5 formas naturales de combatir la rinitis alérgica
Contenido
- 1. Tomando probióticos
- 2.Haz cambios dietéticos
- 3. Usa plantas medicinales
- Tomando té de ortiga
- Toma un suplemento Petasites hybridus
- Inhalar con tomillo o eucalipto
- 4. Toma omega 3
- 5. Evita la acumulación de ácaros
El tratamiento natural de la rinitis alérgica se puede realizar con el uso de plantas medicinales como el eucalipto y el tomillo para inhalaciones, infusión de ortiga o suplemento de Petasites hybridus.
Sin embargo, como este tipo de rinitis es provocada por una reacción alérgica, también es muy importante fortalecer el sistema inmunológico, lo cual se puede hacer con la ingesta de probióticos, para regular el intestino, pero también con cambios en la dieta.
Si bien este tipo de tratamiento no garantiza una cura para la rinitis, puede ayudar a aliviar en gran medida los síntomas y retrasar la aparición de nuevos ataques, siendo una excelente forma de completar el tratamiento recomendado por el médico.
1. Tomando probióticos
La rinitis alérgica surge debido a una respuesta exagerada del sistema inmunológico a diferentes estímulos del entorno, dando como resultado la inflamación de los tejidos de la nariz. Una excelente forma natural de regular esta respuesta es mediante la ingesta de probióticos para mejorar la flora intestinal.
Esto se debe a que, en el intestino, existen pequeños ganglios linfáticos capaces de regular la inflamación del cuerpo. Por tanto, cuando el intestino no tiene suficientes probióticos, se produce una inflamación excesiva del organismo, que acaba facilitando una respuesta exagerada, resultando en una mayor facilidad para desarrollar alergias, como es el caso de la rinitis alérgica.
Así, lo ideal es que las personas que padecen rinitis alérgica tomen un suplemento probiótico todos los días durante al menos 2 a 3 meses, para regular el intestino y mejorar la respuesta del sistema inmunológico, reduciendo los ataques de rinitis alérgica. Sin embargo, si sufre de estreñimiento, se recomienda limpiar primero sus intestinos antes de comenzar a usar probióticos. Obtenga más información sobre los probióticos y cómo tomarlos.
2.Haz cambios dietéticos
Al igual que los probióticos, los alimentos también ayudan a prevenir la inflamación del intestino y, en consecuencia, de todo el cuerpo. Para garantizar una buena salud intestinal, es muy importante incrementar la ingesta de productos naturales, como verduras, legumbres y quesos, por ejemplo, evitando así todos los productos industrializados.
Además, también debes evitar los alimentos con mucho azúcar, ya que el azúcar facilita el desarrollo de bacterias patógenas, además de contribuir a la inflamación del organismo. Una buena opción dietética para los casos de rinitis alérgica es seguir la dieta mediterránea, que se centra en el consumo de alimentos antiinflamatorios, como el aceite de oliva y el ajo, por ejemplo. Mira cómo hacer la dieta mediterránea.
3. Usa plantas medicinales
Muchas plantas ayudan a disminuir la respuesta exagerada del sistema inmunológico y a reducir la inflamación del organismo, siendo una gran opción casera para aliviar los síntomas de la rinitis alérgica. Estas plantas se pueden utilizar junto con el tratamiento indicado por el médico, para acelerar la recuperación y evitar crisis tan frecuentes. Algunos ejemplos son:
Tomando té de ortiga
La ortiga es una planta medicinal que bloquea los efectos de la histamina en el organismo, sustancia responsable de la respuesta inflamatoria en casos de alergia. Por lo tanto, tomar este té durante todo el día ayuda a aliviar los síntomas de la rinitis alérgica, especialmente la secreción nasal, el picor y la sensación de congestión nasal.
Ingredientes
- 2 cucharaditas de hojas de ortiga picadas;
- 200 ml de agua.
Modo de preparo
Hervir el agua y añadir las hojas de ortiga, dejar reposar 10 minutos, colar y beber de 3 a 4 tazas de té al día.
Otra opción es tomar las cápsulas de ortiga en una dosis de 300 a 350 mg, de 2 a 3 veces al día.
Toma un suplemento Petasites hybridus
Esta planta, al igual que la ortiga, también reduce los efectos de la histamina, reduciendo así la inflamación de las vías respiratorias. Además, también es capaz de disminuir la producción de moco y secreciones, aliviando en gran medida los síntomas de secreción nasal y congestión nasal, común en la rinitis alérgica.
Por lo general, esta planta se puede encontrar como suplemento en las tiendas naturistas y debe tomarse en una dosis de 50 a 100 mg, dos veces al día. Idealmente, la dosis de 50 a 100 mg de este suplemento debe contener al menos 7.5 mg de petasinas.
Inhalar con tomillo o eucalipto
El tomillo y el eucalipto son plantas con excelentes propiedades en las vías respiratorias, siendo capaces de reducir la inflamación y dejar escapar las secreciones, aliviando la secreción nasal y la congestión nasal de la rinitis alérgica.
Ingredientes
- 2 puñados de hojas de tomillo o eucalipto;
- 1 litro de agua hirviendo.
Modo de preparo
Colocar el agua en una palangana y mezclar el tomillo o las hojas de eucalipto, dejar reposar 5 minutos y luego cubrir la cabeza con un paño e inhalar el vapor, dejando correr la nariz.
4. Toma omega 3
El omega 3 es una grasa saludable con una poderosa acción antiinflamatoria que puede reducir la producción de diversas sustancias inflamatorias en el cuerpo, reduciendo así las posibilidades de que el sistema inmunológico reaccione de forma exagerada y produzca una alergia.
Para obtener los beneficios del omega 3, puedes consumir esta sustancia en forma de suplemento o incrementar tu ingesta de alimentos con esta grasa, como el salmón, el aguacate o las sardinas, por ejemplo. Vea una lista más completa de alimentos de origen omega 3.
5. Evita la acumulación de ácaros
Algunos consejos para prevenir la acumulación de ácaros del polvo, que son una de las principales causas de rinitis alérgica, incluyen:
- Salas limpias con frecuencia, dando preferencia al uso de aspiradoras con filtros especiales, ya que el uso de escoba y plumero puede esparcir el polvo.
- Use un paño húmedo limpieza de muebles y objetos que acumulan polvo.
- Retirar peluches, alfombras, cortinas, alfombras, almohadas y otros objetos que puedan acumular polvo en el ambiente en el que viven las personas con rinitis alérgica.
También debe evitarse el contacto con productos como perfumes, humo de cigarrillo, insecticidas y contaminación para que no provoquen irritación respiratoria.