Otitis externa maligna
La otitis externa maligna es un trastorno que involucra infección y daño de los huesos del canal auditivo y en la base del cráneo.
La otitis externa maligna es causada por la propagación de una infección del oído externo (otitis externa), también llamada oído de nadador. No es común.
Los riesgos de esta afección incluyen:
- Quimioterapia
- Diabetes
- Sistema inmunológico debilitado
La otitis externa a menudo es causada por bacterias difíciles de tratar, como pseudomonas. La infección se propaga desde el piso del canal auditivo a los tejidos cercanos y a los huesos en la base del cráneo. La infección y la hinchazón pueden dañar o destruir los huesos. La infección puede afectar los nervios craneales, el cerebro u otras partes del cuerpo si continúa propagándose.
Los síntomas incluyen:
- Drenaje continuo del oído que es amarillo o verde y huele mal.
- Dolor de oído profundo dentro del oído. El dolor puede empeorar cuando mueve la cabeza.
- Pérdida de la audición.
- Prurito del oído o del canal auditivo.
- Fiebre.
- Dificultad al tragar.
- Debilidad en los músculos de la cara.
Su proveedor de atención médica examinará su oído en busca de signos de una infección del oído externo. La cabeza alrededor y detrás de la oreja puede estar sensible al tacto. Un examen del sistema nervioso (neurológico) puede mostrar que los nervios craneales están afectados.
Si hay algún drenaje, el proveedor puede enviar una muestra al laboratorio. El laboratorio cultivará la muestra para tratar de encontrar la causa de la infección.
Para buscar signos de una infección ósea junto al canal auditivo, se pueden realizar las siguientes pruebas:
- Tomografía computarizada de la cabeza
- Resonancia magnética de la cabeza
- Exploración con radionúclidos
El objetivo del tratamiento es curar la infección. El tratamiento suele durar varios meses, porque es difícil tratar la bacteria y alcanzar una infección en el tejido óseo.
Deberá tomar antibióticos durante un período prolongado. Los medicamentos pueden administrarse a través de una vena (por vía intravenosa) o por vía oral. Los antibióticos deben continuarse hasta que las exploraciones u otras pruebas muestren que la inflamación ha disminuido.
Es posible que sea necesario extraer tejido muerto o infectado del canal auditivo. En algunos casos, puede ser necesaria una cirugía para extraer tejido muerto o dañado del cráneo.
La otitis externa maligna responde con mayor frecuencia al tratamiento a largo plazo, especialmente si se trata a tiempo. Puede volver en el futuro. Los casos graves pueden ser mortales.
Las complicaciones pueden incluir:
- Daño a los nervios craneales, el cráneo o el cerebro
- Retorno de la infección, incluso después del tratamiento.
- Propagación de la infección al cerebro u otras partes del cuerpo.
Llame a su proveedor si:
- Desarrolla síntomas de otitis externa maligna.
- Los síntomas continúan a pesar del tratamiento.
- Desarrolla nuevos síntomas.
Vaya a la sala de emergencias o llame al número local de emergencias (como el 911) si tiene:
- Convulsiones
- Disminución de la conciencia
- Confusión severa
- Debilidad facial, pérdida de la voz o dificultad para tragar asociados con dolor de oído o supuración
Para prevenir una infección del oído externo:
- Seque bien la oreja después de que se moje.
- Evite nadar en agua contaminada.
- Proteja el canal auditivo con algodón o lana de cordero mientras aplica laca o tinte para el cabello (si es propenso a contraer infecciones externas del oído).
- Después de nadar, coloque 1 o 2 gotas de una mezcla de 50% de alcohol y 50% de vinagre en cada oído para ayudar a secar el oído y prevenir infecciones.
- Mantenga un buen control de la glucosa si tiene diabetes.
Trate la otitis externa aguda por completo. No interrumpa el tratamiento antes de lo recomendado por su proveedor. Seguir el plan de su proveedor y finalizar el tratamiento reducirá su riesgo de otitis externa maligna.
Osteomielitis del cráneo; Otitis externa - maligna; Osteomielitis de la base del cráneo; Otitis externa necrosante
- Anatomía del oído
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