Degeneración macular (DM): que es, síntomas y tratamiento
Contenido
- Síntomas principales
- Tipos de degeneración de la retina
- 1. Degeneración macular relacionada con la edad (AMD)
- 2. Degeneración seca
- 3. Degeneración húmeda
- Como se hace el tratamiento
- Tratamiento natural
La degeneración macular, también conocida como degeneración de la retina o simplemente DM, es una enfermedad que provoca una disminución de la capacidad de la visión central, con oscurecimiento y pérdida de agudeza, preservando la visión periférica.
Esta enfermedad está relacionada con el envejecimiento y afecta principalmente a personas mayores de 50 años. Por lo tanto, también se la conoce como DMAE, degeneración macular relacionada con la edad. Sin embargo, también es posible que aparezca en jóvenes y personas con otros factores de riesgo como el consumo de cigarrillos, falta de vitaminas en la dieta, hipertensión arterial o exposición intensa a la luz solar, por ejemplo.
A pesar de no tener cura, el tratamiento puede mejorar la visión y evitar que la enfermedad empeore, e involucra algunas opciones guiadas por el oftalmólogo, como la fotocoagulación con láser, medicamentos, como los corticoides, e inyecciones intraoculares que disminuyen la inflamación, además de que se recomienda. Seguir una dieta rica en antioxidantes, como vitamina C y E, y omega-3, presentes en alimentos o suplementos.
Síntomas principales
La degeneración de la retina surge cuando el tejido del centro de la retina, llamado mácula, se deteriora. Por lo tanto, los síntomas que causa incluyen:
- Pérdida gradual de la capacidad de ver objetos con claridad;
- Visión borrosa o distorsionada en el centro de la visión;
- Aparición de un área oscura o vacía en el centro de la visión.
Aunque puede afectar gravemente a la visión, la degeneración macular no suele conducir a la ceguera total, ya que solo afecta a la región central, conservando la visión periférica.
El diagnóstico de esta enfermedad se realiza mediante evaluaciones y pruebas realizadas por el oftalmólogo, quien observará la mácula y detectará la forma y grado de degeneración de cada persona, para planificar el mejor tratamiento.
Tipos de degeneración de la retina
Según el estadio y la gravedad de la degeneración macular, puede presentarse de diferentes formas:
1. Degeneración macular relacionada con la edad (AMD)
Es la etapa inicial de la enfermedad y es posible que no cause síntomas. En esta etapa, el oftalmólogo puede observar la existencia de drusas, que son una especie de desecho que se acumula debajo del tejido retiniano.
Aunque la acumulación de drusas no necesariamente causa pérdida de visión, pueden interferir con la salud de la mácula y progresar a una etapa más avanzada, si no se descubren y tratan rápidamente.
2. Degeneración seca
Es la principal forma de presentación de la enfermedad y ocurre cuando las células de la retina mueren, lo que provoca una pérdida gradual de la visión. Si no se trata, esta degeneración puede empeorar y desarrollar, en el futuro, una forma más agresiva.
3. Degeneración húmeda
Esta es la etapa más grave de la enfermedad, en la que los líquidos y la sangre pueden filtrarse de los vasos sanguíneos debajo de la retina, lo que provoca cicatrices y pérdida de la visión.
Como se hace el tratamiento
La degeneración macular no tiene cura, sin embargo, el seguimiento y seguimiento por parte del oftalmólogo, en citas programadas, debe iniciarse lo antes posible, para no agravar la enfermedad.
En algunos casos, puede estar indicado un tratamiento, que incluye el uso de láser térmico, corticoides, fotocoagulación de la retina, además de la aplicación intraocular de medicamentos, como Ranibizumab o Aflibercept, por ejemplo, que reducen la proliferación de vasos sanguíneos y inflamación.
Tratamiento natural
El tratamiento natural no reemplaza el tratamiento con medicamentos dirigidos por un oftalmólogo, sin embargo, es importante ayudar a prevenir y prevenir el empeoramiento de la degeneración macular.
Se recomienda una dieta rica en omega-3, presente en pescados y moluscos, además de antioxidantes, vitamina C, vitamina E, betacaroteno, zinc y cobre, presentes en frutas y verduras, ya que son elementos importantes para la salud. de la retina.
Si los alimentos no son suficientes para cubrir las necesidades diarias, es posible consumirlos a través de suplementos vendidos en tiendas naturistas y farmacias de manipulación, en las dosis recomendadas por el oftalmólogo.
Además, para ayudar en la prevención y tratamiento de la enfermedad, se aconseja seguir otros hábitos saludables como no fumar, evitar bebidas alcohólicas y protegerse de la luz solar intensa y la radiación ultravioleta con gafas de sol adecuadas.