Radiografía
Contenido
- ¿Qué es una gammagrafía ósea?
- ¿Por qué se realiza una gammagrafía ósea?
- ¿Cuáles son los riesgos de una gammagrafía ósea?
- ¿Cómo me preparo para una gammagrafía ósea?
- ¿Cómo se realiza una gammagrafía ósea?
- ¿Qué significan los resultados?
- Seguimiento después de una gammagrafía ósea
¿Qué es una gammagrafía ósea?
Una exploración ósea es una prueba de imágenes que se usa para ayudar a diagnosticar problemas con los huesos. Utiliza de forma segura una cantidad muy pequeña de un medicamento radioactivo llamado radiofármaco. También se le conoce como un "tinte", pero no mancha el tejido.
Específicamente, se realiza una exploración ósea para revelar problemas con el metabolismo óseo. El metabolismo óseo se refiere al proceso en el cual los huesos se descomponen y se reconstruyen. La formación de hueso nuevo es parte del proceso de curación cuando los huesos se lesionan o se rompen. Una exploración ósea es una buena manera de ver y documentar la actividad metabólica anormal en los huesos.
Una exploración ósea también se puede usar para determinar si el cáncer se ha diseminado a los huesos desde otra área del cuerpo, como la próstata o el seno.
Durante una exploración ósea, se inyecta una sustancia radioactiva en una vena que es absorbida por los huesos. Luego serás monitoreado por varias horas. Se usa una cantidad muy pequeña de radiación en la sustancia, y casi toda se libera de su cuerpo en dos o tres días.
¿Por qué se realiza una gammagrafía ósea?
Su médico puede ordenar una gammagrafía ósea si cree que tiene un problema en los huesos. Una gammagrafía ósea también puede ayudar a encontrar la causa de cualquier dolor óseo inexplicable que esté experimentando.
Las exploraciones óseas pueden revelar problemas óseos asociados con las siguientes condiciones:
- artritis
- necrosis avascular (cuando el tejido óseo muere debido a la falta de suministro de sangre)
- cánceres de hueso
- cáncer que se ha extendido al hueso desde otras partes del cuerpo
- displasia fibrosa (una afección que hace que crezca un tejido anormal similar a una cicatriz en lugar del hueso normal)
- fracturas
- infección que afecta el hueso
- Enfermedad ósea de Paget (una enfermedad que causa huesos débiles y deformados)
¿Cuáles son los riesgos de una gammagrafía ósea?
Una gammagrafía ósea no conlleva un riesgo mayor que las radiografías convencionales. Los trazadores en la sustancia radioactiva utilizada en una exploración ósea producen muy poca exposición a la radiación. El riesgo de tener una reacción alérgica a los trazadores es bajo.
Sin embargo, la prueba puede no ser segura para mujeres embarazadas o lactantes. Existe el riesgo de lesiones al feto y de contaminar la leche materna. Asegúrese de decirle a su médico si está embarazada o amamantando.
¿Cómo me preparo para una gammagrafía ósea?
Una gammagrafía ósea no requiere preparación especial. Antes de la exploración, su médico le pedirá que se quite las joyas con metal, incluidas las perforaciones en el cuerpo.
El procedimiento de detección real dura aproximadamente una hora. Su médico puede darle un sedante suave para ayudarlo a relajarse si cree que tendrá problemas para quedarse quieto durante ese tiempo.
¿Cómo se realiza una gammagrafía ósea?
El procedimiento comienza con una inyección de sustancia radiactiva en su vena. Luego se permite que la sustancia atraviese su cuerpo durante las próximas dos a cuatro horas. Dependiendo de la razón de la exploración ósea, su médico puede comenzar a obtener imágenes de inmediato.
A medida que la sustancia se propaga a través de su cuerpo, las células del hueso gravitan naturalmente hacia áreas que necesitan reparación. Los trazadores radiactivos de la sustancia siguen estas células y se acumulan en lugares donde el hueso está dañado. Se absorbe en regiones que tienen un flujo sanguíneo alto.
Después de que haya pasado suficiente tiempo, su médico usará una cámara especial para escanear los huesos. Las áreas dañadas, donde la sustancia se ha asentado, aparecen como manchas oscuras en la imagen.
Su médico puede repetir el proceso de inyección e imagen si la primera ronda no fue concluyente. También pueden solicitar una tomografía computarizada de emisión de fotón único (SPECT). Esto es similar a una exploración ósea, excepto que el proceso de imágenes crea imágenes en 3-D de sus huesos. Un SPECT es necesario si su médico necesita ver más profundamente en sus huesos. También pueden usarlo si las imágenes originales no estaban claras en ciertas áreas.
¿Qué significan los resultados?
Los resultados de las pruebas se consideran normales cuando la sustancia radioactiva se extiende de manera uniforme por todo el cuerpo. Esto significa que es probable que no tenga un problema óseo importante.
Los resultados se consideran anormales cuando la exploración muestra "puntos calientes" más oscuros o "puntos fríos" más claros en los huesos. Los puntos calientes describen lugares donde se ha acumulado un exceso de sustancia radiactiva. Los puntos fríos, por otro lado, son áreas donde no se acumuló en absoluto. Los resultados anormales pueden indicar que tiene un trastorno óseo, como cáncer o artritis o infección en el hueso.
Seguimiento después de una gammagrafía ósea
Una gammagrafía ósea no causa efectos secundarios ni complicaciones. La mayor parte del marcador radiactivo se elimina de su cuerpo en 24 horas. Pequeñas cantidades pueden permanecer hasta por tres días.
Si bien la prueba puede ayudar a identificar problemas en el metabolismo óseo, no necesariamente revela la razón de ellos. Una gammagrafía ósea indica que hay un problema y dónde se encuentra. Es una prueba no específica. Es posible que deba someterse a más pruebas si el escáner óseo mostró anormalidades. Su médico le explicará sus opciones y le ayudará a guiarlo a través del proceso.