Fisioterapia de disco herniado
Contenido
- Beneficios de la fisioterapia en la hernia de disco
- 6 formas de tratar las hernias de disco
- 1. Uso de equipo electrónico
- 2. Calor
- 3. Estiramiento para hernia de disco
- 4. Ejercicios para hernias de disco
- 5. Tracción cervical o lumbar
- 6. Técnicas de manipulación
- Cuidado del día a día
La fisioterapia es excelente para el tratamiento de las hernias de disco y se puede realizar con ejercicios de estiramiento y fortalecimiento, equipos electrónicos, utilizando una compresa caliente. Otras técnicas que pueden resultar útiles son Pilates, hidroterapia, RPG y tracción espinal, por ejemplo.
As sessões podem ser realizadas diariamente com folga aos fins de semana, quando a pessoa estiver sentindo muita dor, mas pode ser realizada apenas 1 ou 2 vezes por semana quando a dor surgir somente em determinadas situações como ao abaixar ou levantar algum peso do chão, por ejemplo.
Beneficios de la fisioterapia en la hernia de disco
El tratamiento de fisioterapia para la hernia de disco tiene los siguientes beneficios:
- Alivio del dolor de espalda y del dolor que se irradia a brazos o piernas, por ejemplo;
- Mayor rango de movimiento;
- Mayor resistencia física;
- Evite la cirugía de columna;
- Reducir los analgésicos.
Los discos herniados ocurren cuando el disco entre las vértebras espinales está dañado y puede causar compresión de la raíz nerviosa, por ejemplo. Por lo general, antes de descubrir la hernia, unos 10 años antes de que hubiera algo de dolor en la columna. Las regiones de la columna vertebral más afectadas son las regiones cervical y lumbar.
6 formas de tratar las hernias de disco
Dentro de la fisioterapia se pueden utilizar diversos recursos para combatir el dolor y recuperar el equilibrio y el bienestar de la persona que tiene una hernia de disco. Algunas posibilidades de tratamiento para personas con dolor intenso son:
1. Uso de equipo electrónico
Aparatos como el ultrasonido, la corriente galvánica, la TENS y el láser se pueden utilizar como antiinflamatorios que ayudan a aliviar los síntomas, reduciendo el dolor y las molestias en la columna. Deben aplicarse según la necesidad que presente la persona, y su duración de acción varía entre 8 a 25 minutos, para cada zona de tratamiento.
2. Calor
Es otra forma de aliviar el dolor de espalda y preparar el cuerpo para un masaje, ya que aumenta la circulación sanguínea y la llegada de más nutrientes a los tejidos. El calor se puede utilizar con bolsas o toallas calientes o con luz infrarroja, por ejemplo, durante unos 20 minutos.
3. Estiramiento para hernia de disco
Los ejercicios de estiramiento están indicados desde el inicio de las sesiones de fisioterapia, siendo importantes para aumentar la flexibilidad, normalizar el tono muscular y reorganizar las fibras musculares y también son excelentes para mejorar la postura corporal en el día a día.
Estiramiento para una hernia de disco lumbar
4. Ejercicios para hernias de disco
Están indicados para cuando la persona no tiene dolor agudo y ayudan a fortalecer grupos musculares débiles o desequilibrados. Existen varios tipos de ejercicios que se pueden utilizar, como Reeducación Postural Global, Pilates Clínico e Hidroterapia, por ejemplo, estos 2 últimos también se pueden utilizar como actividad física.
Los ejercicios de RPG son monótonos, pero son de gran ayuda, siendo una de las mejores opciones para evitar tener que someterse a una cirugía de hernia discal. Los ejercicios de pilates están especialmente indicados porque fortalecen los músculos pequeños, pero muy importante que mantengan la espalda erguida y la fuerza del abdomen, que también protege la columna. La hidroterapia se realiza dentro de la piscina, guiada por un fisioterapeuta y consta de ejercicios que implican correr en el agua e incluso nadar.
En este video indico algunos ejercicios para la ciática, que están indicados en caso de hernia de disco:
5. Tracción cervical o lumbar
Se trata de un tipo de tratamiento que se puede realizar de forma manual, donde el fisioterapeuta sujeta firmemente el cuello de la persona, acostado en una camilla, manteniendo la columna alineada y tirando de la cabeza verticalmente, para favorecer una liberación de tensión entre las vértebras, permitiendo una mayor hidratación. del disco vertebral y, a veces, su regreso a la ubicación original. La tracción de la columna también se puede realizar en un equipo específico que funciona de la misma manera, tirando del cuello en una dirección y la lumbar en la dirección opuesta, manteniendo la tracción durante 20 a 30 segundos, durante unas 5 a 10 repeticiones, por ejemplo.
6. Técnicas de manipulación
Las técnicas de manipulación se pueden realizar en la columna y sirven para reducir la presión sobre la columna, realinear todas las estructuras corporales y, a menudo, provocar una sensación de mayor ligereza y facilidad de movimiento. Esta técnica es especialmente adecuada para cuando la persona tiene dificultades para realizar determinados movimientos porque se siente "atrapada".
Cada sesión de fisioterapia debe ser individualizada y tiene una duración aproximada de 1 hora, pero además ciertos ejercicios también deben realizarse en casa, cuando así lo indique el fisioterapeuta.
Vea otras opciones de tratamiento para hernias de disco.
Cuidado del día a día
La persona que tiene una hernia cervical o lumbar necesita algunos cuidados que pueden ayudar con el alivio del dolor, como:
- Evite sentarse o acostarse por más de 2 horas, siempre que no sea para dormir;
- Duerma en la posición correcta de la columna;
- Al agacharse para recoger algo del suelo, siempre doble las piernas en lugar de inclinar el cuerpo hacia adelante;
- Si prefiere seguir moviéndose para reducir la rigidez de la columna, puede caminar o andar en bicicleta, por ejemplo;
- Prefiera un colchón firme que soporte mejor la columna, también evite sentarse en sofás y sillas muy suaves y bajos;
- Los alimentos antiinflamatorios, como el jengibre y el salmón, son los más adecuados siempre que tengas una crisis de columna.
Vea estos y otros consejos en el siguiente video:
Ejercicios como saltar la comba o clases de salto en el gimnasio no son los más recomendados porque pueden favorecer la compresión del disco, iniciando un nuevo cuadro de dolor. Los ejercicios en el agua, como los aeróbicos acuáticos, son más adecuados porque en el agua el cuerpo es más liviano, no teniendo tanto impacto en las articulaciones y la columna.