Ultrasonido en fisioterapia: para que sirve y como usarlo correctamente
Contenido
- Para que sirve
- Cómo utilizar la ecografía
- Cómo funciona el ultrasonido
- Contraindicaciones de la ecografía en fisioterapia.
El tratamiento de fisioterapia con ultrasonido se puede realizar para tratar la inflamación de las articulaciones y el dolor lumbar, por ejemplo, ya que es capaz de estimular la cascada inflamatoria y disminuir el dolor, la hinchazón y los espasmos musculares.
La fisioterapia por ultrasonidos se puede utilizar de dos formas:
- Ultrasonido continuo, donde las ondas se emiten sin interrupción y que produce efectos térmicos, alterando el metabolismo y la permeabilidad de las células, ayudando en la cicatrización de heridas y reduciendo la hinchazón, siendo también más eficaz en el tratamiento de lesiones crónicas;
- Ultrasonido pulsado, las ondas se emiten ondas con pequeñas interrupciones, lo que no produce efectos térmicos, pero también es capaz de estimular la cicatrización y reducir los signos inflamatorios, siendo más indicado en el tratamiento de lesiones agudas.
La fisioterapia por ultrasonidos es un tratamiento muy eficaz e indoloro. El número de sesiones de fisioterapia varía según el tipo y grado de lesión, por lo que siempre debe ser evaluado por el fisioterapeuta antes de iniciar el procedimiento. Sin embargo, no se recomienda utilizar la ecografía a diario durante más de 20 días.
Para que sirve
La fisioterapia por ultrasonidos se realiza con el objetivo de incrementar el flujo sanguíneo local y así favorecer la cascada inflamatoria, reduciendo la hinchazón y estimulando las células inflamatorias, favoreciendo así la cicatrización, remodelación tisular y disminuyendo edemas, dolores y espasmos musculares.
Este tratamiento está indicado para el tratamiento de:
- Artrosis;
- Inflamación de las articulaciones;
- Dolor de espalda;
- Bursitis;
- Enfermedad o dolor agudo o crónico;
- Espasmos musculares;
- Espasmo muscular.
Además, en estética, el ultrasonido de 3 Mhz se puede utilizar para combatir la celulitis, por ejemplo.
Cómo utilizar la ecografía
El ultrasonido debe usarse de la manera correcta, colocando una capa de gel conductor directamente sobre la zona afectada y luego uniendo la cabeza del equipo, realizando movimientos lentos, circularmente, en forma de 8, de arriba a abajo, o de lado. al lado del otro, pero nunca puede permanecer quieto en el mismo lugar.
El equipo se puede ajustar según la necesidad y se puede ajustar de la siguiente manera:
Frecuencia de onda:
- 1Mhz: lesiones profundas, como músculos, tendones
- 3 MHz: tiene una menor capacidad de penetración de ondas, estando indicado para tratar trastornos cutáneos.
Intensidad:
- 0,5 a 1,6 W / cm2: la intensidad más baja trata las estructuras más cercanas a la piel, mientras que la intensidad más alta trata las regiones más profundas, como el daño óseo
Tipo de emisión:
- Continuo: para lesiones crónicas, donde está indicado el calor
- Pulsátil: para lesiones agudas, donde el calor está contraindicado.
Ciclo de trabajo:
- 1: 2 (50%): fase subaguda
- 1: 5 (20%): fase aguda, reparación de tejidos
El ultrasonido también se puede utilizar en la modalidad subacuática, manteniendo la cabeza dentro de una palangana con agua, siendo ideal para estructuras como las manos, muñeca o dedos, donde sería muy difícil acoplar toda la era del equipo. En este caso, no es necesario poner gel sobre la piel, pero la estructura a tratar y el cabezal del equipo deben permanecer sumergidos en agua, en cuyo caso el equipo no necesariamente debe estar siempre en contacto directo con la piel. y puede haber una pequeña distancia.
Cómo funciona el ultrasonido
El tratamiento con ultrasonido promueve la liberación de calor a los tejidos, como tendones, músculos y articulaciones, reduciendo los síntomas de inflamación y promoviendo la regeneración de los tejidos. Este tratamiento no es doloroso, no tiene efectos secundarios y se realiza mediante un transductor capaz de generar corrientes eléctricas de frecuencias alternas y capaz de penetrar en el tejido y estimular el flujo sanguíneo en la región.
Las ondas sonoras liberadas a través del transductor penetran en el tejido según el tipo de medio que se utilice, es decir, gel o loción, calidad del transductor, superficie de tratamiento y tipo de lesión a tratar. Normalmente, los huesos y la región donde se insertan los tendones tienen una baja capacidad de absorción y se recomienda realizar otro tipo de tratamiento o utilizar una frecuencia más baja de la ecografía.
La capacidad de las ondas para penetrar en el tejido es inversamente proporcional a la frecuencia aplicada, pudiendo variar entre 0,5 y 5 MHz, siendo la frecuencia utilizada normalmente entre 1 y 3 MHz.
Contraindicaciones de la ecografía en fisioterapia.
Este tipo de tratamiento, sin embargo, no debe utilizarse en algunas situaciones, como en el caso de osteoporosis avanzada, presencia de prótesis, embarazo, cáncer activo y áreas tratadas con radioterapia o que presenten varices, y otra opción de fisioterapia debe ser elegido.