Ataque cardíaco fulminante: que es, síntomas, causas y que hacer
Contenido
- ¿Qué causa un ataque cardíaco fulminante?
- Principales síntomas del infarto fulminante
- Qué hacer en un infarto fulminante
- Cómo se realiza el tratamiento fulminante
- Cómo prevenir un infarto
El infarto fulminante es aquel que aparece repentinamente y que a menudo puede causar la muerte de la víctima antes de que pueda ser atendido por el médico. Casi la mitad de los casos muere antes de llegar al hospital, por la rapidez con la que ocurre y la falta de una atención eficaz.
Este tipo de infarto ocurre cuando hay una interrupción abrupta del flujo sanguíneo al corazón, y generalmente es causado por cambios genéticos, que provocan cambios en los vasos sanguíneos o arritmias severas. Este riesgo es mayor en personas jóvenes con cambios genéticos o personas con factores de riesgo de enfermedades cardíacas, como tabaquismo, obesidad, diabetes e hipertensión arterial.
Por su gravedad, el infarto fulminante puede provocar la muerte en minutos, si no se diagnostica y trata con prontitud, provocando la situación conocida como muerte súbita. Por tanto, ante la presencia de síntomas que puedan indicar un infarto, como dolor en el pecho, opresión o dificultad para respirar, por ejemplo, es muy importante buscar atención médica lo antes posible.
¿Qué causa un ataque cardíaco fulminante?
El ataque cardíaco fulminante generalmente es causado por la obstrucción del flujo sanguíneo por la ruptura de una placa grasa que está adherida a la pared interna del vaso. Cuando esta placa se rompe, libera sustancias inflamatorias que impiden el paso de la sangre que transporta el oxígeno a las paredes del corazón.
El infarto fulminante se da especialmente en los jóvenes, ya que aún no cuentan con la denominada circulación colateral, encargada de irrigar el corazón junto con las arterias coronarias. La falta de circulación y de oxígeno hace que el músculo cardíaco sufra, provocando dolor en el pecho, que luego puede resultar en la muerte del músculo cardíaco.
Además, las personas que corren mayor riesgo de desarrollar un ataque cardíaco son:
- Antecedentes familiares de ataque cardíaco, que pueden indicar predisposición genética;
- Edad mayor de 40 años;
- Altos niveles de estrés;
- Enfermedades como hipertensión arterial, diabetes y colesterol alto, especialmente si no se tratan correctamente;
- Sobrepeso;
- De fumar.
Aunque estas personas están más predispuestas, cualquier persona puede desarrollar un infarto, por lo que ante la presencia de signos y síntomas que indiquen esta situación, es muy importante acudir a urgencias para confirmación y tratamientos lo antes posible.
Principales síntomas del infarto fulminante
Aunque puede aparecer sin previo aviso, el infarto fulminante puede provocar síntomas, que pueden aparecer días antes y no solo en el momento del ataque. Algunos de los más comunes incluyen:
- Dolor, sensación de pesadez o ardor en el pecho, que puede localizarse o irradiarse al brazo o la mandíbula;
- Sensación de indigestión;
- Falta de aire;
- Cansancio con sudor frio.
La intensidad y tipo de síntoma que surgen varían según la gravedad de la lesión en el miocardio, que es el músculo cardíaco, pero también según las características personales de las personas, ya que se sabe que las mujeres y los diabéticos tienen tendencia a presentar infartos más tranquilos. . Sepa cuáles son y cómo los síntomas del ataque cardíaco en las mujeres pueden ser diferentes.
Qué hacer en un infarto fulminante
Hasta que se realice el tratamiento por parte del médico en la sala de emergencias, es posible ayudar a una persona con un infarto fulminante a ocurrir, y se recomienda llamar a una ambulancia SAMU llamando al 192, o llevar a la víctima de inmediato al hospital.
Mientras espera la ambulancia, es importante calmar a la persona y dejarla en un lugar tranquilo y fresco, controlando siempre la conciencia y la presencia de pulsos y movimientos respiratorios. Si la persona tiene un paro cardíaco o respiratorio, es posible realizarle un masaje cardíaco, como se muestra en el siguiente video:
Cómo se realiza el tratamiento fulminante
El tratamiento del infarto fulminante se realiza en el hospital, y el médico recomienda el uso de fármacos para mejorar la circulación sanguínea, como la aspirina, además de procedimientos quirúrgicos para restablecer el paso de la sangre al corazón, como el cateterismo.
Si el infarto conduce a un paro cardíaco, el equipo médico iniciará un procedimiento de reanimación cardiopulmonar, con masaje cardíaco y, si es necesario, uso de desfibrilador, como forma de intentar salvar la vida del paciente.
Además, después de la recuperación, es importante iniciar el tratamiento para la rehabilitación de la capacidad física después de un infarto, con fisioterapia, después del alta del cardiólogo. Consulte más detalles sobre cómo tratar el infarto agudo de miocardio.
Cómo prevenir un infarto
Para reducir el riesgo de sufrir un infarto se recomiendan hábitos de vida saludables, como una alimentación adecuada dando preferencia al consumo de verduras, cereales, cereales, frutas, verduras y carnes magras, como la pechuga de pollo a la plancha, por ejemplo.
Además, se recomienda practicar algún tipo de actividad física con regularidad, como una caminata de 30 minutos al menos 3 veces por semana. Otro consejo importante es beber mucha agua y evitar el estrés, tomándose un tiempo para descansar. Consulte nuestros consejos para reducir el riesgo de un ataque cardíaco o un derrame cerebral para cualquier persona.
Vea también el siguiente video y sepa qué comer para prevenir un ataque cardíaco: