4 exfoliantes caseros para cada tipo de piel
Contenido
Con ingredientes simples y naturales como azúcar, miel y harina de maíz es posible hacer excelentes exfoliantes caseros que se pueden usar semanalmente para limpiar la piel más profundamente.
La exfoliación es una técnica que consiste en frotar una sustancia sobre la piel que tiene microesferas que no se disuelven. Esto abre un poco más los poros y elimina las impurezas, eliminando las células muertas y dejando la piel lista para ser hidratada. Así, la crema hidratante consigue penetrar aún más en la piel y el resultado es aún mejor porque deja la piel más tersa y suave.
Para preparar un buen exfoliante casero para tu tipo de piel, sigue los siguientes pasos:
Ingredientes
1. Exfoliante casero para pieles mixtas o grasas:
- 2 cucharadas de miel
- 5 cucharadas de azucar
- 4 cucharadas de agua tibia
2. Exfoliante casero para pieles secas:
- 45 g de harina de maíz
- 1 cucharada de sal marina
- 1 cucharadita de aceite de almendras
- 3 gotas de aceite esencial de menta
3. Exfoliante casero para pieles sensibles:
- 125 ml de yogur natural
- 4 fresas frescas
- 1 cucharada de miel
- 30 g de azúcar
4. Exfoliante casero para niños:
- 2 cucharadas de yogur natural
- 1 cucharada de miel y
- 1 cucharada de café molido
Modo de preparo
Todos los ingredientes deben mezclarse en un recipiente limpio y mezclarse hasta que formen una pasta consistente.
Para utilizarlo, basta con aplicar el exfoliante sobre la piel del cuerpo o del rostro, realizando movimientos circulares. Además, puedes utilizar un trozo de algodón para ayudar a frotar la piel, siempre con movimientos circulares. Estos exfoliantes naturales también se pueden utilizar en codos, rodillas, manos y pies.
Incluso los niños mayores de 6 años pueden recibir una exfoliación de la piel, pero especialmente en áreas donde la piel es naturalmente más seca y áspera como las rodillas. Durante la aplicación se recomienda no frotar demasiado la piel del niño, para no lastimar o causar dolor. La exfoliación en la infancia puede ocurrir de forma esporádica, cuando los padres sienten la necesidad y cuando el niño tiene las rodillas muy ásperas y secas, por ejemplo.
Principales beneficios de la exfoliación para la piel
La exfoliación sobre la piel aumenta la circulación sanguínea y estimula la renovación de las células de la superficie cutánea, que está llena de queratina, lo que la deja seca y sin vitalidad y con eso la piel está más bella y rejuvenecida.
Además, la exfoliación facilita la penetración de sustancias hidratantes, por lo que tras la exfoliación la piel necesita ser hidratada con crema, loción hidratante o un aceite vegetal, como almendra, jojoba o aguacate.