Lo que debe saber sobre el suicidio

Contenido
- Señales de advertencia de que alguien puede intentar suicidarse
- Cómo hablar con alguien que se siente suicida
- En casos de peligro inminente
- ¿Qué aumenta el riesgo de suicidio?
- Evaluación de personas en riesgo de suicidio
- Tratamiento para personas con riesgo de suicidio
- Terapia de conversación
- Medicamento
- Cambios en el estilo de vida
- Cómo prevenir los pensamientos suicidas
- Habla con alguien
- Tome los medicamentos según las indicaciones
- Nunca te saltes una cita
- Preste atención a las señales de advertencia
- Eliminar el acceso a métodos letales de suicidio.
- Recursos para la prevención del suicidio
- panorama
¿Qué es el suicidio y la conducta suicida?
El suicidio es el acto de quitarse la vida. Según la Fundación Estadounidense para la Prevención del Suicidio, el suicidio es la décima causa principal de muerte en los Estados Unidos y se cobra la vida de aproximadamente 47.000 estadounidenses cada año.
El comportamiento suicida se refiere a hablar o tomar acciones relacionadas con terminar con la propia vida. Los pensamientos y comportamientos suicidas deben considerarse una emergencia psiquiátrica.
Si usted o alguien que conoce presenta alguno de estos síntomas, debe buscar ayuda inmediata de un proveedor de atención médica.
Señales de advertencia de que alguien puede intentar suicidarse
No puede ver lo que una persona siente por dentro, por lo que no siempre es fácil identificar cuando alguien tiene pensamientos suicidas.Sin embargo, algunas señales externas de advertencia de que una persona puede estar contemplando el suicidio incluyen:
- hablando de sentirse desesperado, atrapado o solo
- diciendo que no tienen motivos para seguir viviendo
- hacer un testamento o regalar posesiones personales
- buscar un medio para causar daño personal, como comprar un arma
- dormir demasiado o muy poco
- comer muy poco o comer demasiado, lo que resulta en un aumento o pérdida de peso significativo
- participar en comportamientos imprudentes, incluido el consumo excesivo de alcohol o drogas
- evitar las interacciones sociales con los demás
- expresar rabia o intenciones de venganza
- mostrando signos de ansiedad o agitación extrema
- tener cambios de humor dramáticos
- hablando del suicidio como una salida
Puede dar miedo, pero tomar medidas y conseguir la ayuda que necesitan puede ayudar a prevenir un intento de suicidio o la muerte.
Cómo hablar con alguien que se siente suicida
Si sospecha que un miembro de la familia o un amigo puede estar considerando suicidarse, hable con ellos sobre sus preocupaciones. Puede comenzar la conversación haciendo preguntas sin juzgar ni confrontar.
Habla abiertamente y no tengas miedo de hacer preguntas directas, como "¿Estás pensando en suicidarte?".
Durante la conversación, asegúrese de:
- mantén la calma y habla en un tono tranquilizador
- reconocer que sus sentimientos son legítimos
- ofrecer apoyo y aliento
- decirles que hay ayuda disponible y que pueden sentirse mejor con el tratamiento
Asegúrese de no minimizar sus problemas o los intentos de avergonzarlos para que cambien de opinión. Escucharlos y mostrarles su apoyo es la mejor manera de ayudarlos. También puede alentarlos a buscar ayuda de un profesional.
Ofrézcase para ayudarlos a encontrar un proveedor de atención médica, hacer una llamada telefónica o acompañarlos a su primera cita.
Puede ser aterrador cuando alguien que le importa muestra signos de suicidio. Pero es fundamental tomar medidas si está en condiciones de ayudar. Iniciar una conversación para tratar de ayudar a salvar una vida es un riesgo que vale la pena correr.
Si está preocupado y no sabe qué hacer, puede obtener ayuda de una línea directa de prevención de crisis o suicidio.
Si vive en los Estados Unidos, pruebe la Línea Nacional de Prevención del Suicidio al 800-273-TALK (800-273-8255). Tienen consejeros capacitados disponibles las 24 horas, los 7 días de la semana. Stop a Suicide Today es otro recurso útil.
Befrienders Worldwide y la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio son dos organizaciones que brindan información de contacto para centros de crisis fuera de los Estados Unidos.
En casos de peligro inminente
Según la Alianza Nacional de Enfermedades Mentales (NAMI), si nota que alguien está haciendo algo de lo siguiente, debe recibir atención de inmediato:
- poner sus asuntos en orden o regalar sus posesiones
- despedirse de amigos y familiares
- tener un cambio de humor de la desesperación a la calma
- planificar, buscar comprar, robar o tomar prestadas las herramientas para completar un suicidio, como un arma de fuego o un medicamento
Si cree que alguien está en riesgo inmediato de autolesionarse:
- Llame al 911 o al número de emergencia local.
- Quédese con la persona hasta que llegue la ayuda.
- Quítese las pistolas, cuchillos, medicamentos u otras cosas que puedan causar daño.
- Escuche, pero no juzgue, discuta, amenace ni grite.
¿Qué aumenta el riesgo de suicidio?
Por lo general, no hay una única razón por la que alguien decide quitarse la vida. Varios factores pueden aumentar el riesgo de suicidio, como tener un trastorno de salud mental.
Pero de todas las personas que mueren por suicidio no tienen una enfermedad mental conocida en el momento de su muerte.
La depresión es el principal factor de riesgo para la salud mental, pero otros incluyen el trastorno bipolar, la esquizofrenia, los trastornos de ansiedad y los trastornos de la personalidad.
Aparte de las condiciones de salud mental, otros factores que aumentan el riesgo de suicidio incluyen:
- encarcelamiento
- escasa seguridad laboral o bajos niveles de satisfacción laboral
- historial de abuso o presencia de abuso continuo
- ser diagnosticado con una afección médica grave, como cáncer o VIH
- Estar aislado socialmente o ser víctima de acoso o intimidación.
- trastorno por uso de sustancias
- abuso o trauma infantil
- antecedentes familiares de suicidio
- intentos de suicidio previos
- tener una enfermedad crónica
- pérdida social, como la pérdida de una relación significativa
- pérdida de un trabajo
- acceso a medios letales, incluidas armas de fuego y drogas
- estar expuesto al suicidio
- dificultad para buscar ayuda o apoyo
- falta de acceso a tratamientos de salud mental o por abuso de sustancias
- siguiendo sistemas de creencias que aceptan el suicidio como una solución a los problemas personales
Aquellos que han demostrado tener un mayor riesgo de suicidio son:
- hombres
- personas mayores de 45 años
- Caucásicos, indios americanos o nativos de Alaska
Evaluación de personas en riesgo de suicidio
Un proveedor de atención médica puede determinar si una persona tiene un alto riesgo de suicidio en función de sus síntomas, antecedentes personales y familiares.
Querrán saber cuándo comenzaron los síntomas y con qué frecuencia la persona los experimenta. También preguntarán sobre problemas médicos pasados o actuales y sobre ciertas afecciones que pueden ser hereditarias.
Esto puede ayudarlos a determinar las posibles explicaciones de los síntomas y qué pruebas u otros profesionales podrían ser necesarios para hacer un diagnóstico. Probablemente harán evaluaciones de la persona:
- Salud mental. En muchos casos, los pensamientos suicidas son causados por un trastorno de salud mental subyacente, como depresión, esquizofrenia o trastorno bipolar. Si se sospecha un problema de salud mental, es probable que la persona sea remitida a un profesional de salud mental.
- Uso de sustancias. El abuso de alcohol o drogas a menudo contribuye a pensamientos y comportamientos suicidas. Si el consumo de sustancias es un problema subyacente, el primer paso puede ser un programa de rehabilitación por adicción al alcohol o las drogas.
- Medicamentos. El uso de ciertos medicamentos recetados, incluidos los antidepresivos, también puede aumentar el riesgo de suicidio. Un proveedor de atención médica puede revisar cualquier medicamento que la persona esté tomando actualmente para ver si podrían ser factores contribuyentes.
Tratamiento para personas con riesgo de suicidio
El tratamiento dependerá de la causa subyacente de los pensamientos y comportamientos suicidas de una persona. En muchos casos, sin embargo, el tratamiento consiste en psicoterapia y medicación.
Terapia de conversación
La psicoterapia, también conocida como psicoterapia, es un posible método de tratamiento para reducir el riesgo de intentar suicidarse. La terapia cognitivo-conductual (TCC) es una forma de terapia de conversación que se usa a menudo para personas que tienen pensamientos suicidas.
Su propósito es enseñarle cómo superar los eventos y emociones estresantes de la vida que pueden estar contribuyendo a sus pensamientos y comportamientos suicidas. La TCC también puede ayudarlo a reemplazar las creencias negativas por positivas y recuperar una sensación de satisfacción y control en su vida.
También se puede utilizar una técnica similar, llamada terapia conductual dialéctica (DBT).
Medicamento
Si la psicoterapia no es suficiente para reducir con éxito el riesgo, se pueden recetar medicamentos para aliviar los síntomas, como la depresión y la ansiedad. El tratamiento de estos síntomas puede ayudar a reducir o eliminar los pensamientos suicidas.
Se pueden recetar uno o más de los siguientes tipos de medicamentos:
- antidepresivos
- medicamentos antipsicóticos
- medicamentos contra la ansiedad
Cambios en el estilo de vida
Además de la psicoterapia y la medicación, el riesgo de suicidio a veces se puede reducir simplemente adoptando ciertos hábitos saludables. Éstas incluyen:
- Evitando el alcohol y las drogas. Es fundamental mantenerse alejado del alcohol y las drogas, ya que estas sustancias pueden reducir las inhibiciones y pueden aumentar el riesgo de suicidio.
- Hacer ejercicio regularmente. Hacer ejercicio al menos tres veces por semana, especialmente al aire libre y con luz solar moderada, también puede ayudar. La actividad física estimula la producción de ciertos químicos cerebrales que te hacen sentir más feliz y relajado.
- Durmiendo bien. También es importante dormir lo suficiente de calidad. La falta de sueño puede empeorar muchos síntomas de salud mental. Hable con su proveedor de atención médica si tiene problemas para dormir.
Cómo prevenir los pensamientos suicidas
Si ha tenido pensamientos o sentimientos suicidas, no se avergüence y no se lo guarde. Si bien algunas personas tienen pensamientos suicidas sin ninguna intención de actuar en consecuencia, es importante tomar alguna medida.
Para ayudar a evitar que estos pensamientos vuelvan a ocurrir, hay varias cosas que puede hacer.
Habla con alguien
Nunca debe intentar controlar los sentimientos suicidas por su cuenta. Obtener ayuda y apoyo profesional de sus seres queridos puede facilitar la superación de los desafíos que están causando estos sentimientos.
Muchas organizaciones y grupos de apoyo pueden ayudarlo a enfrentar los pensamientos suicidas y reconocer que el suicidio no es la mejor manera de lidiar con los eventos estresantes de la vida. La Línea Nacional de Prevención del Suicidio es un gran recurso.
Tome los medicamentos según las indicaciones
Nunca debe cambiar su dosis o dejar de tomar sus medicamentos a menos que su proveedor de atención médica se lo indique. Los sentimientos suicidas pueden reaparecer y puede experimentar síntomas de abstinencia si deja de tomar sus medicamentos de repente.
Si tiene efectos secundarios no deseados por el medicamento que está tomando actualmente, hable con su proveedor sobre la posibilidad de cambiar a otro.
Nunca te saltes una cita
Es importante mantener todas sus sesiones de terapia y otras citas. Cumplir con su plan de tratamiento es la mejor manera de lidiar con los pensamientos y comportamientos suicidas.
Preste atención a las señales de advertencia
Trabaje con su proveedor de atención médica o terapeuta para conocer los posibles desencadenantes de sus sentimientos suicidas. Esto lo ayudará a reconocer las señales de peligro desde el principio y a decidir qué pasos tomar con anticipación.
También puede ser útil informar a los familiares y amigos sobre las señales de advertencia para que puedan saber cuándo es posible que necesite ayuda.
Eliminar el acceso a métodos letales de suicidio.
Deshágase de las armas de fuego, los cuchillos o los medicamentos serios si le preocupa que pueda actuar sobre los pensamientos suicidas.
Recursos para la prevención del suicidio
Los siguientes recursos brindan asesores capacitados e información sobre la prevención del suicidio:
- Línea nacional de prevención del suicidio: Llame al 800-273-8255. Lifeline ofrece apoyo gratuito y confidencial las 24 horas del día, los 7 días de la semana para personas en peligro, recursos de prevención y crisis para usted o sus seres queridos, y mejores prácticas para profesionales.
- Lifeline Chat nacional para la prevención del suicidio: Lifeline Chat conecta a las personas con consejeros para obtener apoyo emocional y otros servicios a través del chat web, 24 horas al día, 7 días a la semana en todo Estados Unidos.
- Línea de texto en caso de crisis: envíe un mensaje de texto con HOME al 741741. La línea de texto en caso de crisis es un recurso gratuito de mensajería de texto que ofrece apoyo las 24 horas, los 7 días de la semana a cualquier persona en crisis.
- Línea de ayuda nacional de la Administración de Servicios de Salud Mental y Abuso de Sustancias (SAMHSA): Llame al 1-800-662-HELP (4357). La línea de ayuda de SAMHSA es un servicio gratuito, confidencial, disponible las 24 horas del día, los 7 días de la semana, los 365 días del año y un servicio de información (en inglés y español) para personas y familias que enfrentan trastornos de salud mental o por uso de sustancias.
- Befrienders Worldwide y la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio: estas son dos organizaciones que brindan información de contacto para centros de crisis fuera de los Estados Unidos.
panorama
Hoy en día, muchas organizaciones y personas están trabajando arduamente en la prevención del suicidio y hay más recursos disponibles que nunca. Nadie debería tener que lidiar solo con los pensamientos suicidas.
Tanto si eres un ser querido que está preocupado por alguien como si estás luchando contigo mismo, hay ayuda disponible. No guarde silencio, puede ayudar a salvar una vida.