Crisis hemolítica
La crisis hemolítica ocurre cuando se destruyen grandes cantidades de glóbulos rojos en un período corto de tiempo. La pérdida de glóbulos rojos ocurre mucho más rápido de lo que el cuerpo puede producir nuevos glóbulos rojos.
Durante una crisis hemolítica, el cuerpo no puede producir suficientes glóbulos rojos para reemplazar los que se destruyen. Esto causa anemia aguda y, a menudo, grave.
La parte de los glóbulos rojos que transporta oxígeno (hemoglobina) se libera al torrente sanguíneo. Esto puede provocar daño renal.
Las causas de la hemólisis incluyen:
- Falta de ciertas proteínas dentro de los glóbulos rojos.
- Enfermedades autoinmunes
- Ciertas infecciones
- Defectos en las moléculas de hemoglobina dentro de los glóbulos rojos.
- Defectos de las proteínas que forman la estructura interna de los glóbulos rojos.
- Efectos secundarios de ciertos medicamentos.
- Reacciones a las transfusiones de sangre.
Llame a su proveedor de atención médica si tiene:
- Síntomas de anemia, que incluyen piel pálida o fatiga, especialmente si estos síntomas empeoran.
- Orina de color rojo, marrón rojizo o marrón (color té)
Puede ser necesario un tratamiento de emergencia. Esto puede incluir hospitalización, oxígeno, transfusiones de sangre y otros tratamientos.
Cuando su condición sea estable, su proveedor realizará un examen físico y le preguntará acerca de su historial médico y sus síntomas. El examen físico puede mostrar inflamación del bazo (esplenomegalia).
Las pruebas que se pueden realizar incluyen:
- Panel de química sanguínea
- Conteo sanguíneo completo (CBC)
- Prueba de Coombs
- Haptoglobina
- Lactato deshidrogenasa
El tratamiento depende de la causa de la hemólisis.
Hemólisis aguda
Gallagher PG. Anemias hemolíticas: membrana de los glóbulos rojos y defectos metabólicos. En: Goldman L, Schafer AI, eds. Medicina Goldman-Cecil. 26ª ed. Filadelfia, PA: Elsevier; 2020: capítulo 152.