Que es y como tratar la enfermedad de Kienbock
Contenido
- Cómo aliviar los síntomas
- 1. Inmovilización de la muñeca
- 2. Remedios antiinflamatorios
- 3. Ejercicios de fisioterapia y estiramiento
- 4. Cirugía
- Cómo confirmar el diagnóstico
La enfermedad de Kienbock es una afección en la que uno de los pequeños huesos que componen la muñeca, conocido como hueso lunar, no recibe la cantidad de sangre requerida y, por lo tanto, comienza a deteriorarse, causando dolor constante en la muñeca y dificultad para mover o cerrar la mano. , por ejemplo.
Este cambio puede aparecer a cualquier edad, sin embargo, es más común entre los 20 y los 40 años y rara vez afecta a ambos puños al mismo tiempo.
Aunque no existe una cura definitiva para la enfermedad de Kienbock, se pueden utilizar algunas formas de tratamiento, como la cirugía o el uso de medicamentos, para aliviar la presión sobre los huesos y aliviar los síntomas.
Cómo aliviar los síntomas
El tratamiento de la enfermedad de Kienbock se realiza únicamente para aliviar el dolor y la dificultad con los movimientos de la muñeca, ya que el aumento de la circulación al hueso es muy difícil de conseguir. Para ello, existen varias formas de tratamiento que deben ser evaluadas por un ortopedista según el grado de desarrollo de la enfermedad y la intensidad de los síntomas.
Algunas de las formas de tratamiento más utilizadas incluyen:
1. Inmovilización de la muñeca
Muchos casos de enfermedad de Kienbock pueden mejorar solo con la inmovilización de la muñeca, ya que de esta manera el hueso está menos sobrecargado, lo que permite disminuir la inflamación y la presión en el sitio.
Para inmovilizar la muñeca, el médico suele aplicar yeso en la mano, que debe conservarse durante al menos 2 o 3 semanas.
2. Remedios antiinflamatorios
El uso de medicamentos antiinflamatorios, como la aspirina o el ibuprofeno, es una de las primeras formas de tratar este problema y generalmente funciona aliviando la hinchazón de los tejidos alrededor del hueso semilunar, reduciendo la presión y aliviando el dolor.
3. Ejercicios de fisioterapia y estiramiento
Realizar algunos ejercicios de estiramiento de la muñeca puede ayudar a aliviar la presión de los músculos sobre los huesos, aliviando el dolor y permitiendo una mayor libertad de movimiento.
Por lo general, estos ejercicios se pueden realizar durante las sesiones de fisioterapia, pero también se pueden entrenar en casa con la orientación de un fisioterapeuta. A continuación, se muestran algunos estiramientos de muñeca que pueden ayudar a aliviar el dolor.
4. Cirugía
El tratamiento quirúrgico suele reservarse para casos más avanzados de enfermedad de Kienbock, cuando los síntomas no mejoran con las formas de tratamiento indicadas anteriormente.
El tipo de cirugía varía según la persona y el problema específico, que incluyen:
- Reposicionamiento de los huesos de la articulación de la muñeca: cuando uno de los huesos del brazo es un poco más corto, el médico puede insertar un pequeño injerto óseo o extraer un trozo del hueso más largo, para equilibrar la articulación y reducir la presión sobre el hueso semilunar, aliviando los síntomas;
- Extracción de hueso semilunar: cuando el hueso semilunar está muy deteriorado, el ortopedista puede optar por retirar completamente el hueso. Sin embargo, en estos casos también es necesario retirar los dos huesos que están a los lados, lo que elimina el dolor, pero puede reducir el rango de movimiento de la muñeca;
- Fusión de los huesos de la muñeca: en algunos casos, una opción de tratamiento consiste en pinchar los huesos de la muñeca, para formar un solo hueso que recibe la circulación sanguínea del resto de huesos que se separaron, aliviando todos los síntomas.
Además, la cirugía también se puede utilizar en una de las primeras etapas de la enfermedad para tratar de dirigir el flujo sanguíneo al hueso semilunar. En esta técnica, el médico extrae un trozo de otro hueso que está recibiendo sangre y lo pega al hueso semilunar, permitiendo que también sea regado con sangre. Sin embargo, esta técnica no es posible en todos los casos y puede que no muestre resultados postoperatorios satisfactorios.
Cómo confirmar el diagnóstico
El dolor causado por la enfermedad de Kienbock se confunde a menudo con el síndrome del túnel carpiano y, por tanto, es recomendable consultar a un ortopedista para confirmar el diagnóstico e iniciar el tratamiento adecuado.
Para hacer el diagnóstico, el médico puede ordenar algunas pruebas de diagnóstico como radiografías de muñeca y resonancias magnéticas. Estas pruebas también facilitan la valoración del grado de evolución del problema:
- Etapa 1: en esta fase la radiografía suele ser normal, pero la resonancia magnética indica falta de circulación al hueso;
- Etapa 2: el hueso semilunar comienza a endurecerse debido a la falta de circulación y, por lo tanto, parece más blanco que los otros huesos de la muñeca, en la radiografía;
- Etapa 3: en esta etapa el hueso comienza a romperse y, por lo tanto, los exámenes pueden mostrar las diversas piezas en el sitio del hueso y el cambio en la posición de los huesos circundantes;
- Etapa 4: es la fase más avanzada donde los fragmentos de huesos semilunares provocan el deterioro de los huesos circundantes, provocando artritis en la muñeca.
A medida que avanza la enfermedad, el dolor en la muñeca se vuelve más intenso y los movimientos se vuelven más difíciles. Así, saber en qué etapa le permite al médico elegir la opción de tratamiento más adecuada.