Bocio endémico: que es, causa, síntomas y tratamiento
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El bocio endémico es un cambio que se produce debido a la deficiencia de los niveles de yodo en el organismo, que interfiere directamente en la síntesis de hormonas por parte del tiroides y conduce al desarrollo de signos y síntomas, siendo el principal el aumento del volumen del tiroides que se percibe a través de hinchazón en el cuello.
El bocio endémico es una situación poco común, sin embargo es importante que se investigue y se realice el tratamiento de acuerdo con la recomendación médica, estando indicada principalmente la suplementación con yodo y los cambios en la alimentación para normalizar la actividad tiroidea.
Síntomas principales
El principal signo y síntoma del bocio endémico es un aumento en el volumen de la tiroides, que se percibe a través de la hinchazón del cuello. Como resultado de este aumento, la persona puede experimentar dificultad para respirar y tragar, y también puede tener tos.
Además, según los niveles de TSH, T3 y T4 circulantes en la sangre, la persona puede presentar signos y síntomas de hipotiroidismo, como cansancio excesivo, aumento o pérdida de peso, dolores musculares o articulares, por ejemplo. Sepa cómo identificar los síntomas del bocio.
¿Qué causa el bocio endémico?
El bocio endémico ocurre debido a la deficiencia de yodo en el cuerpo, lo que resulta en cambios en la glándula tiroides. Esto se debe a que el yodo es un elemento esencial para la síntesis y liberación de hormonas tiroideas, T3 y T4.
Por lo tanto, como no hay suficiente yodo en el cuerpo para producir las hormonas, la tiroides comienza a trabajar más con el fin de capturar cantidades suficientes de yodo para producir las hormonas, lo que resulta en su aumento, que es característico del bocio.
Como se hace el tratamiento
El tratamiento del bocio endémico consiste en aliviar los signos y síntomas de la enfermedad y normalizar la síntesis de hormonas por parte de la tiroides. Así, según los niveles circulantes de T3 y T4, el médico puede indicar la suplementación de yodo con una concentración 10 veces superior a la dosis diaria recomendada hasta que la función tiroidea se considere normal.
Además, se puede recomendar la suplementación de sal con yodo y el consumo de alimentos ricos en este elemento, como pescado, huevos, leche y quesos, por ejemplo. Consulte una lista de alimentos ricos en yodo.
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