¿Qué es la leucemia aguda, los síntomas y el tratamiento?

Contenido
- Los síntomas de la leucemia aguda
- Leucemia infantil aguda
- Tratamiento de la leucemia aguda
- ¿Puede curar la leucemia aguda?
La leucemia aguda es un tipo de cáncer relacionado con una médula ósea anormal, que conduce a una producción anormal de células sanguíneas. La leucemia aguda se puede clasificar en mieloide o linfoide según los marcadores celulares identificados mediante inmunofenotipificación, que es una técnica de laboratorio que se utiliza para diferenciar células muy similares al microscopio.
Este tipo de leucemia es más común en niños y adultos jóvenes y se caracteriza por la presencia de más del 20% de blastos en la sangre, que son glóbulos jóvenes, y por el gap leucémico, que corresponde a la ausencia de células intermedias entre los blastos y los neutrófilos maduros.
El tratamiento de la leucemia aguda se realiza mediante transfusiones de sangre y quimioterapia en un ambiente hospitalario hasta que dejen de detectarse los signos clínicos y de laboratorio relacionados con la leucemia.

Los síntomas de la leucemia aguda
Los síntomas de la leucemia mieloide o linfoide aguda están relacionados con cambios en las células sanguíneas y defectos de la médula ósea, siendo los principales:
- Debilidad, cansancio e indisposición;
- Sangrado de la nariz y / o manchas moradas en la piel;
- Aumento del flujo menstrual y tendencia a sangrar por la nariz;
- Fiebre, sudor nocturno y pérdida de peso sin causa aparente;
- Dolor de huesos, tos y dolor de cabeza.
Casi la mitad de los pacientes presenta estos síntomas hasta por 3 meses hasta que se diagnostica la leucemia mediante pruebas como:
- Hemograma completo, que indica leucocitosis, trombocitopenia y la presencia de varias células jóvenes (blastos), ya sean de linaje mieloide o linfoide;
- Ensayos bioquímicos, como la dosis de ácido úrico y LDH, que suelen aumentar debido a la mayor presencia de blastos en la sangre;
- Coagulograma, en el que se controlan la producción de fibrinógeno, dímero D y el tiempo de protrombina;
- Mielograma, en el que se comprueban las características de la médula ósea.
Además de estas pruebas, el hematólogo puede solicitar mutaciones mediante técnicas moleculares, como NPM1, CEBPA o FLT3-ITD, para indicar la mejor forma de tratamiento.
Leucemia infantil aguda
La leucemia aguda infantil en general tiene mejor pronóstico que en los adultos, pero el tratamiento de la enfermedad debe realizarse en un ambiente hospitalario a través de quimioterapia, que tiene efectos secundarios como náuseas, vómitos y caída del cabello, por lo que este período puede ser muy agotador para el niño y la familia. A pesar de esto, los niños tienen más probabilidades de curar la enfermedad que los adultos. Vea cuáles son los efectos de la quimioterapia y cómo se realiza.

Tratamiento de la leucemia aguda
El tratamiento de la leucemia aguda lo define el hematólogo en función de los síntomas, resultados de las pruebas, edad de la persona, presencia de infecciones, riesgo de metástasis y recurrencia. El tiempo de tratamiento puede variar, y los síntomas comienzan a disminuir de 1 a 2 meses después del inicio de la poliquimioterapia, por ejemplo, y el tratamiento puede durar aproximadamente 3 años.
El tratamiento de la leucemia mieloide aguda se puede realizar mediante quimioterapia, que es una combinación de fármacos, transfusión de plaquetas y el uso de antibióticos para disminuir el riesgo de infecciones, ya que el sistema inmunológico está comprometido. Obtenga más información sobre el tratamiento de la leucemia mieloide aguda.
En cuanto al tratamiento de la leucemia linfoide aguda, se puede realizar mediante una terapia multifármaco, que se realiza con altas dosis de medicación para eliminar el posible riesgo de que la enfermedad llegue al sistema nervioso central. Aprenda a tratar la leucemia linfoide.
Si hay una recurrencia de la enfermedad, se puede optar por el trasplante de médula ósea porque, en este caso, no todos se benefician de la quimioterapia.
¿Puede curar la leucemia aguda?
La curación en la leucemia se refiere a la ausencia de signos y síntomas característicos de la leucemia en el período de 10 años después de finalizado el tratamiento, sin recaídas.
En relación con la leucemia mieloide aguda, una cura es posible, debido a varias opciones de tratamiento, sin embargo, a medida que avanza la edad, la cura o el control de la enfermedad puede ser más difícil; cuanto más joven sea la persona, mayores serán las posibilidades de curación.
En el caso de la leucemia linfoide aguda, la posibilidad de curación es mayor en niños, alrededor del 90%, y el 50% de curación en adultos hasta los 60 años, sin embargo, para aumentar las posibilidades de curación y prevenir la recurrencia de la enfermedad, Es importante que se descubra lo antes posible y que el tratamiento se inicie poco después.
Incluso después de iniciar el tratamiento, la persona debe realizar exámenes periódicos para comprobar si hay o no recurrencia y, si la hay, reanudar el tratamiento de inmediato para que las posibilidades de remisión completa de la enfermedad sean mayores.