¿Puede usar sales de Epsom si tiene diabetes?

Contenido
- ¿Qué es la sal de Epsom?
- 6 consejos para cuidar tus pies
- 1. Revise sus pies a diario
- 2. Lávese los pies a diario
- 3. Córtate las uñas de los pies
- 4. Evite ambientes muy calientes y muy fríos
- 5. Compre calzado adecuado
- 6. Mejora la circulación
- Que puedes hacer ahora
Daño en el pie y diabetes
Si tiene diabetes, debe tener en cuenta el daño en el pie como una complicación potencial. El daño del pie a menudo es causado por una mala circulación y daño a los nervios. Ambas afecciones pueden ser causadas por niveles altos de azúcar en sangre a lo largo del tiempo.
Cuidar bien sus pies puede ayudar a reducir el riesgo de daño en los pies. Aunque algunas personas sumergen sus pies en baños de sal de Epsom, este remedio casero no se recomienda para personas con diabetes. Mojar los pies puede aumentar el riesgo de problemas en los pies. Hable con su médico antes de remojar sus pies en sales de Epsom.
¿Qué es la sal de Epsom?
La sal de Epsom también se llama sulfato de magnesio. Es un compuesto mineral que a veces se usa como remedio casero para dolores musculares, hematomas y astillas. En algunos casos, las personas agregan sal de Epsom a los baños o tinas para sumergirse.
Si tiene diabetes, hable con su médico antes de sumergir sus pies en un baño de sal de Epsom. Mojar los pies en realidad puede aumentar el riesgo de problemas en los pies. Se recomienda que se lave los pies todos los días, pero no debe remojarlos. El remojo puede resecar tu piel. Esto puede causar la formación de grietas y provocar infecciones.
Algunas personas pueden recomendar las sales de Epsom como suplemento de magnesio. En su lugar, debe buscar suplementos de magnesio diseñados para uso oral. Consulte el pasillo de vitaminas y suplementos en su farmacia local. Las personas con diabetes suelen tener niveles bajos de magnesio, un mineral que juega un papel importante en su cuerpo. La investigación sugiere que los suplementos de magnesio por vía oral pueden ayudar a mejorar los niveles de azúcar y colesterol en sangre en algunas personas con diabetes.
A menos que su médico le indique lo contrario, evite usar baños de pies con sal de Epsom. Si está interesado en los suplementos de magnesio orales, pídale más información a su médico. Pueden ayudarlo a evaluar los posibles beneficios y riesgos de tomarlos. También pueden recomendar un producto y una dosis.
6 consejos para cuidar tus pies
La mayoría de nosotros pasamos mucho tiempo de pie. Es fundamental cuidarlos bien, especialmente cuando se tiene diabetes. Aquí hay seis consejos para mantener sus pies sanos:
1. Revise sus pies a diario
Busque grietas y signos de irritación de la piel. Trate cualquier problema temprano. Su médico también inspeccionará sus pies durante las visitas.
2. Lávese los pies a diario
Séquelos después y use una loción para mantener su piel suave y flexible. Esto puede ayudar a prevenir las grietas en la piel.
3. Córtate las uñas de los pies
Esto ayudará a evitar que las uñas de los pies pinchen la piel. También debe revisar sus zapatos antes de ponérselos y quitar cualquier objeto pequeño que pueda rayar o pinchar sus pies.
4. Evite ambientes muy calientes y muy fríos
El daño a los nervios causado por la diabetes puede hacer que sus pies sean menos sensibles al dolor y a los cambios de temperatura.
5. Compre calzado adecuado
El calzado adecuado permite una buena circulación. Considere pedirle recomendaciones o consejos a su podólogo o al personal especializado de la zapatería.
6. Mejora la circulación
Para ayudar a que sus pies mantengan una circulación adecuada, haga ejercicio con regularidad, levante los pies mientras está sentado y evite sentarse en un solo lugar por mucho tiempo. Intente hacer al menos 30 minutos de ejercicio al día o siga las recomendaciones de actividad física de su médico.
Si nota signos de agrietamiento, irritación o una herida, limpie bien el área. Siga las recomendaciones de su médico para prevenir más complicaciones. Pueden alentarlo a que se aplique una crema antibiótica u otros tratamientos. Esto es especialmente importante si tiene daños en los nervios o problemas circulatorios graves.
Que puedes hacer ahora
Es probable que su médico le anime a evitar mojar sus pies. Esto se debe a que el contacto prolongado con el agua puede resecar su piel. A menos que su médico le dé otras recomendaciones, puede seguir esta rutina diaria de lavado de pies:
- Antes de lavarse o enjuagarse los pies, controle la temperatura del agua. El agua demasiado caliente puede resecar tu piel y el agua muy caliente puede quemarte.
- Utilice un jabón natural sin fragancias ni agentes exfoliantes añadidos. Limpie todas las áreas de sus pies, incluso entre los dedos.
- Una vez que sus pies estén limpios, séquelos con cuidado, especialmente entre los dedos.
- Masajee suavemente sus pies con loción sin fragancia. Evite poner loción entre los dedos de los pies, donde el exceso de humedad puede hacer que la piel se vuelva demasiado suave o estimular el crecimiento de hongos.
Las fragancias y otros productos químicos pueden irritar y secar la piel. Busque jabones, lociones y otros productos de higiene que estén libres de fragancias agregadas y otros irritantes potenciales.