Preguntas y respuestas importantes sobre la espondilitis anquilosante
Contenido
- Visión general
- 1. ¿Es la espondilitis anquilosante una enfermedad autoinmune?
- 2. ¿Qué es exactamente la espondilitis anquilosante?
- 3. ¿Cómo se diagnostica la espondilitis anquilosante?
- 4. ¿Necesito ver a un especialista?
- 5. ¿Cómo tratará mi médico la espondilitis anquilosante?
- 6. ¿Qué cirugías hay para la espondilitis anquilosante?
- 7. ¿Necesito fisioterapia?
- 8. ¿Qué complicaciones pueden surgir?
- 9. ¿Qué hago si mis síntomas empeoran?
- 10. ¿Hay una cura?
- Para llevar
Visión general
Si recientemente le diagnosticaron espondilitis anquilosante, es probable que tenga muchas preguntas para su médico. Estas preguntas pueden incluir posibles tratamientos y otros conceptos básicos sobre su condición.
Aquí están las respuestas a algunas de las preguntas más comunes de espondilitis anquilosante. Lleve esta guía de discusión con usted a su próxima cita con el médico para usarla como iniciador de conversación.
1. ¿Es la espondilitis anquilosante una enfermedad autoinmune?
La espondilitis anquilosante es un tipo de artritis autoinmune y una enfermedad inflamatoria crónica. Una enfermedad autoinmune se desarrolla cuando su cuerpo ataca sus propios tejidos sanos.
La espondilitis anquilosante también es una afección inflamatoria que involucra articulaciones inflamadas o inflamadas. A menudo afecta las articulaciones y los huesos en la columna vertebral y la espalda baja. Los huesos de la columna pueden fusionarse con el tiempo.
2. ¿Qué es exactamente la espondilitis anquilosante?
La espondilitis anquilosante es un tipo de artritis inflamatoria que afecta la columna vertebral y las articulaciones sacroilíacas en la pelvis. Al igual que otros tipos de artritis, la espondilitis anquilosante causa dolor e hinchazón en las articulaciones.
Esta condición afecta los huesos de la columna vertebral (vértebras) y las articulaciones en la parte baja de la espalda. También causa hinchazón donde los tendones y ligamentos se unen a los huesos de la columna vertebral. Su médico podría llamar a esto entesitis.
El dolor y las molestias causadas por la espondilitis anquilosante pueden provocar síntomas en otras articulaciones, como los hombros y las caderas.
3. ¿Cómo se diagnostica la espondilitis anquilosante?
El médico probablemente comenzará preguntándole acerca de sus síntomas y antecedentes familiares de espondilitis anquilosante. Un examen puede revelar síntomas como dolor, sensibilidad y rigidez en la columna vertebral.
El médico puede enviarlo para una radiografía o resonancia magnética. Ambas pruebas pueden mostrar daños en los huesos y tejidos blandos de la columna vertebral. Una resonancia magnética crea imágenes más detalladas y puede mostrar daños más temprano en la enfermedad que una radiografía.
Otra forma de diagnosticar esta afección es con un análisis de sangre para HLA-B27 gene. La prevalencia de HLA-B27 varía en diferentes poblaciones étnicas. El genotipo se observa en aproximadamente el 80% de los pacientes caucásicos con EA y menos del 60% en la población afroamericana. Es posible tener este gen, pero no tener espondilitis anquilosante.
4. ¿Necesito ver a un especialista?
Su médico de cabecera puede sospechar primero de espondilitis anquilosante o en realidad puede diagnosticarlo. Después de este punto, pueden derivarlo a un reumatólogo. Este tipo de médico se especializa en enfermedades de las articulaciones, huesos y músculos.
El reumatólogo puede ser su médico de cabecera para recibir tratamiento. Es posible que también necesite ver a un fisioterapeuta o un oftalmólogo si tiene síntomas oculares (uveítis).
5. ¿Cómo tratará mi médico la espondilitis anquilosante?
El tratamiento con espondilitis anquilosante implica medicamentos, atención auxiliar de fisioterapia o terapia ocupacional y cambios en el estilo de vida. La cirugía también es una posibilidad si sus articulaciones están muy dañadas.
Su reumatólogo puede recomendar uno o más de los siguientes tratamientos de espondilitis anquilosante:
- medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), como el ibuprofeno, para disminuir el dolor y la inflamación
- productos biológicos, como los inhibidores de TNF, que se inyectan o administran por infusión IV si los AINE no funcionan
- fisioterapia para enseñarle ejercicios que fortalecen y estiran las articulaciones afectadas de la espalda
- medicamentos antirreumáticos modificadores de la enfermedad (FARME) para tratar el dolor y la inflamación en las articulaciones
La dieta no ha sido bien estudiada para la espondilitis anquilosante. Los estudios no han confirmado si cortar los lácteos o comer pescado adicional podría ayudar con los síntomas. El mejor consejo es comer una dieta variada con muchas frutas, verduras y granos integrales.
Evite fumar, lo que impulsa la inflamación. Puede empeorar el daño articular causado por la espondilitis anquilosante.
6. ¿Qué cirugías hay para la espondilitis anquilosante?
La cirugía es una opción de último recurso para personas con daño articular severo. Un reemplazo de junta elimina una junta dañada y la reemplaza con una de metal, plástico o cerámica.
La cirugía de columna está indicada cuando los pacientes están gravemente afectados y no pueden realizar las actividades diarias. Se utilizan varios procedimientos según los síntomas y los hallazgos de imágenes. Una osteotomía implica un procedimiento para enderezar su columna vertebral y corregir su postura. Se puede realizar una laminectomía si hay presión sobre las raíces nerviosas.
7. ¿Necesito fisioterapia?
La fisioterapia es un tratamiento recomendado para la espondilitis anquilosante. Le enseña ejercicios para aumentar el movimiento y la flexibilidad, y disminuir el dolor. Un fisioterapeuta también puede mostrarle ejercicios de postura para mejorar su flexibilidad y rango de movimiento.
8. ¿Qué complicaciones pueden surgir?
La espondilitis anquilosante puede causar complicaciones como estas:
- fusión de los huesos espinales y una curvatura hacia adelante de la columna vertebral
- debilitamiento de los huesos (osteoporosis) y fracturas
- inflamación de los ojos llamada uveítis
- problemas con la aorta, la arteria más grande de su cuerpo, secundaria a inflamación
9. ¿Qué hago si mis síntomas empeoran?
Los síntomas que empeoran pueden significar que su tratamiento no está funcionando tan bien como debería y que su espondilitis anquilosante está progresando.
Por ejemplo, su columna podría sentirse más rígida o más dolorosa de lo normal. O puede comenzar a experimentar síntomas en otras articulaciones. El cansancio excesivo es otro signo de aumento de la inflamación.
Si experimenta síntomas nuevos o que empeoran, llame a su médico de inmediato. Pueden recomendar un cambio en su plan de tratamiento para aliviar su malestar y evitar que su afección empeore.
10. ¿Hay una cura?
No hay cura para la espondilitis anquilosante. Tampoco existen curas para la mayoría de las otras formas de artritis.
Sin embargo, una combinación de terapias de atención auxiliar, medicamentos y cambios en el estilo de vida pueden mejorar sus síntomas y disminuir la tasa de daño articular. Su médico le indicará los próximos pasos según sus síntomas.
Para llevar
Un diagnóstico de espondilitis anquilosante puede ser confuso. Por eso es importante aprender tanto sobre su condición como sea posible.
Si aún tiene preguntas, asegúrese de preguntarle a su médico en su próxima cita. Hacerlo puede ayudarlo a obtener el tratamiento que necesita para evitar que su afección empeore.