Cáncer de riñón: síntomas, diagnóstico y tratamiento
Contenido
- Los síntomas del cáncer de riñón
- Cómo confirmar el diagnóstico
- Como se hace el tratamiento
- 1. Cirugía
- 2. Terapia biológica
- 3. Embolización
- 4. Radioterapia
- Quién está más en riesgo
O câncer nos rins, também conhecido por câncer renal, é um tipo relativamente comum de câncer que afeta principalmente homens entre 55 e 75 anos de idade, provocando sintomas como presença de sangue na urina, dor constante no fundo das costas ou aumento da pressão arterial , por ejemplo.
Generalmente, el tipo más común de cáncer de riñón es el carcinoma de células renales, que se puede curar fácilmente con cirugía, si se identifica a tiempo. Sin embargo, si el cáncer ya ha desarrollado metástasis, el tratamiento puede ser más difícil y puede ser necesario realizar otros tratamientos, como radioterapia, además de la cirugía.
Los síntomas del cáncer de riñón
Los signos y síntomas del cáncer de riñón son poco frecuentes en las primeras etapas de la enfermedad, pero a medida que avanza el cáncer pueden aparecer algunos síntomas, siendo los principales:
- Sangre en la orina;
- Hinchazón o masa en la región abdominal;
- Dolor constante en la parte inferior de la espalda;
- Cansancio excesivo;
- Pérdida de peso constante;
- Fiebre baja constante.
Además, como los riñones son responsables de regular la presión arterial y la producción de eritrocitos, es común un cambio repentino en los valores de presión arterial, así como un marcado aumento o disminución en el número de eritrocitos en el análisis de sangre.
Si surgen estos síntomas es importante consultar a un médico de cabecera o nefrólogo para evaluar si existe algún problema que pueda estar causando los síntomas y, si lo hace, identificar el cáncer en una etapa temprana, facilitando el tratamiento.
Cómo confirmar el diagnóstico
Para valorar lo que está pasando en los riñones y analizar la hipótesis del cáncer, el médico puede ordenar diversas pruebas como ecografía, radiografía de tórax, tomografía computarizada o resonancia magnética, por ejemplo.
La ecografía suele ser la primera prueba que se solicita, ya que ayuda a identificar y evaluar posibles masas y quistes en el riñón, que pueden indicar cáncer. Las otras pruebas, por otro lado, se pueden realizar para confirmar el diagnóstico o estadificar la enfermedad.
Como se hace el tratamiento
El tratamiento del cáncer de riñón depende del tamaño y desarrollo del tumor, pero las principales formas de tratamiento incluyen:
1. Cirugía
Se realiza en casi todos los casos y ayuda a extirpar la parte afectada del riñón. Por lo tanto, cuando el cáncer se identifica en una etapa temprana, la cirugía puede ser la única forma de tratamiento necesaria, ya que puede eliminar todas las células cancerosas y curar el cáncer.
En los casos de cáncer más avanzados, la cirugía se puede utilizar junto con la radioterapia, por ejemplo, para reducir el tamaño del tumor y facilitar el tratamiento.
2. Terapia biológica
En este tipo de tratamiento se utilizan medicamentos como Sunitinib, Pazopanib o Axitinib, que fortalecen el sistema inmunológico y facilitan la eliminación de las células cancerosas.
Sin embargo, este tipo de tratamiento no es efectivo en todos los casos y, por lo tanto, el médico puede necesitar realizar varias evaluaciones durante el tratamiento para ajustar las dosis e incluso dejar de usar estos medicamentos.
3. Embolización
Esta técnica se suele utilizar en casos de cáncer más avanzados cuando el estado de salud de la persona no permite la cirugía, e impide el paso de sangre a la región del riñón afectada provocando la muerte.
Para ello, el cirujano inserta un pequeño tubo, conocido como catéter, en la arteria de la ingle y lo guía hasta el riñón. Luego, inyecta una sustancia que permite cerrar los vasos sanguíneos y evitar el paso de la sangre.
4. Radioterapia
La radioterapia generalmente se usa en casos de cáncer con metástasis, ya que usa radiación para retrasar el desarrollo del cáncer y evitar que las metástasis sigan creciendo.
Este tipo de tratamiento generalmente se usa antes de la cirugía para hacer que el tumor sea más pequeño y más fácil de extirpar, o después, para eliminar las células cancerosas que no se pudieron extirpar con la cirugía.
Aunque solo se necesitan unos minutos de tratamiento cada día, la radioterapia tiene varios efectos secundarios como cansancio excesivo, diarrea o la sensación de estar siempre enfermo.
Quién está más en riesgo
El cáncer de riñón, además de ser más común en hombres después de los 60 años, también es más común en personas con:
- IMC superior a 30 kg / m²;
- Alta presión sanguínea;
- Antecedentes familiares de cáncer de riñón;
- Enfermedades genéticas, como el síndrome de Von Hippel-Lindau;
- Fumadores;
- Obesidad.
Además, quienes necesitan tratamiento de diálisis para filtrar la sangre, debido a otros problemas renales, también tienen un mayor riesgo de desarrollar este tipo de cáncer.