Hábitos a la hora de dormir para bebés y niños

Los patrones de sueño a menudo se aprenden de niños. Cuando estos patrones se repiten, se convierten en hábitos. Ayudar a su hijo a aprender buenos hábitos a la hora de acostarse puede ayudar a que irse a la cama sea una rutina agradable para usted y su hijo.

SU NUEVO BEBÉ (MENOS DE 2 MESES) Y DORMIR

Al principio, su nuevo bebé está en un ciclo de alimentación y sueño-vigilia de 24 horas. Los recién nacidos pueden dormir entre 10 y 18 horas al día. Permanecen despiertos solo de 1 a 3 horas a la vez.

Las señales de que su bebé está somnoliento incluyen:

• Llanto
• Frotarse los ojos
• Agitación

Intente acostar a su bebé con sueño, pero aún no dormido.

Para animar a su recién nacido a dormir más por la noche que durante el día:

• Exponga a su recién nacido a la luz y al ruido durante el día.
• A medida que se acerca la noche o la hora de dormir, atenúe las luces, mantenga las cosas en silencio y reduzca la cantidad de actividad alrededor de su bebé
• Cuando su bebé se despierte por la noche para comer, mantenga la habitación oscura y silenciosa.

Dormir con un bebé menor de 12 meses puede aumentar el riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL).

SU BEBÉ (3 A 12 MESES) Y DORMIR

A los 4 meses, su hijo puede dormir hasta 6 a 8 horas seguidas. Entre los 6 y los 9 meses, la mayoría de los niños duermen de 10 a 12 horas. Durante el primer año de vida, es común que los bebés tomen de 1 a 4 siestas al día, cada una con una duración de 30 minutos a 2 horas.

Cuando acueste a un bebé, haga que la rutina de la hora de acostarse sea constante y agradable.

• Dé la última comida nocturna poco antes de acostar al bebé. Nunca acueste al bebé con un biberón, ya que puede causar caries de biberón.
• Pase tiempo tranquilo con su hijo meciéndolo, caminando o simplemente abrazándolo.
• Acueste al niño en la cama antes de que se duerma profundamente. Esto le enseñará a su hijo a dormirse solo.

Es posible que su bebé llore cuando lo acueste en su cama, porque teme estar lejos de usted. A esto se le llama ansiedad por separación. Simplemente entre, hable con voz tranquila y frote la espalda o la cabeza del bebé. NO saque al bebé de la cama. Una vez que se haya calmado, salga de la habitación. Su hijo pronto aprenderá que simplemente está en otra habitación.

Si su bebé se despierta por la noche para alimentarse, NO encienda las luces.

• Mantenga la habitación oscura y silenciosa. Use luces nocturnas, si es necesario.
• Mantenga la alimentación lo más breve y discreta posible. NO entretenga al bebé.
• Cuando el bebé haya sido alimentado, eructado y calmado, regrese a su bebé a la cama. Si mantiene esta rutina, su bebé se acostumbrará y se dormirá solo.

A los 9 meses, si no antes, la mayoría de los bebés pueden dormir durante al menos 8 a 10 horas sin necesidad de alimentarse durante la noche. Los bebés aún se despertarán durante la noche. Sin embargo, con el tiempo, su bebé aprenderá a calmarse y volver a dormirse.

Dormir con un bebé menor de 12 meses puede aumentar el riesgo de SMSL.

SU NIÑO PEQUEÑO (1 A 3 AÑOS) Y DORMIR:

Un niño pequeño suele dormir de 12 a 14 horas al día. Alrededor de los 18 meses, los niños solo necesitan una siesta al día. La siesta no debe estar cerca de la hora de acostarse.

Haga que la rutina de la hora de acostarse sea agradable y predecible.

• Mantenga actividades como tomar un baño, cepillarse los dientes, leer cuentos, rezar, etc., en el mismo orden todas las noches.
• Elija actividades calmantes, como bañarse, leer o dar un masaje suave.
• Mantenga la rutina durante un tiempo determinado cada noche. Déle una advertencia a su hijo cuando sea casi la hora de apagar las luces y dormir.
• Un animal de peluche o una manta especial pueden darle al niño algo de seguridad después de que se apagan las luces.
• Antes de apagar la luz, pregúntele al niño si necesita algo más. Satisfacer una simple solicitud está bien. Una vez que se ha cerrado la puerta, es mejor ignorar otras solicitudes.

Algunos otros consejos son:

• Establezca una regla de que el niño no puede salir del dormitorio.
• Si su hijo comienza a gritar, cierre la puerta de su dormitorio y diga: "Lo siento, pero tengo que cerrar la puerta. La abriré cuando esté tranquilo".
• Si su hijo sale de su habitación, evite sermonearlo. Con un buen contacto visual, dígale al niño que volverá a abrir la puerta cuando el niño esté en la cama. Si el niño dice que está en la cama, abra la puerta.
• Si su hijo trata de meterse en su cama por la noche, a menos que tenga miedo, devuélvalo a su cama tan pronto como descubra su presencia. Evite sermones o conversaciones dulces. Si su hijo simplemente no puede dormir, dígale que puede leer o mirar libros en su habitación, pero que no debe molestar a otras personas de la familia.

Felicite a su hijo por aprender a calmarse y a dormirse solo.

Recuerde que los hábitos a la hora de acostarse pueden verse alterados por cambios o tensiones, como mudarse a una nueva casa o tener un nuevo hermano o hermana. Puede llevar tiempo restablecer las prácticas previas a la hora de acostarse.

Bebés: hábitos a la hora de acostarse; Niños: hábitos a la hora de dormir; Sueño: hábitos a la hora de acostarse; Cuidado infantil sano: hábitos a la hora de acostarse

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