Artrosis en manos y dedos: síntomas, causas y tratamiento.

Contenido

• Síntomas principales
• Posibles Causas
• Como se hace el tratamiento
• 1. Uso de medicamentos
• 2. Fisioterapia
• 3. Infiltración en las articulaciones
• 4. Cirugía

La artrosis en las manos y los dedos, también llamada osteoartritis u osteoartritis, se produce debido al desgaste del cartílago de las articulaciones, aumentando la fricción entre los huesos de las manos y los dedos, lo que conduce a síntomas de dolor y rigidez, dificultando la realizar movimientos sencillos y actividades del día a día. En casos más avanzados, se pueden formar nódulos en el medio de las articulaciones.

Además, la artrosis de las manos y los dedos puede provocar cambios en los huesos y tejidos alrededor de la articulación que mantienen unida la articulación y mantienen el músculo al hueso, lo que provoca inflamación y dolor.

Esta patología puede ser bastante limitante, sobre todo cuando afecta a ambas manos, por lo que ante cualquier síntoma se debe consultar a un ortopedista o reumatólogo para el diagnóstico y tratamiento más adecuado.

Síntomas principales

Los síntomas de la artrosis en las manos y los dedos generalmente se desarrollan lentamente y empeoran con el tiempo e incluyen:

• Dolor en la mano o los dedos, que puede ser más intenso al despertar y disminuye a lo largo del día, sin embargo con la progresión de la enfermedad, el dolor puede ocurrir todo el día;
• Rigidez en las articulaciones de las manos y los dedos., más notorio al despertar o después de pasar demasiado tiempo sin mover las manos o los dedos;
• Aumento de la sensibilidad de las articulaciones de las manos y los dedos, que pueden volverse sensibles cuando se aplica una ligera presión sobre o cerca de la articulación;
• Pérdida de flexibilidad, lo que dificulta la realización de movimientos sencillos, como coger un objeto o escribir, por ejemplo;
• Hinchazón en los dedos causado por inflamación alrededor de la articulación;
• Hormigueo en las manos o los dedos, incluso en reposo.

Además, se puede verificar la formación de nódulos en las articulaciones, como el nódulo de Heberden, que se forma en la articulación final de los dedos, y el nódulo de Bouchard, que se forma en la articulación media de los dedos.

El diagnóstico de artrosis de manos debe ser realizado por un ortopedista o reumatólogo en base a un examen clínico en el que se evalúen los síntomas que presenta la persona, y una valoración de los antecedentes de salud personal y familiar.

El médico suele recomendar la realización de exámenes complementarios como radiografías, en las que se comprueban cambios óseos, tomografía computarizada y resonancia magnética, para comprobar el grado de desengrasado de la articulación y, así, confirmar el diagnóstico e indicar el mejor tratamiento.

Posibles Causas

La artrosis en manos y dedos se produce principalmente por esfuerzos repetitivos, siendo más común en personas que usan mucho sus articulaciones, como trabajadores de la construcción, costureras, personas que hacen tareas del hogar o deportistas que practican deportes que requieren esfuerzo de las manos.

Esta condición es más frecuente en personas que tienen parientes en la familia con artrosis, ancianos y mujeres menopáusicas, debido al envejecimiento natural del cartílago.

Además, las enfermedades inflamatorias o autoinmunes, como el lupus eritematoso sistémico y la artritis reumatoide, además de enfermedades metabólicas como la hemocromatosis, pueden favorecer la rigidez de las articulaciones de la mano, dando lugar a la osteoartritis. Conoce otras causas de artrosis.

Como se hace el tratamiento

El tratamiento de la osteoartritis en manos y dedos se realiza de acuerdo con los síntomas presentados y tiene como objetivo aliviar el dolor, mejorar la rigidez y ayudar a mejorar el movimiento.

El tratamiento debe ser indicado por el médico y se puede realizar con:

1. Uso de medicamentos

Los medicamentos para tratar la artrosis en las manos y los dedos incluyen analgésicos como el paracetamol o antiinflamatorios como el ibuprofeno o el naproxeno, ya que ayudan a controlar el dolor y la inflamación de las articulaciones.

Otro medicamento que puede ser indicado por el médico es la duloxetina, un antidepresivo, que también está indicado para el tratamiento del dolor crónico causado por la artrosis de manos y dedos. Vea más opciones de medicamentos para la osteoartritis.

2. Fisioterapia

La fisioterapia para la osteoartritis de manos y dedos ayuda a fortalecer los músculos alrededor de la articulación, aumenta la flexibilidad y reduce el dolor. Este tratamiento debe ser guiado por un fisioterapeuta que le indicará los ejercicios más adecuados según el estadio de la artrosis e individualmente. El fisioterapeuta también puede pasar ejercicios para realizar en casa para complementar el tratamiento de fisioterapia, además de recomendar aplicar hielo o calor en la zona para aliviar los síntomas de la artrosis.

Vea el video con la fisioterapeuta Marcelle Pinheiro con ejercicios de fisioterapia para la osteoartritis:

3. Infiltración en las articulaciones

La infiltración en las articulaciones de las manos o dedos se puede hacer con inyección de corticoides o ácido hialurónico, en casos seleccionados, y siempre debe ser indicada y realizada por el médico que monitoriza a la persona.

Las inyecciones de corticosteroides en las articulaciones ayudan a aliviar el dolor y se pueden realizar de 3 a 4 inyecciones por año. Para inyectar el corticoide, el médico anestesia alrededor de las articulaciones de la mano o los dedos y luego inyecta el corticoide.

La inyección de ácido hialurónico, que es una sustancia similar a un componente que se encuentra normalmente en las articulaciones que actúa como amortiguador, ayuda a lubricar las articulaciones dolorosas de las manos o dedos y, por tanto, ayuda a aliviar el dolor.

4. Cirugía

La cirugía para la artrosis en las manos o los dedos está indicada solo para un pequeño número de casos en los que los tratamientos no fueron efectivos o cuando una de las articulaciones está severamente dañada. Sin embargo, no es posible garantizar que la cirugía elimine por completo los síntomas y la persona puede seguir experimentando dolor y rigidez en las manos o los dedos.