Examen de proteínas totales y fracciones: qué es y cómo entender el resultado.
Contenido
- Valores de referencia
- Cuando hacer el examen
- Que significa el resultado del examen
- 1. Proteínas totales bajas
- 2. Alto contenido de proteínas
- ¿Qué pueden ser las proteínas en la orina?
La medición de las proteínas totales en la sangre refleja el estado nutricional de la persona y puede utilizarse en el diagnóstico de trastornos renales, hepáticos y de otro tipo. Si se alteran los niveles de proteína total, se deben realizar más pruebas para identificar qué proteína específica está alterada, de modo que se pueda hacer el diagnóstico correcto.
Las proteínas son estructuras muy importantes para el buen funcionamiento del organismo, tomando una variedad de formas como albúmina, anticuerpos y enzimas, desempeñando funciones como combatir enfermedades, regular funciones corporales, construir músculo y transportar sustancias por todo el cuerpo.
Valores de referencia
Los valores de referencia para personas de 3 años y más son:
- Proteínas totales: 6 a 8 g / dL
- Albúmina: 3 a 5 g / dL
- Globulina: entre 2 y 4 g / dL.
Sin embargo, estos valores deben usarse como una guía y pueden variar levemente entre laboratorios.
Para realizar esta prueba, la medición se realiza sobre el suero que se extrae de la muestra de sangre, y generalmente toma entre 3 a 8 horas de ayuno antes de tomar la muestra, sin embargo, debe consultar al laboratorio para obtener más información sobre la preparación para esta examen.
Cuando hacer el examen
El examen de proteínas totales solo puede ser parte de un examen de rutina, o puede realizarse en casos de pérdida de peso reciente, cuando hay signos y síntomas de enfermedad renal o hepática, o para investigar la acumulación de líquido en los tejidos.
También se pueden medir las fracciones, que consiste en el fraccionamiento de las proteínas en dos grandes grupos, la albúmina y la otra con el resto, en la que la mayor parte es globulina, para hacer un diagnóstico más certero.
Que significa el resultado del examen
Los valores cambiantes de los niveles de proteínas pueden ser indicadores de diversas enfermedades, dependiendo en gran medida de la proteína que se altere.
1. Proteínas totales bajas
Las posibles causas que conducen a una disminución de las proteínas en la sangre son:
- Alcoholismo crónico;
- Enfermedades del hígado, que perjudican la producción de albúmina y globulina en el hígado;
- Enfermedad renal debido a la pérdida de proteínas en la orina;
- El embarazo;
- Hidratación excesiva;
- Cirrosis;
- Hipertiroidismo;
- Deficiencia de calcio y vitamina D;
- Insuficiencia cardíaca;
- Síndrome de malabsorción.
Además, la desnutrición grave también puede provocar una reducción de los niveles de proteínas en la sangre. Vea qué comer para normalizar los niveles de proteínas.
2. Alto contenido de proteínas
Las posibles causas que conducen a un aumento de proteínas en la sangre son:
- Aumento de la producción de anticuerpos en algunas enfermedades infecciosas;
- Cáncer, principalmente en mieloma múltiple y macroglobulinemia;
- Enfermedades autoinmunes, como artritis reumatoide y lupus eritematoso sistémico,
- Enfermedades granulomatosas;
- Deshidratación, porque el plasma sanguíneo está más concentrado;
- Hepatitis B, C y autoinmune;
- Amiloidosis, que consiste en una acumulación anormal de proteínas en varios órganos y tejidos celulares.
Aunque la disminución de los niveles de proteínas puede ser un signo de desnutrición, una dieta alta en proteínas no aumenta los niveles de proteínas en la sangre.
¿Qué pueden ser las proteínas en la orina?
Las proteínas también se pueden cuantificar en orina, en casos de proteinuria, en los que la cantidad de proteína es mayor de lo normal. Generalmente, las proteínas no pueden atravesar los glomérulos o los filtros renales durante la filtración de la sangre, debido a su tamaño, sin embargo es normal encontrar cantidades residuales.
Sin embargo, existen algunas situaciones que pueden provocar un aumento temporal de los niveles de proteínas, que puede resultar de la exposición a frío intenso, calor, fiebre alta, actividad física intensa o estrés, que no es motivo de preocupación o un aumento que se prolonga por más tiempo. , que puede ser un signo de la presencia de trastornos como enfermedad renal, diabetes, hipertensión o artritis reumatoide, por ejemplo. Obtenga más información sobre la proteinuria.