Dormir demasiado: que puede ser y que hacer
Contenido
- 1. Cantidad y calidad de sueño insuficientes
- 2. Condiciones médicas
- 3. Uso de medicamentos
- 4. Consumo de sustancias que favorecen el sueño
- 5. Apnea del sueño
- Qué puede causar el sueño excesivo
- Como se hace el tratamiento
Sentirse muy somnoliento, especialmente durante el día, puede deberse a varios factores, siendo los más habituales dormir mal o mal por la noche o trabajar en turnos, que se pueden eludir con buenos hábitos de sueño.
Sin embargo, existen otras condiciones o factores que pueden ser la causa del sueño excesivo durante el día y que deben ser atendidos por el médico.
1. Cantidad y calidad de sueño insuficientes
Cuando duermes mal por la noche o en cantidades insuficientes, es muy común dormir durante el día. Se cree que, además del estrés y la ansiedad, las noches de insomnio también son consecuencia del uso de la televisión, la computadora y el aumento de la demanda de horas de trabajo, estudios y compromisos sociales.
Para sortear este problema, es importante adoptar rutinas y condiciones que permitan una mejor calidad y duración del sueño, para que al día siguiente la persona se sienta más activa. Aprenda a tener una buena higiene del sueño.
2. Condiciones médicas
Condiciones neurológicas como depresión, ansiedad, narcolepsia o enfermedades neurodegenerativas contribuyen a alterar la calidad y cantidad del sueño durante el día. Además, sufrir otras afecciones médicas, como traumatismo craneoencefálico, accidente cerebrovascular, cáncer, hipotiroidismo, enfermedades inflamatorias o anemia, también pueden provocarle más sueño y cansancio durante el día.
En estos casos, es importante abordar directamente la causa de la enfermedad.
3. Uso de medicamentos
El uso de determinados medicamentos, como antihistamínicos, relajantes musculares, anticonvulsivos, antidepresivos, litio, antiparkinsonianos o fármacos cardiovasculares, por ejemplo, puede provocar somnolencia, que es más notoria durante el día.
Si la somnolencia es excesiva, hable con el médico para reemplazar el medicamento, si es posible y está justificado.
4. Consumo de sustancias que favorecen el sueño
El consumo durante el día de alimentos y plantas medicinales que favorecen el sueño, como maracuyá, valeriana o toronjil, por ejemplo, puede dejar a la persona más relajada y somnolienta, y puede comprometer las actividades diarias.
En estos casos, se debe evitar ingerir estas sustancias durante el día.
5. Apnea del sueño
La apnea del sueño dificulta la respiración por la noche, lo que puede provocar despertares nocturnos recurrentes, una sensación de sueño no reparador, fatiga durante el día y dificultad para concentrarse.
El tratamiento se puede realizar con el uso de un dispositivo especial y cambios en el estilo de vida. Obtenga más información sobre el tratamiento.
Qué puede causar el sueño excesivo
Tan importante como saber qué puede causar el sueño es saber cuánto puede causar el sueño. Dormir mal o no dormir puede tener serias implicaciones para la salud y, por tanto, con el paso de los meses, la falta de sueño reparador puede provocar:
- Falta o dificultad para concentrarse;
- Bajo rendimiento escolar o laboral;
- Resistencia a la insulina;
- Estrés y ansiedad;
- Mayor riesgo de accidente cerebrovascular, ataque cardíaco y muerte súbita;
- Mayor riesgo de accidentes de tráfico;
- Hipertensión;
- Aterosclerosis;
- Obesidad.
Además, las personas que trabajan por turnos, a lo largo de los años, siguen teniendo un mayor riesgo de desarrollar algún tipo de cáncer en relación con las personas que trabajan de forma convencional.
Como se hace el tratamiento
El tratamiento del sueño excesivo depende de su causa. El médico podrá dar algunas indicaciones para que el individuo tenga una buena noche de sueño reparador y, para que esté más alerta durante el día. Además, también puede indicar el uso de fármacos estimulantes del sistema nervioso a base de cafeína, por ejemplo.
Algunos consejos que pueden ayudar al individuo a mantenerse en buen estado de alerta durante el día son tomar una ducha fría al despertar, consumir alimentos estimulantes como café, té negro y jengibre cada 3 horas y mantener la mente activa durante el día.