Disfunción del nervio femoral
La disfunción del nervio femoral es una pérdida de movimiento o sensibilidad en partes de las piernas debido al daño del nervio femoral.
El nervio femoral se encuentra en la pelvis y desciende por la parte delantera de la pierna. Ayuda a los músculos a mover la cadera y estirar la pierna. Proporciona sensación (sensación) en la parte delantera del muslo y parte de la parte inferior de la pierna.
Un nervio está formado por muchas fibras, llamadas axones, rodeadas por un aislamiento, llamado vaina de mielina.
El daño a cualquier nervio, como el nervio femoral, se llama mononeuropatía. La mononeuropatía generalmente significa que hay una causa local de daño en un solo nervio. Los trastornos que afectan a todo el cuerpo (trastornos sistémicos) también pueden causar daño nervioso aislado en un nervio a la vez (como ocurre con la mononeuritis múltiple).
Las causas más comunes de disfunción del nervio femoral son:
- Lesión directa (trauma)
- Presión prolongada sobre el nervio
- Compresión, estiramiento o atrapamiento del nervio por partes cercanas del cuerpo o estructuras relacionadas con la enfermedad (como un tumor o un vaso sanguíneo anormal)
El nervio femoral también puede dañarse por cualquiera de los siguientes:
- Un hueso de la pelvis roto
- Un catéter colocado en la arteria femoral en la ingle.
- Diabetes u otras causas de neuropatía periférica
- Sangrado interno en la pelvis o el área del abdomen (abdomen)
- Acostado boca arriba con los muslos y las piernas flexionados y girados (posición de litotomía) durante la cirugía o los procedimientos de diagnóstico
- Cinturones de cintura apretados o pesados
Los síntomas pueden incluir cualquiera de los siguientes:
- Cambios en la sensibilidad del muslo, la rodilla o la pierna, como disminución de la sensibilidad, entumecimiento, hormigueo, ardor o dolor.
- Debilidad de la rodilla o la pierna, incluida la dificultad para subir y bajar escaleras, especialmente al bajar, con una sensación de que la rodilla cede o se dobla
El médico le preguntará acerca de sus síntomas y lo examinará. Esto incluirá un examen de los nervios y músculos de sus piernas.
El examen puede mostrar que tiene:
- Debilidad al estirar la rodilla o doblar la cadera
- Cambios de sensación en la parte delantera del muslo o en la pata delantera.
- Un reflejo de rodilla anormal
- Músculos cuádriceps más pequeños de lo normal en la parte frontal del muslo
Las pruebas que se pueden realizar incluyen:
- Electromiografía (EMG) para verificar la salud de los músculos y los nervios que controlan los músculos.
- Pruebas de conducción nerviosa (NCV) para verificar qué tan rápido se mueven las señales eléctricas a través de un nervio. Esta prueba generalmente se realiza al mismo tiempo que una EMG.
- Resonancia magnética para detectar masas o tumores.
Su proveedor puede solicitar pruebas adicionales, según su historial médico y sus síntomas. Las pruebas pueden incluir análisis de sangre, radiografías y otras pruebas por imágenes.
Su proveedor intentará identificar y tratar la causa del daño nervioso. Recibirá tratamiento por cualquier problema médico (como diabetes o sangrado en la pelvis) que pueda estar causando el daño al nervio.En algunos casos, el nervio se curará con el tratamiento del problema médico subyacente.
Otros tratamientos pueden incluir:
- Cirugía para extirpar un tumor o crecimiento que presiona el nervio
- Medicamentos para aliviar el dolor
- Pérdida de peso y cambios en el estilo de vida si la diabetes o el exceso de peso contribuyen al daño nervioso.
En algunos casos, no se necesita tratamiento y se recuperará por su cuenta. Si es así, cualquier tratamiento, como fisioterapia y terapia ocupacional, tiene como objetivo aumentar la movilidad, mantener la fuerza muscular y la independencia mientras se recupera. Se pueden recetar aparatos ortopédicos o férulas para ayudar a caminar.
Si la causa de la disfunción del nervio femoral puede identificarse y tratarse con éxito, es posible recuperarse por completo. En algunos casos, puede haber una pérdida parcial o total de movimiento o sensación, lo que resulta en algún grado de discapacidad permanente.
El dolor de nervios puede ser incómodo y puede durar mucho tiempo. Una lesión en el área femoral también puede dañar la arteria o vena femoral, lo que puede causar sangrado y otros problemas.
Las complicaciones que pueden resultar incluyen:
- Lesión repetida en la pierna que pasa desapercibida debido a la pérdida de sensibilidad.
- Lesión por caídas por debilidad muscular
Llame a su proveedor si presenta síntomas de disfunción del nervio femoral.
Neuropatía - nervio femoral; Neuropatía femoral
- Daño del nervio femoral
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