¿Tiene miedo de perder su teléfono? Hay un nombre para eso: nomofobia
Contenido
- ¿Cuales son los sintomas?
- ¿Qué causa esta fobia?
- ¿Cómo se diagnostica?
- ¿Cómo se trata una fobia?
- Terapia de conducta cognitiva
- Terapia de exposición
- Medicamento
- Cuidados personales
- La línea de fondo
¿Tiene problemas para dejar su teléfono inteligente o se siente ansioso cuando sabe que perderá el servicio durante unas horas? ¿Te angustian los pensamientos de estar sin tu teléfono?
Si es así, es posible que tenga nomofobia, un miedo extremo a no tener su teléfono o no poder usarlo.
La mayoría de nosotros dependemos de nuestros dispositivos para obtener información y conexión, por lo que es normal preocuparse por perderlos. De repente, no poder encontrar su teléfono probablemente genera preocupaciones sobre cómo lidiar con la pérdida de fotos, contactos y otra información.
Pero la nomofobia, abreviada de "sin fobia al teléfono móvil", describe un miedo a no tener su teléfono que es tan persistente y severo que afecta la vida diaria.
Los resultados de múltiples estudios sugieren que esta fobia se está generalizando. Según, casi el 53 por ciento de los británicos que tenían un teléfono en 2008 se sentían ansiosos cuando no tenían su teléfono, tenían la batería descargada o no tenían servicio.
Al observar a 145 estudiantes de medicina de primer año en la India, se encontró evidencia que sugiere que el 17,9 por ciento de los participantes tenían una nomofobia leve. Para el 60 por ciento de los participantes, los síntomas de la nomofobia fueron moderados y para el 22,1 por ciento, los síntomas fueron graves.
Ningún estudio científico ha informado sobre estadísticas de Estados Unidos. Algunos expertos sugieren que estos números pueden ser más altos, especialmente entre los adolescentes.
Siga leyendo para obtener más información sobre los síntomas y las causas de la nomofobia, cómo se diagnostica y cómo obtener ayuda.
¿Cuales son los sintomas?
La nomofobia no figura en la última edición del Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-5). Los expertos en salud mental aún no han decidido los criterios de diagnóstico formales para esta afección.
Sin embargo, en general se acepta que la nomofobia presenta una preocupación para la salud mental. Algunos expertos incluso han sugerido que la nomofobia representa un tipo de dependencia o adicción al teléfono.
Las fobias son un tipo de ansiedad. Provocan una respuesta de miedo significativa cuando piensas en lo que temes, a menudo provocando síntomas emocionales y físicos.
posibles SÍNTOMAS de NOMOFOBIA
Los síntomas emocionales incluyen:
- preocuparse, tener miedo o entrar en pánico cuando piensa en no tener su teléfono o no poder usarlo
- ansiedad y agitación si tiene que dejar el teléfono o sabe que no podrá usarlo por un tiempo
- pánico o ansiedad si brevemente no puede encontrar su teléfono
- irritación, estrés o ansiedad cuando no puede revisar su teléfono
Los síntomas físicos incluyen:
- opresión en el pecho
- dificultad para respirar normalmente
- temblando o temblando
- aumento de la sudoración
- sentirse débil, mareado o desorientado
- latidos rápidos
Si tiene nomofobia o cualquier fobia, es posible que reconozca que su miedo es extremo. A pesar de esta conciencia, es posible que tenga dificultades para sobrellevar o controlar las reacciones que causa.
Para evitar sentimientos de angustia, puede hacer todo lo posible para mantener su teléfono cerca y asegurarse de poder usarlo. Estos comportamientos podrían parecer sugerir una dependencia de su teléfono. Por ejemplo, podría:
- llévatelo a la cama, al baño, incluso a la ducha
- revíselo constantemente, incluso varias veces en una hora, para asegurarse de que esté funcionando y de que no se haya perdido ninguna notificación
- pasar varias horas al día usando su teléfono
- siéntete impotente sin tu teléfono
- asegúrese de poder verlo siempre que no esté en su mano o bolsillo
¿Qué causa esta fobia?
La nomofobia se considera una fobia moderna. En otras palabras, lo más probable es que se deba a una mayor dependencia de la tecnología y a la preocupación por lo que podría suceder si de repente no pudiera acceder a la información necesaria.
La información existente sobre la nomofobia sugiere que ocurre con mayor frecuencia en adolescentes y adultos jóvenes.
Los expertos aún no han descubierto una causa específica de nomofobia. Más bien, creen que pueden contribuir varios factores.
El miedo al aislamiento puede, comprensiblemente, desempeñar un papel en el desarrollo de la nomofobia. Si su teléfono es su principal método para comunicarse con las personas que le importan, lo más probable es que se sienta bastante solo sin él.
No querer experimentar esta soledad puede hacer que desee mantener su teléfono cerca en todo momento.
Otra causa puede ser el miedo a no ser accesible. Todos mantenemos nuestros teléfonos cerca si estamos esperando un mensaje o una llamada importante. Esto puede convertirse en un hábito difícil de romper.
Las fobias no siempre se desarrollan como respuesta a una experiencia negativa, pero esto sucede a veces. Por ejemplo, si perder su teléfono en el pasado le causó angustia o problemas importantes, es posible que le preocupe que esto vuelva a suceder.
Su riesgo de desarrollar nomofobia puede aumentar si tiene un familiar cercano que tiene fobia u otro tipo de ansiedad.
Vivir con ansiedad en general también puede aumentar su riesgo de desarrollar una fobia.
¿Cómo se diagnostica?
Si reconoces algunos signos de nomofobia en ti mismo, puede ser útil hablar con un terapeuta.
Usar su teléfono con frecuencia o preocuparse por no tener su teléfono no significa que tenga nomofobia. Pero es una buena idea hablar con alguien si ha tenido síntomas durante seis meses o más, especialmente si estos síntomas:
- son frecuentes y persisten durante todo el día
- dañar tu trabajo o tus relaciones
- hacer que sea difícil dormir lo suficiente
- causar problemas en sus actividades diarias
- tener un impacto negativo en la salud o la calidad de vida
Aún no existe un diagnóstico oficial de nomofobia, pero los profesionales de la salud mental capacitados pueden reconocer los signos de fobia y ansiedad y ayudarlo a aprender a lidiar con los síntomas de una manera productiva para ayudar a superar sus efectos.
Un estudiante de doctorado y un profesor asociado de la Universidad Estatal de Iowa trabajaron para desarrollar un cuestionario que podría ayudar a identificar la nomofobia. Luego, realizaron un estudio en 2015 que analizó a 301 estudiantes universitarios para probar este cuestionario y explorar la nomofobia y sus efectos.
Los resultados del estudio sugieren que las 20 declaraciones de la encuesta podrían ayudar de manera confiable a determinar los diversos grados de nomofobia. Una investigación similar puede ayudar a los expertos a trabajar para desarrollar criterios de diagnóstico específicos.
¿Cómo se trata una fobia?
Un terapeuta probablemente le recomendará un tratamiento si experimenta una angustia significativa o tiene dificultades para manejar su vida diaria.
La terapia generalmente puede ayudarlo a abordar los síntomas de la nomofobia. Su terapeuta podría recomendarle terapia cognitivo-conductual o terapia de exposición.
Terapia de conducta cognitiva
La terapia cognitivo-conductual (TCC) puede ayudarlo a aprender a manejar los pensamientos y sentimientos negativos que surgen cuando piensa en no tener su teléfono.
El pensamiento "Si pierdo mi teléfono, nunca podré volver a hablar con mis amigos" puede hacerte sentir ansioso y enfermo. Pero CBT puede ayudarlo a aprender a desafiar lógicamente este pensamiento.
Por ejemplo, en su lugar, podría decir: "Mis contactos están respaldados y obtendré un teléfono nuevo. Los primeros días serían difíciles, pero no sería el fin del mundo ".
Terapia de exposición
La terapia de exposición le ayuda a aprender a enfrentar su miedo a través de una exposición gradual a él.
Si tiene nomofobia, poco a poco se acostumbrará a la experiencia de no tener su teléfono. Esto puede parecer aterrador al principio, especialmente si necesita su teléfono para mantenerse en contacto con sus seres queridos.
Pero el objetivo de la terapia de exposición no es evitar por completo el uso de su teléfono, a menos que ese sea su objetivo personal. En cambio, le ayuda a aprender a abordar el miedo extremo que experimenta cuando piensa en no tener su teléfono. Manejar este miedo puede ayudarlo a usar su teléfono de manera más saludable.
Medicamento
Los medicamentos pueden ayudarlo a lidiar con los síntomas graves de la nomofobia, pero no tratan la causa raíz. Por lo general, no es útil tratar una fobia solo con medicamentos.
Dependiendo de sus síntomas, un psiquiatra puede recomendar el uso de medicamentos durante un período breve a medida que aprende a lidiar con sus síntomas en la terapia. Aqui hay un par de ejemplos:
- Los betabloqueantes pueden ayudar a reducir los síntomas físicos de la fobia, como mareos, dificultad para respirar o taquicardia. Por lo general, los toma antes de enfrentar una situación que involucre su miedo. Por ejemplo, podrían ayudar si tiene que ir a una ubicación remota sin servicio telefónico.
- Las benzodiazepinas pueden ayudarlo a sentirse menos asustado y ansioso cuando piensa en no tener su teléfono. Sin embargo, su cuerpo puede desarrollar una dependencia de ellos, por lo que su médico generalmente solo los recetará para uso a corto plazo.
Cuidados personales
También puede tomar medidas para hacer frente a la nomofobia por su cuenta. Intente lo siguiente:
- Apaga tu teléfono por la noche para tener un sueño más reparador. Si necesita una alarma para despertarse, mantenga su teléfono a distancia, lo suficientemente lejos como para que no pueda revisarlo fácilmente por la noche.
- Intente dejar su teléfono en casa por períodos cortos de tiempo, como cuando va al supermercado, recoge la cena o sale a caminar.
- Dedique algún tiempo cada día lejos de toda tecnología. Intente sentarse tranquilamente, escribir una carta, dar un paseo o explorar una nueva área al aire libre.
Algunas personas se sienten tan conectadas con sus teléfonos porque los usan para mantener el contacto con amigos y seres queridos. Esto puede hacer que sea difícil quitarle espacio a su teléfono, pero considere hacer lo siguiente:
- Anime a sus amigos y seres queridos a tener interacciones en persona, si es posible. Organiza una reunión, da un paseo o planifica una escapada de fin de semana.
- Si sus seres queridos viven en diferentes ciudades o países, intente equilibrar el tiempo que pasa en su teléfono con otras actividades. Reserve un período de tiempo cada día para apagar el teléfono y concentrarse en otra cosa.
- Intente tener más interacciones en persona con personas físicamente cercanas a usted. Tenga una breve conversación con un compañero de trabajo, charle con un compañero de clase o vecino, o felicite el atuendo de alguien. Es posible que estas conexiones no conduzcan a amistades, pero podrían.
Las personas tienen diferentes estilos de relacionarse con los demás. No es necesariamente un problema si te resulta más fácil hacer amigos en línea.
Pero si las interacciones en línea y otros usos del teléfono afectan su vida diaria y sus responsabilidades o dificultan la realización de las tareas necesarias, hablar con un profesional de la salud mental puede ayudar.
Es especialmente importante buscar ayuda si tiene dificultades para hablar con los demás debido a los efectos del acoso o abuso, o síntomas de problemas de salud mental, como depresión, ansiedad social o estrés.
Un terapeuta puede ofrecerle apoyo, ayudarlo a aprender a lidiar con estos problemas y orientarlo hacia otros recursos si es necesario.
La línea de fondo
Es posible que la nomofobia aún no esté clasificada como una condición oficial de salud mental. Sin embargo, los expertos coinciden en que este tema de la era de la tecnología es una preocupación creciente que puede afectar la salud mental.
La nomofobia parece ser más común en los jóvenes, aunque muchos usuarios de teléfonos experimentan algún grado de síntomas.
Si usa su teléfono con regularidad, puede experimentar un breve momento de pánico cuando se dé cuenta de que no lo tiene o no lo puede encontrar. Esto no significa que tenga nomofobia.
Pero si te preocupa tanto no tener tu teléfono o no poder usarlo que no puedes concentrarte en lo que tienes que hacer, considera la posibilidad de pedir ayuda a un terapeuta.
La nomofobia puede mejorar con el tratamiento y los cambios en el estilo de vida.