¿Puede utilizar magnesio para tratar el reflujo ácido?
Contenido
- Reflujo ácido y magnesio
- ¿Cuáles son los beneficios del magnesio?
- Pros
- Que dice la investigación
- Riesgos y advertencias
- Contras
- Otros tratamientos para el reflujo ácido
- Que puedes hacer ahora
Reflujo ácido y magnesio
El reflujo ácido ocurre cuando el esfínter esofágico inferior no logra cerrar el esófago del estómago. Esto permite que el ácido del estómago regrese al esófago, provocando irritación y dolor.
Puede experimentar un sabor amargo en la boca, una sensación de ardor en el pecho o sentir que la comida vuelve a subir por la garganta.
Vivir con esta condición puede ser molesto. El reflujo poco frecuente se puede tratar con medicamentos de venta libre (OTC). Algunos de estos contienen magnesio combinado con otros ingredientes.
El magnesio combinado con iones de hidróxido o carbonato puede ayudar a neutralizar el ácido del estómago. Estos productos que contienen magnesio pueden brindarle un alivio a corto plazo de los síntomas del reflujo ácido.
¿Cuáles son los beneficios del magnesio?
Pros
- Una mayor ingesta de magnesio se asocia con una mayor densidad ósea.
- Puede reducir su riesgo de hipertensión.
- El magnesio también puede reducir su riesgo de diabetes.
El magnesio juega un papel importante en varias de las funciones de su cuerpo, incluida la formación de huesos. No solo ayuda a calcificar el hueso, sino que activa la vitamina D dentro del cuerpo. La vitamina D es un componente clave para la salud de los huesos.
El mineral también juega un papel en la salud del corazón. El consumo de magnesio se ha relacionado con un riesgo reducido de hipertensión y aterosclerosis.
La suplementación con magnesio también se ha relacionado con una mejor sensibilidad a la insulina en personas con diabetes tipo 2.
Cuando un antiácido de magnesio se complementa como una terapia combinada con medicamentos recetados para el reflujo ácido, también puede disminuir la deficiencia de magnesio.
Que dice la investigación
Hay muchas opciones de tratamiento de venta libre y recetadas disponibles para el reflujo ácido ocasional. Incluyen antiácidos, receptores H2 e inhibidores de la bomba de protones.
El magnesio es un ingrediente que se encuentra en muchos tratamientos para el reflujo ácido. Los antiácidos frecuentemente combinan hidróxido de magnesio o carbonato de magnesio con hidróxido de aluminio o carbonato de calcio. Estas mezclas pueden neutralizar el ácido y aliviar sus síntomas.
El magnesio también se puede encontrar en otros tratamientos, como los inhibidores de la bomba de protones. Los inhibidores de la bomba de protones reducen la cantidad de ácido que produce el estómago. Un estudio de 2014 concluyó que los inhibidores de la bomba de protones que contienen pantoprazol magnésico mejoraron la ERGE.
Otro le atribuyó a estos medicamentos la curación del esófago y la reducción de los síntomas. El pantoprazol magnésico fue eficaz y fácilmente tolerado por los participantes.
Riesgos y advertencias
Contras
- Algunas personas pueden experimentar efectos secundarios después de consumir magnesio.
- Los antiácidos no se recomiendan para niños o personas con enfermedad renal.
- Los inhibidores de la bomba de protones no se recomiendan para un uso prolongado.
Aunque los antiácidos de magnesio generalmente se toleran bien, algunas personas pueden experimentar efectos secundarios. Los antiácidos de magnesio pueden causar diarrea. Para combatir esto, el hidróxido de aluminio a menudo se incluye en los medicamentos antiácidos de venta libre. Los antiácidos de aluminio pueden causar estreñimiento.
Un inconveniente es que los antiácidos con aluminio pueden causar pérdida de calcio, lo que puede provocar osteoporosis. Los antiácidos solo deben usarse para aliviar el reflujo ácido ocasional.
El ácido del estómago es necesario para ayudar a absorber el magnesio en el estómago. El uso crónico de antiácidos, inhibidores de la bomba de protones y otros medicamentos que bloquean el ácido pueden disminuir el ácido del estómago en general y perpetuar la mala absorción de magnesio.
La suplementación excesiva de magnesio, o más de 350 miligramos (mg) por día, también puede provocar diarrea, náuseas y calambres estomacales.
Se observan más reacciones adversas en personas con función renal comprometida. Esto se debe a que los riñones no pueden excretar adecuadamente el exceso de magnesio.
Se han identificado reacciones mortales en dosis superiores a 5.000 mg por día.
Otros tratamientos para el reflujo ácido
Los medicamentos de venta libre y recetados no son los únicos tratamientos para el reflujo ácido. Hacer ajustes a su estilo de vida puede tener un gran impacto en sus síntomas.
Para reducir los síntomas, puede:
- Consuma comidas más pequeñas.
- Hacer ejercicio regularmente.
- Perder peso.
- Duerma con la cabecera de la cama elevada 6 pulgadas.
- Elimine los refrigerios nocturnos.
- Rastree los alimentos que causan síntomas y evite comerlos.
- Evite usar ropa ajustada.
Es posible que existan terapias alternativas que también puede intentar para reducir sus síntomas. Estos no están regulados por la Administración de Alimentos y Medicamentos y deben tomarse con precaución.
Que puedes hacer ahora
El reflujo ácido es una condición común. Los episodios poco frecuentes de reflujo se pueden tratar con medicamentos que contienen magnesio y otros ingredientes. Si desea aumentar su ingesta de magnesio, recuerde:
- Habla con tu médico sobre los suplementos de magnesio.
- Agregue alimentos ricos en magnesio a su dieta. Esto incluye granos integrales, nueces y semillas.
- Solo tome o consuma hasta 350 mg por día, a menos que se le indique lo contrario.
También puede hacer ajustes en su estilo de vida para disminuir sus síntomas de reflujo ácido. Estos pueden incluir hacer ejercicio, comer comidas más pequeñas y evitar ciertos alimentos.
Si sus síntomas persisten, hable con su médico. Ellos pueden evaluar su plan de tratamiento actual y determinar el mejor curso de acción para usted.
Su médico puede discutir formas para que usted reduzca los síntomas crónicos y puede sugerirle medicamentos o cirugía para reparar cualquier daño en su esófago.