Síntomas que pueden confundirse con diabetes.
Contenido
- 1. Necesidad frecuente de orinar
- 2. Mayor sed
- 3. Boca seca
- 4. Infecciones urinarias frecuentes
- 5. Somnolencia y cansancio frecuente
- 6. Hormigueo en pies y manos
- 7. Hambre excesiva
- 8. Gran pérdida de peso
- Cómo saber si es diabetes
La diabetes es una enfermedad caracterizada por una gran cantidad de glucosa que circula en la sangre debido a cambios en la producción de una hormona, la insulina, que ocurre incluso cuando la persona está en ayunas, lo que lleva a la aparición de algunos síntomas como ganas frecuentes de orinar, aumento sed, cansancio excesivo, aumento del hambre y gran pérdida de peso.
Según las características y causas, la diabetes se puede clasificar principalmente en:
- Diabetes mellitus tipo 1, que se caracteriza por la no producción de insulina por parte del páncreas, lo que resulta en la ausencia de eliminación de glucosa en exceso en la sangre, por lo que el organismo no puede utilizar este azúcar para generar energía;
- Diabetes mellitus tipo 2, que es la forma de diabetes que se desarrolla con el tiempo y se relaciona principalmente con los hábitos de vida, es decir, el consumo excesivo de dulces e hidratos de carbono y la ausencia de actividad física;
- Diabetes insípida, que se caracteriza por un aumento del volumen urinario que se produce como consecuencia del exceso de azúcar circulante.
Aunque los signos y síntomas de la diabetes son fáciles de identificar, los síntomas que presenta la persona no son necesariamente indicativos de diabetes. Muchas otras afecciones y enfermedades pueden tener síntomas similares y, por lo tanto, es importante que ante la presencia de algún síntoma persistente, la persona acuda al médico para que se puedan realizar las pruebas y se pueda identificar la causa de los síntomas.
Algunos síntomas comunes de la diabetes que también pueden ocurrir en otras situaciones son:
1. Necesidad frecuente de orinar
El aumento de la necesidad de orinar es uno de los síntomas característicos de la diabetes mellitus descontrolada, tanto de tipo 1 como de tipo 2, y de la diabetes insípida, porque debido a la gran cantidad de azúcar acumulada en la sangre, la respuesta del organismo es eliminar este exceso a través de la orina.
Sin embargo, el aumento de la frecuencia urinaria, también llamado urgencia urinaria, también puede ocurrir cuando se bebe mucho líquido durante el día o como consecuencia del uso de medicamentos diuréticos que pueden ser recomendados por el médico, como Furosemida, por ejemplo. , que está indicado en el control de la presión arterial, o infecciones urinarias, especialmente si la necesidad frecuente de orinar se acompaña de dolor y sensación de ardor al orinar y malestar en la región genital. Conozca otras causas de la necesidad frecuente de orinar.
2. Mayor sed
El aumento de la sed es una forma que tiene el cuerpo de indicar que hay poca agua disponible en el cuerpo para que el cuerpo funcione correctamente. En el caso de la diabetes, el aumento de la sed también es una forma que tiene el organismo de señalar que hay grandes cantidades de azúcar en la sangre, pues al sentir sed, se espera que la persona beba más agua y, por tanto, es posible eliminar el exceso de azúcar en la orina.
Por otro lado, el aumento de la sed también puede ser un signo de deshidratación, especialmente cuando se notan otros signos y síntomas, como dolor de cabeza intenso, sequedad de boca, fiebre baja y constante y la aparición de ojeras. Es importante que la deshidratación se note rápidamente para que se realice la reposición de líquidos a fin de prevenir complicaciones para la persona.
Además de la deshidratación y la diabetes, el aumento de la sed puede ser consecuencia de la gran producción de sudor, común durante o después de la práctica de una actividad física intensa, o del consumo excesivo de sodio durante el día, que también puede llevar , en algunos casos, el aumento de la presión arterial y la aparición de síntomas distintos de la sed, como dolor de pecho y cambios en los latidos del corazón.
3. Boca seca
La sequedad bucal suele ser consecuencia de la falta de agua en el cuerpo, y se asocia con un aumento de la sed. Aunque puede ocurrir en la diabetes, la sequedad de boca puede ser indicativa de muchas otras situaciones que no necesariamente están relacionadas con problemas de salud, como el hecho de respirar por la boca, estar en un ambiente muy frío o una dieta rica en azúcar y bajo consumo de agua, por ejemplo.
Sin embargo, es importante que la persona esté atenta a la aparición de otros síntomas además de la sequedad de boca, ya que puede estar relacionado con otros problemas de salud como enfermedades autoinmunes, problemas de tiroides, enfermedades respiratorias, cambios hormonales o ser consecuencia del uso de algún medicamento. . Por este motivo, en caso de que la sequedad de boca sea frecuente y no pase incluso con el cambio de hábitos alimentarios e ingesta de agua durante el día, se recomienda acudir al médico de cabecera para las pruebas y, si es necesario, para el tratamiento. establecido según la causa.
Vea más causas de sequedad de boca.
4. Infecciones urinarias frecuentes
Infecciones urinarias repetitivas, principalmente por hongos del tipo Candida sp., son bastante comunes en la diabetes, porque la gran cantidad de azúcar en sangre y orina favorece el desarrollo de microorganismos, provocando la aparición de infecciones y la aparición de síntomas como dolor y ardor al orinar, enrojecimiento y picor en la región genital. y descarga.
A pesar de esto, no siempre es el caso de que la persona que tiene infecciones urinarias recurrentes sea indicativo de diabetes. Esto se debe a que la proliferación de microorganismos puede verse favorecida por otras condiciones, como una higiene íntima inadecuada, aguantar el pis durante mucho tiempo, usar compresas íntimas durante mucho tiempo y beber poca agua. Obtenga más información sobre otras causas de infecciones urinarias recurrentes.
5. Somnolencia y cansancio frecuente
La somnolencia y el cansancio frecuente son síntomas comunes de la diabetes, ya que debido a cambios en los receptores celulares, la glucosa no ingresa a las células, quedando en la sangre, lo que resulta en una falta de energía para realizar las actividades diarias.
Además de la diabetes, la principal causa de somnolencia y cansancio frecuente es la anemia por deficiencia de hierro, también llamada anemia por deficiencia de hierro, porque en la falta de hierro no hay suficiente formación de hemoglobina, que es el componente de los glóbulos rojos encargados de transportar oxígeno a las celdas.
Así, en ausencia de hemoglobina, no existe un transporte correcto de oxígeno, lo que se traduce en una disminución de la capacidad metabólica de las células y, en consecuencia, conduce a la aparición de síntomas como cansancio excesivo y somnolencia. Otros signos y síntomas que también pueden ser indicativos de anemia ferropénica son mareos, palidez de la piel y de las mucosas de los ojos, debilidad, caída del cabello y pérdida del apetito, por ejemplo.
Además de la diabetes y la anemia, la somnolencia y el cansancio frecuente pueden ocurrir como resultado de enfermedades psicológicas, como depresión, enfermedades cardíacas y cambios en la tiroides, especialmente hipotiroidismo, en los que la tiroides comienza a producir menos hormonas necesarias para el funcionamiento del cuerpo, lo que lleva a la aparición no solo de cansancio excesivo sino también de debilidad, dificultad para concentrarse, caída del cabello, piel seca y aumento de peso sin causa aparente.
6. Hormigueo en pies y manos
El hormigueo en las manos y los pies suele ser una señal de que la diabetes está fuera de control, es decir, que hay cantidades excesivas de azúcar en la sangre, lo que puede provocar cambios en la circulación y lesiones menores en varias partes del cuerpo. resultando en hormigueo.
Sin embargo, el hormigueo rara vez se asocia con la diabetes, ya que situaciones como la compresión de un nervio, la posición incorrecta para sentarse o el uso repetitivo de la misma articulación también pueden causar hormigueo en las manos o los pies.Además, el hormigueo es uno de los primeros signos de infarto, que se produce cuando hay un bloqueo en un vaso sanguíneo, lo que dificulta la circulación sanguínea.
Así, en el caso de un infarto, es común que la persona sienta adormecimiento y hormigueo en el brazo izquierdo, así como un dolor en el lado izquierdo del pecho en forma de picadura o peso que puede irradiarse a otros partes del cuerpo. Ante los primeros signos de un infarto, se recomienda acudir urgentemente al hospital para que se puedan realizar pruebas que demuestren el infarto y se inicie el tratamiento. Sepa cómo reconocer los síntomas de un ataque cardíaco.
7. Hambre excesiva
Es común que las personas con diabetes sientan mucha hambre durante el día y esto se debe a la falta de azúcar dentro de las células. En la diabetes, el azúcar no puede entrar a las células, permanece en la sangre, y esto hace que el cerebro interprete que no hay suficiente azúcar en el cuerpo para generar energía para que las células lleven a cabo las actividades necesarias para que el organismo funcione, y por tanto la persona siempre tiene la sensación de que no está satisfecha.
Si bien este síntoma es común en la diabetes, el hambre excesiva también puede presentarse en otras situaciones, como estrés, nerviosismo, deshidratación, una dieta rica en carbohidratos y debido a cambios en la tiroides, como en el caso del hipertiroidismo, que se caracteriza por un aumento producción de hormonas tiroideas que se traduce en un aumento del metabolismo y sensación de hambre, así como temblores, palpitaciones y dificultad para concentrarse.
8. Gran pérdida de peso
Es común que las personas con diabetes no controlada o de diagnóstico precoz, que aún no usan medicación para controlarla, bajen mucho de peso, incluso cuando estén comiendo más de lo normal, y sientan mucha hambre durante el día, y esto se debe a la falta de azúcar dentro de las células.
En la diabetes, el azúcar no puede entrar a las células y esto hace que el cerebro interprete que no hay suficiente azúcar en el cuerpo para generar energía y, por lo tanto, encuentra otra forma de producir energía, que es quemando la grasa corporal, tomando adelgazamiento, incluso sin hacer dieta y aumentando la ingesta de alimentos.
Aunque este síntoma es común en la diabetes, también puede ocurrir una pérdida marcada de peso en otras situaciones, como cambios en la tiroides, enfermedades del hígado y del estómago, y en el cáncer, por ejemplo. Esto se debe a que el organismo está experimentando cambios que comprometen la digestión de los alimentos o generan cambios importantes en el metabolismo corporal, lo que provoca grandes pérdidas de peso.
Cómo saber si es diabetes
Para saber si los síntomas experimentados están relacionados con la diabetes u otro problema de salud, es importante que la persona acuda al médico de cabecera o endocrinólogo para que se puedan realizar las pruebas para realizar el diagnóstico diferencial de diabetes, siendo las más frecuentes las analíticas de sangre indicadas , incluidos los niveles de glucosa en sangre en ayunas, hemoglobina glucosilada y orina.
También es posible que el diagnóstico inicial de diabetes se realice mediante la prueba de glucemia capilar, la cual se puede realizar tanto en ayunas como en cualquier momento del día, es importante estar al tanto de los valores de referencia, que varían según la forma en que se realizó el examen. La prueba de glucosa en sangre capilar se puede hacer en casa usando un dispositivo llamado glucómetro, que analiza una pequeña gota de sangre e indica en unos minutos cuál es la glucosa en sangre.
Es importante que en caso de cambios en la cantidad de glucosa en sangre, la persona acuda al médico para que se puedan realizar nuevas pruebas y se pueda iniciar el tratamiento más adecuado. Comprender cómo se realiza el diagnóstico de diabetes.