Neumonía hospitalaria: que es, causas y como tratarla

Contenido

• Causas de la neumonía hospitalaria
• Síntomas principales
• Tratamiento de la neumonía hospitalaria

La neumonía hospitalaria es un tipo de neumonía que se presenta 48 horas después de la hospitalización de una persona o hasta 72 horas después del alta y que el microorganismo responsable de la infección no se encontraba incubando en el momento del ingreso al hospital, habiendo sido adquirido en un ambiente hospitalario.

Este tipo de neumonía puede estar relacionada con procedimientos realizados en el hospital y puede ser causada, principalmente, por bacterias que se encuentran presentes en el ambiente hospitalario y que pueden instalarse en los pulmones de la persona, disminuyendo la cantidad de oxígeno y produciendo infección respiratoria.

Es importante que la neumonía hospitalaria se identifique y se trate rápidamente para que se puedan prevenir las complicaciones y haya una mayor probabilidad de lograr una cura. Así, el médico de cabecera o el neumólogo o el especialista en enfermedades infecciosas pueden recomendar el uso de antibióticos para eliminar el microorganismo responsable y favorecer la mejora de los síntomas.

Causas de la neumonía hospitalaria

La neumonía hospitalaria es causada por microorganismos que se pueden encontrar con mayor facilidad en el hospital debido a factores de virulencia que poseen que les permiten permanecer más tiempo en el ambiente hospitalario y que no son removidos por los desinfectantes normalmente usados ​​en el ambiente hospitalario.

Este tipo de neumonía se presenta con mayor facilidad en personas que se someten a ventilación mecánica, que luego reciben el nombre de neumonía asociada a la ventilación mecánica, y que tienen menos actividad del sistema inmunológico o que tienen dificultad para tragar, con una mayor probabilidad de bacterias de aspiración que colonizan naturalmente el tracto respiratorio superior.

Así, los principales microorganismos asociados a la neumonía hospitalaria son:

• Klebsiella pneumoniae;
• Enterobacter sp;
• Pseudomonas aeruginosa;
• Acinetobacter baumannii;
• Staphylococcus aureus;
• steotococos neumonia;
• Legionella sp.;

Para confirmar la neumonía hospitalaria es necesario confirmar que la infección ocurrió 48 horas después de la hospitalización o hasta 72 horas después del alta, además de la necesidad de pruebas de laboratorio y de imagen para ayudar a confirmar la neumonía y el microorganismo asociado a la enfermedad. Obtenga más información sobre las infecciones hospitalarias.

Síntomas principales

Los síntomas de la neumonía adquirida en el hospital son similares a los de la neumonía adquirida en la comunidad, con fiebre alta, tos seca que puede progresar a tos con secreción amarilla o sanguinolenta, cansancio fácil, falta de apetito, dolor en el pecho y dificultad para respirar.

Como la mayoría de los casos de neumonía nosocomial le suceden a la persona que aún está en el hospital, los síntomas suelen ser observados de inmediato por el equipo responsable de la persona y el tratamiento comienza poco después. Sin embargo, si los síntomas de neumonía hospitalaria aparecen después del alta, es importante que la persona consulte al médico que lo acompañó para realizar una evaluación, indicada para realizar pruebas y, en caso de ser necesario, iniciar el tratamiento más adecuado.

Aprenda a reconocer los síntomas de la neumonía.

Tratamiento de la neumonía hospitalaria

El tratamiento de la neumonía nosocomial debe ser indicado por el neumólogo según el estado de salud general de la persona y el microorganismo responsable de la neumonía, siendo habitualmente indicado el uso de antibióticos para combatir el microorganismo y reducir la inflamación.

Los signos de mejoría suelen aparecer alrededor del séptimo día de tratamiento, sin embargo, dependiendo de la gravedad de la neumonía, la persona puede permanecer hospitalizada durante el tratamiento o, en algunos casos, ser dada de alta. En este último caso, los pacientes con la enfermedad pueden usar antibióticos orales en casa.

En algunos casos también puede estar indicada la fisioterapia, con ejercicios respiratorios puede complementar el tratamiento con medicamentos, ayudando en la eliminación de las secreciones infectadas y evitando que lleguen nuevas bacterias al pulmón, siendo utilizada también en pacientes que llevan mucho tiempo hospitalizados. tiempo, como forma de prevención de la neumonía hospitalaria. Comprende cómo se realiza la fisioterapia respiratoria.

La neumonía hospitalaria puede ser contagiosa y, por ello, es importante que la persona evite los espacios públicos como el trabajo, los parques o la escuela, hasta que se cure. Sin embargo, si es necesario acudir a estos lugares, se recomienda que se utilice una mascarilla protectora, que se puede adquirir en cualquier farmacia, o que se ponga la mano o el pañuelo delante de la nariz y la boca cuando estornude o tosa.

Vea también algunos ejercicios que ayudan a fortalecer el pulmón y acelerar la recuperación de la neumonía: