través de la pared de un órgano del cuerpo. Este problema puede ocurrir en el esófago, el estómago, el intestino delgado, el intestino grueso, el recto o la vesícula biliar.

La perforación de un órgano puede deberse a diversos factores. Éstas incluyen:

• Apendicitis
• Cáncer (todos los tipos)
• enfermedad de Crohn
• Diverticulitis
• Enfermedad de la vesícula
• La enfermedad de úlcera péptica
• Colitis ulcerosa
• Obstrucción intestinal
• Agentes de quimioterapia
• Aumento de la presión en el esófago causado por vómitos fuertes
• Ingestión de sustancias cáusticas

También puede ser causado por una cirugía en el abdomen o procedimientos como la colonoscopia o la endoscopia digestiva alta.

La perforación del intestino u otros órganos hace que el contenido se filtre hacia el abdomen. Esto provoca una infección grave llamada peritonitis.

Los síntomas pueden incluir:

• Dolor abdominal severo
• Escalofríos
• Fiebre
• Náusea
• Vómitos
• Choque

Las radiografías de tórax o abdomen pueden mostrar aire en la cavidad abdominal. A esto se le llama aire libre. Es un signo de desgarro. Si el esófago está perforado, se puede ver aire libre en el mediastino (alrededor del corazón) y en el pecho.

Una tomografía computarizada del abdomen a menudo muestra dónde se encuentra el orificio. El recuento de glóbulos blancos suele ser más alto de lo normal.

Un procedimiento puede ayudar a encontrar el área de la perforación, como una endoscopia superior (EGD) o una colonoscopia.

El tratamiento con mayor frecuencia consiste en una cirugía de emergencia para reparar el orificio.

• A veces, se debe extirpar una pequeña parte del intestino. Se puede sacar un extremo del intestino a través de una abertura (estoma) hecha en la pared abdominal. Esto se llama colostomía o ileostomía.
• También puede ser necesario un drenaje del abdomen u otro órgano.

En casos raros, las personas pueden tratarse solo con antibióticos si la perforación se ha cerrado. Esto se puede confirmar mediante un examen físico, análisis de sangre, tomografía computarizada y radiografías.

La cirugía es exitosa la mayor parte del tiempo. Sin embargo, el resultado dependerá de la gravedad de la perforación y del tiempo que estuvo presente antes del tratamiento. La presencia de otras enfermedades también puede afectar el pronóstico de una persona después del tratamiento.

Incluso con la cirugía, la infección es la complicación más común de la afección. Las infecciones pueden estar dentro del abdomen (absceso abdominal o peritonitis) o en todo el cuerpo. La infección de todo el cuerpo se llama sepsis. La sepsis puede ser muy grave y provocar la muerte.

Llame a su proveedor de atención médica si tiene:

• Sangre en las heces
• Cambios en los hábitos intestinales.
• Fiebre
• Náusea
• Dolor abdominal severo
• Vómitos
• Llame al 911 de inmediato si usted u otra persona ha ingerido una sustancia cáustica.

Llame al número de emergencia del centro local de control de intoxicaciones al 1-800-222-1222 si una persona ha ingerido una sustancia cáustica. Este número de línea directa le permitirá hablar con expertos en intoxicaciones.

NO espere hasta que la persona tenga síntomas antes de pedir ayuda.

Las personas suelen tener unos días de dolor antes de que se produzca la perforación intestinal. Si tiene dolor en el abdomen, consulte a su proveedor de inmediato. El tratamiento es mucho más sencillo y seguro cuando se inicia antes de que se produzca la perforación.

Perforación intestinal; Perforación de los intestinos; Perforación gástrica; Perforación esofágica

• Sistema digestivo
• Órganos del sistema digestivo

Matthews JB, Turaga K. Peritonitis quirúrgica y otras enfermedades del peritoneo, mesenterio, epiplón y diafragma. En: Feldman M, Friedman LS, Brandt LJ, eds. Enfermedad gastrointestinal y hepática de Sleisenger y Fordtran. 11ª ed. Filadelfia, PA: Elsevier; 2021: cap 39.

Squires R, Carter SN, Postier RG. Abdomen agudo. En: Townsend CM Jr, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL, eds. Libro de texto de cirugía de Sabiston. 20ª ed. Filadelfia, PA: Elsevier; 2017: capítulo 45.

Wagner JP, Chen DC, Barie PS, Hiatt JR. Peritonitis e infección intraabdominal. En: Vincent J-L, Abraham E, Moore FA, Kochanek PM, Fink MP, eds. Libro de texto de cuidados intensivos. 7ª ed. Filadelfia, PA: Elsevier; 2017: capítulo 99.