Neuropatía femoral
Contenido
- ¿Qué causa la neuropatía femoral?
- Signos de neuropatía femoral
- ¿Qué tan grave es?
- Diagnóstico de la neuropatía femoral
- Pruebas iniciales
- Conducción nerviosa
- Electromiografía (EMG)
- Resonancias magnéticas y tomografías computarizadas
- Opciones de tratamiento
- Medicamentos
- Terapia
- Cirugía
- Perspectiva a largo plazo después del tratamiento
- Consejos para prevenir el daño a los nervios
¿Qué es la neuropatía femoral?
La neuropatía femoral, o disfunción del nervio femoral, ocurre cuando no puede mover o sentir parte de la pierna debido a nervios dañados, específicamente el nervio femoral. Esto puede resultar de una lesión, presión prolongada sobre el nervio o daño causado por una enfermedad. En la mayoría de los casos, esta afección desaparecerá sin tratamiento. Sin embargo, es posible que se necesiten medicamentos y fisioterapia si los síntomas no mejoran.
¿Qué causa la neuropatía femoral?
El nervio femoral es uno de los nervios más grandes de su pierna. Está ubicado cerca de la ingle y controla los músculos que ayudan a estirar la pierna y mover las caderas. También proporciona sensación en la parte inferior de la pierna y en la parte delantera del muslo. Debido a su ubicación, el daño al nervio femoral es poco común en relación con las neuropatías causadas por daño a otros nervios. Cuando el nervio femoral está dañado, afecta su capacidad para caminar y puede causar problemas de sensibilidad en la pierna y el pie. Vea el nervio femoral en este BodyMap del fémur.
El daño al nervio femoral puede ser el resultado de:
- una herida directa
- un tumor u otro crecimiento que bloquea o atrapa parte de su nervio
- presión prolongada sobre el nervio, como por inmovilización prolongada
- una fractura pélvica
- radiación a la pelvis
- hemorragia o sangrado en el espacio detrás del abdomen, que se llama espacio retroperitoneal
- un catéter colocado en la arteria femoral, que es necesario para ciertos procedimientos quirúrgicos
La diabetes puede causar neuropatía femoral. La diabetes puede causar un daño nervioso generalizado debido a las fluctuaciones en el azúcar en sangre y la presión arterial. El daño a los nervios que afecta las piernas, los pies, los dedos de los pies, las manos y los brazos se conoce como neuropatía periférica. Actualmente existe cierto debate sobre si la neuropatía femoral es realmente una neuropatía periférica o una forma de amiotrofia diabética.
Según el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales (NIDDK), la diabetes es la causa más común de neuropatía periférica en personas que han tenido diabetes durante al menos 25 años.
Signos de neuropatía femoral
Esta afección nerviosa puede ocasionar dificultades para moverse. Su pierna o rodilla puede sentirse débil y es posible que no pueda ejercer presión sobre la pierna afectada.
También puede sentir sensaciones inusuales en las piernas. Incluyen:
- entumecimiento en cualquier parte de la pierna (típicamente en la parte delantera e interna del muslo, pero potencialmente hasta los pies)
- hormigueo en cualquier parte de la pierna
- dolor sordo en la región genital
- debilidad de los músculos de las extremidades inferiores
- dificultad para extender la rodilla debido a la debilidad del cuádriceps
- sentir que su pierna o rodilla se le va a doblar
¿Qué tan grave es?
La presión prolongada sobre el nervio femoral puede evitar que la sangre fluya en el área afectada. La disminución del flujo sanguíneo puede resultar en daño tisular.
Si el daño de su nervio es el resultado de una lesión, es posible que su vena o arteria femoral también esté dañada. Esto podría causar una hemorragia interna peligrosa. La arteria femoral es una arteria muy grande que se encuentra cerca del nervio femoral. El trauma a menudo daña a ambos al mismo tiempo. La lesión de la arteria o el sangrado de la arteria pueden causar compresión en el nervio.
Además, el nervio femoral proporciona sensación a la mayor parte de la pierna. Esta pérdida de sensación puede provocar lesiones. Tener los músculos de las piernas débiles puede hacerlo más propenso a caerse. Las caídas son motivo de especial preocupación en los adultos mayores porque pueden provocar fracturas de cadera, que son lesiones muy graves.
Diagnóstico de la neuropatía femoral
Pruebas iniciales
Para diagnosticar la neuropatía femoral y su causa, su médico realizará un examen físico completo y hará preguntas sobre lesiones o cirugías recientes, así como preguntas sobre su historial médico.
Para buscar debilidad, probarán músculos específicos que reciben sensación del nervio femoral. Su médico probablemente revisará los reflejos de su rodilla y le preguntará acerca de los cambios en la sensibilidad en la parte frontal del muslo y la parte media de la pierna. El objetivo de la evaluación es determinar si la debilidad afecta solo al nervio femoral o si también contribuyen otros nervios.
Las pruebas adicionales pueden incluir:
Conducción nerviosa
La conducción nerviosa verifica la velocidad de los impulsos eléctricos en sus nervios. Una respuesta anormal, como un tiempo lento para que las señales eléctricas viajen a través de sus nervios, generalmente indica daño al nervio en cuestión.
Electromiografía (EMG)
Se debe realizar una electromiografía (EMG) después de la prueba de conducción nerviosa para ver qué tan bien están funcionando sus músculos y nervios. Esta prueba registra la actividad eléctrica presente en sus músculos cuando los nervios que los conducen están activos. El EMG determinará si el músculo responde adecuadamente a la estimulación. Ciertas afecciones médicas hacen que los músculos se activen por sí mismos, lo cual es una anomalía que puede revelar una EMG. Debido a que los nervios estimulan y controlan sus músculos, la prueba puede identificar problemas tanto en los músculos como en los nervios.
Resonancias magnéticas y tomografías computarizadas
Una resonancia magnética puede buscar tumores, crecimientos o cualquier otra masa en el área del nervio femoral que pueda causar compresión en el nervio. Las resonancias magnéticas usan ondas de radio e imanes para producir una imagen detallada de la parte de su cuerpo que se está escaneando.
Una tomografía computarizada también puede buscar crecimientos vasculares o óseos.
Opciones de tratamiento
El primer paso para tratar la neuropatía femoral es abordar la afección o causa subyacente. Si la causa es la compresión del nervio, el objetivo será aliviar la compresión. Ocasionalmente, en lesiones leves, como una compresión leve o una lesión por estiramiento, el problema puede resolverse espontáneamente. Para las personas con diabetes, la normalización de los niveles de azúcar en sangre puede aliviar la disfunción nerviosa. Si su nervio no mejora por sí solo, necesitará tratamiento. Esto generalmente implica medicamentos y fisioterapia.
Medicamentos
Es posible que le apliquen inyecciones de corticosteroides en la pierna para reducir la inflamación y eliminar cualquier hinchazón que se produzca. Los analgésicos pueden ayudar a aliviar cualquier dolor y malestar. Para el dolor neuropático, su médico puede recetarle medicamentos, como gabapentina, pregabalina o amitriptilina.
Terapia
La fisioterapia puede ayudar a fortalecer nuevamente los músculos de las piernas. Un fisioterapeuta le enseñará ejercicios para fortalecer y estirar los músculos. Someterse a fisioterapia ayuda a reducir el dolor y promover la movilidad.
Es posible que deba usar un dispositivo ortopédico, como un aparato ortopédico, para ayudarlo a caminar. Por lo general, una rodillera es útil para prevenir el pandeo de la rodilla.
Dependiendo de la gravedad del daño a los nervios y de la cantidad de problemas que tenga para moverse, es posible que también necesite terapia ocupacional. Este tipo de terapia le ayuda a aprender a realizar tareas habituales, como bañarse y otras actividades de cuidado personal. Estas se denominan "actividades de la vida diaria". Su médico también podría recomendarle asesoramiento vocacional si su condición lo obliga a buscar otra línea de trabajo.
Cirugía
Su médico podría recomendarle una cirugía si tiene un tumor que bloquea el nervio femoral. Quitar el crecimiento aliviará la presión sobre su nervio.
Perspectiva a largo plazo después del tratamiento
Es posible que pueda curarse por completo después de tratar la afección subyacente. Si el tratamiento no tiene éxito o si el daño del nervio femoral es severo, es posible que pierda permanentemente la sensibilidad en esa parte de la pierna o la capacidad de moverla.
Consejos para prevenir el daño a los nervios
Puede reducir el riesgo de neuropatía femoral causada por la diabetes si mantiene bajo control sus niveles de azúcar en sangre. Esto ayuda a proteger sus nervios del daño causado por esta enfermedad. Las medidas preventivas estarían dirigidas a cada causa. Hable con su médico para que le aconseje qué medidas preventivas serían las mejores para usted.
Mantener un estilo de vida activo ayuda a mantener fuertes los músculos de las piernas y mejorar la estabilidad.