5 condiciones de salud en las que se debe evitar el sexo

Contenido

• 1. Dolor durante las relaciones sexuales
• 2. Tratamiento de ETS
• 3. Heridas o traumatismos en la región íntima
• 4. Infección urinaria
• 5. Sistema inmunológico debilitado

Son pocas las situaciones en las que el sexo está contraindicado, especialmente cuando ambos socios están sanos y mantienen una relación larga y fiel. Sin embargo, existen algunos problemas de salud que pueden requerir una interrupción en la actividad sexual, especialmente para facilitar la recuperación.

Si bien la actividad sexual es una cuestión más frecuente en el caso de mujeres embarazadas o pacientes con enfermedades cardiovasculares, el sexo rara vez está contraindicado en estas situaciones y puede mantenerse sin riesgo para la salud.

Vea cuándo debe evitarse el contacto durante el embarazo.

1. Dolor durante las relaciones sexuales

El dolor durante las relaciones sexuales, científicamente llamado dispareunia, también puede ir acompañado de otros síntomas, como ardor o picazón. En los hombres, la causa principal es una infección en la uretra y la vejiga, pero también puede ocurrir debido a la fimosis o la curvatura anormal del pene. En las mujeres, las infecciones también son una causa importante de dispareunia, así como de endometriosis y enfermedad inflamatoria pélvica, EIP.

En estos casos, es recomendable consultar a un urólogo o un ginecólogo para identificar el problema e iniciar el tratamiento adecuado, evitando así su agravamiento o incluso su transmisión a la pareja, en el caso de infecciones, por ejemplo.

2. Tratamiento de ETS

Durante el tratamiento de cualquier enfermedad de transmisión sexual, lo ideal es evitar el contacto íntimo, incluso con condón, no solo para disminuir las posibilidades de contaminar a la pareja, sino también para facilitar la recuperación.

En la mayoría de los casos, el tratamiento debe ser realizado por ambos socios y la actividad sexual solo debe iniciarse después de un consejo médico y cuando ambos hayan terminado el tratamiento.

3. Heridas o traumatismos en la región íntima

Además de aumentar el riesgo de transmisión de enfermedades sexuales, las heridas en la zona íntima pueden empeorar o infectarse después del coito, debido al roce provocado por la ropa o el coito.

Además, está indicado para evitar las relaciones sexuales después del parto en el que se realizó una episiotomía, que corresponde a un corte en el perineo de la mujer que permite que el niño nazca por la vagina, de lo contrario no habrá tiempo suficiente para la cicatrización, lo que lleva a las complicaciones relacionadas con el dolor de la herida.

Así, es recomendable consultar a un médico generalista para iniciar el tratamiento de las heridas y valorar si también pueden ser signo de una enfermedad de transmisión sexual, sobre todo si están hinchadas, muy dolorosas y con enrojecimiento intenso.

4. Infección urinaria

La infección del tracto urinario por sí sola es un problema muy doloroso que causa mucha incomodidad incluso durante las situaciones cotidianas más simples, como caminar u orinar. Así, el dolor que se produce durante una relación íntima es mucho más intenso.

Además, los movimientos bruscos durante las relaciones sexuales pueden provocar pequeñas llagas en la uretra, lo que facilita el desarrollo de bacterias y puede empeorar la infección del tracto urinario. Por tanto, es recomendable esperar a que cese la infección urinaria antes de volver al contacto íntimo.

5. Sistema inmunológico debilitado

Las personas que tienen un sistema inmunológico debilitado debido a enfermedades virales, como la gripe o el dengue, pueden tener una recuperación más lenta si mantienen un contacto íntimo durante el tratamiento, ya que este tipo de actividad provoca un esfuerzo físico que hace que el cuerpo se canse más, haciéndolo más dificultar el proceso de recuperación.

Además, las personas con enfermedades crónicas que debilitan el sistema inmunológico, como el VIH, deben tener cuidado durante las relaciones sexuales, siempre usando condones para evitar transmitir la enfermedad y contagiarse a otros.