Calambres en la mandíbula: por que ocurre y que hacer
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Los calambres en la mandíbula se producen cuando los músculos de la región debajo del mentón se contraen involuntariamente, provocando dolor en la región, dificultad para abrir la boca y la sensación de una pelota dura en la zona.
Así, como cualquier otro tipo de calambre, esta afección provoca mucho dolor y suele surgir tras el bostezo, cuando es necesario utilizar estos músculos, conocidos como geniogloso y geniohioideo, para levantar la lengua.
Aunque es muy incómodo, los calambres en la mandíbula suelen ser una situación temporal que se resuelve en pocos minutos y no requiere un tratamiento especial.
Síntomas principales
El síntoma principal de los calambres en la mandíbula, o debajo del mentón, es la aparición de un dolor muy severo en la región. Sin embargo, es común que el dolor vaya acompañado de:
- Dificultad para abrir o mover la boca;
- Sensación de lengua rígida;
- Presencia de una bola dura debajo del mentón.
En algunos casos, el dolor también puede afectar el cuello y los oídos, especialmente cuando dura varios minutos.
Cómo aliviar los calambres
Una de las formas más fáciles y rápidas de aliviar el dolor causado por los calambres es dando un ligero masaje al músculo, utilizando la punta o los nudillos. Sin embargo, aplicar calor en el área también puede ayudar, especialmente cuando el calambre tarda en desaparecer.
Una vez que desaparece el calambre, es normal que el dolor disminuya pero que permanezca durante algún tiempo, ya que es común que el músculo esté adolorido, necesitando tiempo para recuperarse.
Además, como los calambres son relativamente comunes, hay formas de tratar de evitar que vuelvan a aparecer, como abrir lentamente la boca, cada vez que necesite bostezar, así como tratar de mantener la lengua en la parte inferior de la boca, para evitar contraer el exceso de músculos en la región.
Por que ocurren los calambres
En la mayoría de los casos, el calambre ocurre después de bostezar, cuando hay una contracción excesiva y rápida de los músculos encargados de levantar la lengua. Sin embargo, otras situaciones que también pueden ser la causa de los calambres incluyen:
- Hablar durante mucho tiempo sin descanso: esta causa es más frecuente en profesores o cantantes, por ejemplo;
- Masticar demasiado fuerte: puede suceder cuando se tiene un trozo de comida muy grande o cuando la comida está muy dura;
- Deficiencia de magnesio y potasio: la falta de estos minerales provoca la aparición de espasmos en varios músculos del cuerpo;
- Falta de vitamina B: además de la deficiencia de minerales, la falta de cualquier tipo de vitamina del complejo B también puede causar calambres frecuentes en cualquier músculo del cuerpo;
- Deshidración: la falta de agua en el cuerpo también dificulta la función muscular, facilitando la aparición de calambres.
Además, estar muy cansado o tener un exceso de estrés también puede contribuir a la aparición de calambres, ya que dificultan el normal funcionamiento del sistema nervioso.
Así, si el calambre es muy frecuente, es importante consultar a un médico para valorar si existe alguna causa que necesite un tratamiento más específico.