Hidrosadenitis supurativa: que es, síntomas y tratamiento
Contenido
La hidrosadenitis supurativa es una enfermedad crónica de la piel que provoca la inflamación de las glándulas sudoríparas, que son las glándulas productoras de sudor, dando lugar a la aparición de pequeñas heridas inflamadas o bultos en la axila, ingle, ano y glúteos, por ejemplo, que son regiones de el cuerpo que normalmente está tapado y que produce mucho sudor.
Así, las personas que padecen esta enfermedad pueden pensar que tienen forúnculos, pero las características de estas enfermedades son diferentes, porque en la hidrosadenitis los nódulos dejan cicatrices en la piel, lo que no ocurre con los forúnculos. Aprenda a identificar y tratar los forúnculos.
Síntomas principales
Los primeros síntomas que pueden indicar hidrosadenitis son:
- Pequeñas regiones de la piel que están hinchadas, duras, dolorosas, inflamadas y enrojecidas;
- Puede haber picazón, ardor y sudoración excesiva;
- Con el tiempo, la piel puede tornarse azulada o violácea debido a la falta de sangre.
Los nódulos causados por la enfermedad pueden encogerse o estallar espontáneamente, liberando pus antes de que la piel sane. En algunas personas, después de unas semanas o meses, los nódulos vuelven a aparecer, generalmente en la misma zona afectada que antes. En los casos en los que aparecen varios nódulos o cuando son constantes y tardan mucho en cicatrizar, las heridas pueden agrandarse y formar abscesos o úlceras, siendo más difíciles de tratar, requiriendo cirugía.
El diagnóstico de hidrosadenitis supurativa se realiza a través de los síntomas que se presentan y las características de las heridas cutáneas y la historia del paciente, por lo que es ideal acudir a un médico de cabecera o un dermatólogo para identificar el problema de forma precoz e iniciar el tratamiento adecuado.
¿Qué regiones son las más afectadas?
Las regiones del cuerpo más afectadas por la hidrosadenitis supurativa son la ingle, el perineo, el ano, los glúteos y las axilas, pero esta enfermedad también puede aparecer en las areolas de los senos nasales y cerca del ombligo. Conoce otras causas de bultos en las axilas.
Esta enfermedad suele aparecer en mujeres jóvenes y puede ser causada por cambios genéticos, debilidad en el sistema inmunológico, hábitos de vida, como fumar, por ejemplo u obesidad. Una mala higiene, como quedarse 1 semana sin bañarse, por ejemplo, puede favorecer la aparición de la enfermedad, ya que es probable que las glándulas sudoríparas se bloqueen, provocando inflamación. Sin embargo, la hidrosadenitis supurativa por hábitos de higiene no es muy frecuente.
Como se hace el tratamiento
La hidrosadenitis supurativa no tiene cura definitiva, pero durante las primeras etapas de la enfermedad, el tratamiento es muy exitoso para controlar los síntomas y generalmente se realiza con:
- Antibióticos: generalmente se usan en forma de ungüento para pasar el área afectada;
- Corticosteroides: se pueden inyectar directamente en los nódulos para reducir la inflamación durante los períodos de crisis o se pueden utilizar en forma de píldoras para tratar de prevenir o retrasar las crisis;
- Inmunomoduladores: son remedios que reducen la respuesta inmunitaria y, por tanto, disminuyen las posibilidades de desarrollar nuevos nódulos inflamados.
Estos remedios deben ser guiados por un dermatólogo, y el tratamiento debe evaluarse constantemente, ya que algunos de estos medicamentos pueden incrementar el riesgo de infecciones o la aparición de cáncer. El médico también puede recetar antibióticos en forma de píldoras y medicamentos que controlan la producción de hormonas, especialmente en las mujeres.
En los casos más graves, puede ser necesario una cirugía para extirpar la región de la piel con las glándulas defectuosas y reemplazarla con injertos de piel sana, curando la enfermedad en esa región operada. Además, se deben tener algunos cuidados generales durante el tratamiento en todos los casos, como mantener una adecuada higiene del lugar, evitar llevar ropa ajustada y aplicar compresas húmedas sobre las heridas.