Vacuna contra la fiebre amarilla: lo que necesita saber
Contenido
- ¿Qué es la vacuna contra la fiebre amarilla?
- ¿Cómo funciona la vacuna?
- ¿Cuáles son los efectos secundarios leves?
- ¿Hay algún efecto secundario grave?
- ¿Quién necesita la vacuna?
- ¿Alguien no lo entiende?
- La línea de fondo
¿Qué es la vacuna contra la fiebre amarilla?
La fiebre amarilla es una enfermedad potencialmente mortal causada por el virus de la fiebre amarilla.
El virus se encuentra en partes de América del Sur y África. Se propaga a través de la picadura de mosquitos infectados con el virus. No se transmite de persona a persona.
Algunas personas con fiebre amarilla solo experimentan síntomas similares a los de la gripe y se recuperan completamente después de un corto tiempo. Otros desarrollan una forma más grave de la infección que causa síntomas graves, como:
- fiebre alta
- vómitos
- piel amarilla (ictericia)
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), del 30 al 60 por ciento de los que desarrollan un caso grave de fiebre amarilla mueren.
No hay cura para la fiebre amarilla, aunque algunos tratamientos pueden ayudar a reducir los síntomas. También hay una vacuna contra la fiebre amarilla que protege a las personas contra el virus de la fiebre amarilla.
Explicamos cómo funciona la vacuna, cómo se administra y sus posibles efectos secundarios.
¿Cómo funciona la vacuna?
La vacuna contra la fiebre amarilla hace que su sistema inmunitario produzca anticuerpos contra el virus. Se administra como una inyección relativamente indolora.
Si se encuentra en los Estados Unidos y planea viajar a un área donde la fiebre amarilla es común, deberá vacunarse en un centro de vacunación autorizado contra la fiebre amarilla.
Puedes encontrar sus ubicaciones aquí.
Originalmente, una dosis única debía durar al menos 10 años. Pero en 2013, la Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció que una sola inyección debería proporcionar inmunidad de por vida.
Tenga en cuenta que este cambio aún no se refleja en el Reglamento Sanitario Internacional, un documento legalmente vinculante presentado por la OMS. Como resultado, algunos países pueden no aceptar un certificado que tenga más de 10 años.
Puede consultar las regulaciones en países específicos aquí. Es posible que desee llamar a la embajada local antes de su viaje solo para estar seguro.
¿Cuáles son los efectos secundarios leves?
Como con casi cualquier otro medicamento o vacuna, algunas personas tienen una reacción a la vacuna contra la fiebre amarilla.
Por lo general, esta reacción es leve, con efectos secundarios como:
- fiebre
- dolores musculares
- dolor articular leve
Además, cualquier tipo de inyección puede causar dolor, enrojecimiento o hinchazón alrededor del sitio de inyección.
Estos efectos secundarios generalmente comienzan poco después de la inyección y pueden durar hasta 14 días, aunque la mayoría se resuelven en una semana. Aproximadamente 1 de cada 4 personas que reciben la vacuna experimentan efectos secundarios leves.
¿Hay algún efecto secundario grave?
Existe un pequeño riesgo de efectos secundarios graves de la vacuna contra la fiebre amarilla. Los CDC afirman que esto incluye:
- Una reacción alérgica grave, que afecta a aproximadamente 1 de cada 55,000 personas.
- una reacción grave del sistema nervioso, que afecta a aproximadamente 1 de cada 125,000 personas
- enfermedad grave con insuficiencia orgánica, que afecta a aproximadamente 1 de cada 250,000
Después de recibir la vacuna, esté atento a estos síntomas de una reacción alérgica grave:
- cambios de comportamiento
- urticaria
- dificultad para respirar
- fiebre alta
- hinchazón de la cara, lengua o garganta
- mareo
- debilidad
Busque tratamiento de emergencia si experimenta alguno de estos en cuestión de minutos u horas después de recibir la vacuna.
Otros síntomas que justifican una visita inmediata a un médico incluyen:
- confusión
- tos
- dificultad para tragar
- irritabilidad
- picor
- nerviosismo
- latidos rápidos
- erupción
- dolor de cabeza intenso
- rigidez de nuca
- latidos en los oídos
- hormigueo
- vómitos
¿Quién necesita la vacuna?
La vacuna contra la fiebre amarilla se recomienda para lo siguiente:
- Todas las personas de 9 meses o más que viven o viajan a áreas de América del Sur, África u otros países donde se encuentra el virus de la fiebre amarilla.
- personas que viajan a países que requieren prueba de vacunación contra la fiebre amarilla
- Cualquier persona que pueda entrar en contacto con el virus de la fiebre amarilla, como trabajadores de laboratorio o profesionales de la salud.
Se recomienda a las personas embarazadas que se vacunen solo si deben viajar a un área donde hay una epidemia y no es posible protegerse de las picaduras de mosquitos.
¿Alguien no lo entiende?
La vacuna no debe administrarse a:
- niños menores de 9 meses de edad
- adultos mayores de 59 años
- personas con inmunidad reducida, como las personas con VIH o las que reciben quimioterapia
- personas que han tenido una reacción severa al huevo, gelatina u otros ingredientes de la vacuna
- personas que han tenido una reacción alérgica severa a una dosis previa de la vacuna
- personas a quienes se les extirpó el timo o aquellas con un trastorno del timo
- viajeros mayores de 60 años que no hayan sido vacunados previamente contra la fiebre amarilla
Si tiene fiebre, es mejor esperar para recibir la vacuna hasta que se sienta mejor.
Además, las embarazadas o en periodo de lactancia solo deben vacunarse si existe un riesgo inevitable o no es posible protegerse contra las picaduras de mosquitos.
La línea de fondo
La fiebre amarilla es una enfermedad grave, por lo que es importante vacunarse si planea estar en un área donde el virus es común.
Si no está seguro de si debe vacunarse, hable con un médico. Pueden ayudarlo a sopesar los beneficios y riesgos.
Tenga en cuenta que la vacuna no es infalible. Al viajar a áreas con el virus de la fiebre amarilla, es importante protegerse contra las picaduras de mosquitos utilizando redes, repelentes de insectos y ropa protectora.
Trate de permanecer en el interior durante las horas pico cuando los mosquitos pueden picar para reducir aún más su riesgo. La mayoría de las especies pican desde el anochecer hasta el amanecer, pero una especie se alimenta durante el día. Alojarse en habitaciones con aire acondicionado puede reducir su riesgo.