Dolor de espalda e incontinencia: ¿qué puedo hacer?
Contenido
- ¿El dolor de espalda es un síntoma de incontinencia?
- ¿Qué dice la investigación?
- ¿Cuáles son las causas y los factores de riesgo del dolor de espalda y la incontinencia?
- ¿El dolor de espalda y la incontinencia pueden ser el resultado de otra afección?
- ¿Cómo se diagnostica la IU?
- ¿Cuáles son las opciones de tratamiento para el dolor de espalda y la incontinencia?
- Dolor de espalda
- Incontinencia
- ¿Cuál es la perspectiva?
- ¿Cómo se pueden prevenir el dolor de espalda y la incontinencia?
- Consejos de prevención
¿Existe alguna conexión?
La incontinencia urinaria (IU) suele ser un síntoma de una afección subyacente. El tratamiento de esa afección puede remediar los síntomas de la IU y otros efectos secundarios relacionados.
La incontinencia puede ser causada por:
- infecciones frecuentes del tracto urinario (ITU)
- estreñimiento
- el embarazo
- parto
- Cancer de prostata
El dolor de espalda también se ha estudiado como causa de IU. Los investigadores creen que la activación de los músculos del abdomen puede provocar dolor de espalda. Esos músculos pueden afectar su capacidad para retener o liberar la orina correctamente.
Sin embargo, se necesita más investigación para determinar si el dolor de espalda es una causa o un síntoma de la IU.
Siga leyendo para obtener más información sobre la IU y su posible conexión con el dolor de espalda.
¿El dolor de espalda es un síntoma de incontinencia?
La conexión entre el dolor de espalda y los síntomas de la IU no está clara. Algunas personas experimentan dolor de espalda o presión que pueden causar episodios de incontinencia, pero los investigadores aún no han identificado las causas.
La mayoría de los síntomas de la IU dependen del tipo que tenga. Los tipos y síntomas de la IU incluyen:
- Incontinencia de esfuerzo: Este tipo de IU es causado por una presión repentina en la vejiga. Esta presión puede deberse a reír, estornudar, hacer ejercicio o levantar objetos pesados.
- Incontinencia de urgencia: Las personas con este tipo de IU experimentan una necesidad repentina e intensa de orinar. Y no pueden controlar la pérdida de orina. Las personas con este tipo de incontinencia pueden necesitar orinar con frecuencia.
- Incontinencia por rebosamiento: Cuando su vejiga no se vacía por completo, puede experimentar goteo o goteo de orina.
- Incontinencia funcional: Un impedimento físico o mental puede afectar su capacidad para llegar al baño a tiempo para orinar.
- Incontinencia total: Si no puede retener la orina o evitar orinar, es posible que tenga incontinencia total.
- Incontinencia mixta: Cuando se ve afectado por más de un tipo de IU, es posible que tenga incontinencia mixta. Por ejemplo, no es raro que una persona tenga incontinencia de esfuerzo y de urgencia.
¿Qué dice la investigación?
Los investigadores están estudiando cómo el dolor de espalda o los problemas de espalda pueden afectar o causar incontinencia. Hasta ahora, la investigación no es clara. Pero, algunos estudios han arrojado algo de luz sobre posibles conexiones.
Un estudio brasileño publicado en 2015 exploró la correlación entre el dolor lumbar y la IU. Sin embargo, este estudio se realizó en una población con una edad promedio de 80 años. Los resultados no fueron concluyentes y es posible que la edad avanzada de los participantes del estudio afectó su salud urinaria.
En una de las mujeres un año después de dar a luz, los investigadores encontraron que el dolor de espalda y la IU son comunes. Este estudio mostró que el dolor de espalda es más común y es más probable que interfiera con la vida diaria de una mujer que la IU.
Las mujeres que eran obesas, tenían una edad materna avanzada o tuvieron un parto vaginal durante el parto tenían más probabilidades de experimentar síntomas de IU. El estudio no encontró conexión entre las mujeres que experimentaron dolor de espalda y sus episodios de IU.
Se necesita más investigación para determinar si existe un vínculo sustancial entre los dos síntomas.
¿Cuáles son las causas y los factores de riesgo del dolor de espalda y la incontinencia?
Ciertos factores de riesgo aumentan sus posibilidades de experimentar síntomas tanto de dolor de espalda como de incontinencia. Estos factores de riesgo incluyen:
- Obesidad: Cargar peso extra ejerce una presión adicional sobre la espalda. El peso adicional también aumenta la presión sobre la vejiga y los músculos cercanos. Esto puede provocar incontinencia de esfuerzo y, con el tiempo, el estrés adicional puede debilitar los músculos de la vejiga.
- Años: El dolor de espalda se vuelve más común con la edad. Asimismo, los músculos que afectan el control de la vejiga pierden fuerza a medida que envejece.
- Otras enfermedades: Algunas afecciones, como la artritis y la diabetes, pueden causar tanto dolor de espalda como incontinencia. Las personas con ciertas afecciones psicológicas, como ansiedad y depresión, también son más propensas a experimentar dolor de espalda.
¿El dolor de espalda y la incontinencia pueden ser el resultado de otra afección?
Aunque es poco común, un trastorno que podría causar dolor de espalda e IU es el síndrome de la cola de caballo (CES). CES afecta el haz de raíces nerviosas al final de la médula espinal. Estas raíces nerviosas envían y reciben señales de su cerebro y controlan la mitad inferior de su cuerpo y sus órganos pélvicos.
Cuando las raíces nerviosas se comprimen, la presión corta la sensación y el control. Los nervios que controlan la vejiga y los intestinos son particularmente susceptibles a la pérdida de control causada por este trastorno.
Un disco roto también puede ejercer presión sobre las raíces nerviosas. Este disco y la presión sobre las raíces nerviosas pueden provocar dolor de espalda.
Y una forma de artritis llamada espondilitis anquilosante (EA) puede causar dolor de espalda. Esta condición causa inflamación en sus articulaciones espinales. La inflamación puede provocar malestar y dolor crónico intenso.
¿Cómo se diagnostica la IU?
La única forma de diagnosticar la causa subyacente tanto del dolor de espalda como de la IU es consultar a su médico y someterse a un examen médico completo. El examen puede ayudar a su médico a decidir si sus síntomas están relacionados con una afección separada que necesita atención.
Durante el examen, es importante que detalle los síntomas, cuándo los experimenta y cómo los alivia.
Después de esta fase de diagnóstico inicial, su médico puede ordenar varias pruebas. Estas pruebas pueden incluir pruebas por imágenes como radiografías y análisis de sangre. Las pruebas pueden eliminar las causas de sus síntomas.
Si su médico no puede llegar a un diagnóstico, es posible que lo derive a un urólogo o un especialista en dolor de espalda.
¿Cuáles son las opciones de tratamiento para el dolor de espalda y la incontinencia?
El tratamiento para el dolor de espalda y la IU se basa en encontrar una causa subyacente. Una vez que usted y su médico comprendan qué está causando sus síntomas, puede desarrollar un plan para controlarlos.
Dolor de espalda
Los tratamientos comunes para el dolor de espalda incluyen:
- analgésicos recetados o de venta libre
- cambios en el estilo de vida, como obtener una nueva colchoneta
- ejercicio
- terapia física
En casos graves, puede ser necesaria una cirugía.
Incontinencia
Los tratamientos de primera línea para la IU pueden incluir:
- entrenar su vejiga para retener la orina durante períodos de tiempo más largos
- cambiar las estrategias de micción, incluido vaciar la vejiga dos veces en una pausa para ir al baño para vaciar la vejiga
- programar descansos para ir al baño
- haciendo ejercicios para los músculos del suelo pélvico
- tomar medicamentos recetados para ayudar a relajar los músculos de la vejiga
En algunos casos, su médico puede recomendar el uso de un dispositivo médico, como un inserto uretral o un pesario vaginal, para ayudar a sostener la vejiga y prevenir fugas.
Las terapias intervencionistas también pueden ayudar:
- inyecciones de material voluminoso alrededor de la uretra para mantenerla cerrada y reducir las fugas
- Inyecciones de toxina botulínica tipo A (Botox) para relajar el músculo de la vejiga.
- Implantes de estimulador de nervios para ayudar en el control de la vejiga.
Si no ha tenido éxito por otros medios, su médico puede recomendarle una cirugía.
¿Cuál es la perspectiva?
Su perspectiva de vida con dolor de espalda e IU depende de si usted y su médico pueden identificar la causa de los síntomas. Si encuentra la causa, sus síntomas pueden tratarse.
En otros casos, los síntomas pueden durar mucho tiempo.
Puede ser difícil determinar la causa de sus síntomas. E identificarlo puede llevar tiempo. Pero el alivio permanente de los síntomas vale la pena.
¿Cómo se pueden prevenir el dolor de espalda y la incontinencia?
Si experimenta episodios poco frecuentes de dolor de espalda e IU, es posible que pueda reducir el riesgo de sufrir otro episodio.
Sin embargo, su mejor línea de defensa es que su médico diagnostique la afección y establezca un plan de tratamiento.
Consejos de prevención
- Ejercicio: El ejercicio regular puede ayudar a prevenir la debilidad de los músculos de la espalda, lo que reduce el riesgo de dolor de espalda. Del mismo modo, el ejercicio puede aumentar los músculos del suelo pélvico. Los músculos pélvicos más fuertes facilitan la retención de la orina.
- Mantener un peso saludable: El exceso de peso puede causar tanto dolor de espalda como IU.
- Consuma una dieta inteligente: Llevar una dieta balanceada con mucha fibra, proteínas magras, frutas y verduras puede ayudarlo a mantener su peso y hacer ejercicio. Asimismo, una dieta saludable reduce el riesgo de estreñimiento. El estreñimiento puede causar tanto dolor lumbar como incontinencia.