Opciones de tratamiento para la apnea del sueño

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El tratamiento para la apnea del sueño generalmente se inicia con cambios menores en el estilo de vida según la posible causa del problema. Por tanto, cuando la apnea es provocada por el sobrepeso, por ejemplo, se recomienda consultar a un nutricionista para realizar un plan nutricional que permita adelgazar para mejorar la respiración.
Cuando la apnea del sueño es provocada o agravada por el cigarrillo, es recomendable dejar de fumar o reducir el número de cigarrillos fumados al día, para evitar la inflamación de las vías respiratorias y facilitar el paso del aire.
Sin embargo, en los casos más graves, como cuando no es posible tratar la apnea del sueño con solo estos pequeños cambios, se pueden recomendar otras formas de tratamiento, que suelen ser el uso de CPAP o cirugía.

1. Uso de CPAP
El CPAP es un dispositivo, similar a una máscara de oxígeno, pero que empuja aire hacia los pulmones a través de los tejidos inflamados de la garganta, permitiendo una respiración normal que no interrumpe el sueño y, por tanto, permite un sueño más reparador. Obtenga más información sobre cómo funciona este dispositivo.
Normalmente, este dispositivo solo está indicado cuando existe una obstrucción completa de las vías respiratorias durante el sueño o cuando no es posible mejorar los síntomas con cambios en la rutina.
Sin embargo, el uso de CPAP puede resultar incómodo, por lo que muchas personas optan por probar otros dispositivos similares a CPAP o realizar una cirugía para corregir el problema.

2. Cirugía
Por lo general, el tratamiento quirúrgico para la apnea del sueño solo está indicado cuando otras formas de tratamiento no funcionan, se recomienda probar estos tratamientos durante al menos 3 meses. Sin embargo, en algunos casos, las estructuras de la cara deben cambiarse para corregir el problema y, por lo tanto, la cirugía puede considerarse como la primera forma de tratamiento.
Los principales tipos de cirugía que se realizan para tratar este problema incluyen:
- Extracción de tejido: se utiliza cuando existe exceso de tejido en la parte posterior de la garganta para extirpar amígdalas y adenoides, evitando que estas estructuras bloqueen el paso del aire o vibren, provocando ronquidos;
- Reposicionamiento del mentón: se recomienda cuando el mentón está muy retraído y reduce el espacio entre la lengua y la parte posterior de la garganta. Así, es posible colocar correctamente la barbilla y facilitar el paso del aire;
- Colocación de implantes: son una opción para la extracción de tejido y ayudan a evitar que las partes blandas de la boca y la garganta impidan el paso del aire;
- Creación de nuevo paso de aire: se utiliza sólo en los casos en que existe riesgo de vida y otras formas de tratamiento no han funcionado. En esta cirugía, se hace un canal en la garganta para permitir el paso del aire a los pulmones.
Además, todas las cirugías se pueden adaptar para tratar el problema específico de cada persona y, por lo tanto, es muy importante discutir todas las opciones de tratamiento con el médico.
Signos de mejora
Los signos de mejoría pueden tardar desde unos pocos días hasta varias semanas en aparecer, según el tipo de tratamiento, e incluyen disminución o ausencia de ronquidos durante el sueño, reducción de la sensación de cansancio durante el día, alivio de los dolores de cabeza y la capacidad de dormir sin despertar. despierto por la noche.
Signos de empeoramiento
Los signos de empeoramiento ocurren cuando no se inicia el tratamiento e incluyen mayor cansancio durante el día, despertarse varias veces durante el día con falta de aire severa y ronquidos fuertes durante el sueño, por ejemplo.