Dieta para la intolerancia a la fructosa

Contenido
- Comidas que se deben evitar
- Menú de ejemplo para intolerancia a la fructosa
- Síntomas principales
- Cómo confirmar el diagnóstico
La intolerancia a la fructosa es la dificultad de absorber alimentos que tengan este tipo de azúcar en su composición, lo que puede llevar a la aparición de algunos síntomas como náuseas, vómitos, sudoración excesiva, diarrea e hinchazón y, para mejorar los síntomas, es necesario Es importante eliminar los alimentos que contienen este azúcar.
La fructosa se encuentra principalmente en frutas, sin embargo en verduras, cereales, miel y algunos productos industrializados en forma de jarabe de maíz o edulcorante como sacarosa o sorbitol, sustancias que se encuentran presentes en alimentos como refrescos, jugos de caja, salsa de tomate y comidas rápidas. .
La malabsorción de fructosa puede ser hereditaria y, por tanto, los síntomas suelen aparecer en los primeros 6 meses de vida, sin embargo, la intolerancia se puede adquirir a lo largo de la vida debido a cambios intestinales que pueden ocasionar dificultad en la digestión de este compuesto, como es el caso del síndrome del intestino irritable.
Lácteos | Leche, mantequilla, queso y yogur natural. |
Edulcorantes | Glucosa o Stevia. |
Frutos secos y semillas | Frutos secos, cacahuetes, castañas, avellanas, chía, sésamo, linaza y sésamo. |
Especias | Sal, vinagre, hierbas y especias. |
Sopas | Elaborado con alimentos y especias permitidos. |
Cereales | Avena, cebada, centeno, arroz, arroz integral y productos elaborados con ellos, como pan, galletas saladas y cereales, siempre que no contengan fructosa, sacarosa, sorbitol, miel, melaza o jarabe de maíz. |
Proteína animal | Carnes blancas, carnes rojas, pescados y huevos. |
Bebidas | Agua, té, café y cacao. |
Caramelo | Postres dulces y pastas que no estén endulzadas con fructosa, sacarosa, sorbitol o jarabe de maíz. |
Una dieta FODMAP podría ser de gran ayuda para resolver el problema de la malabsorción de fructosa. Esta dieta tiene el principio de eliminar de la dieta los alimentos que se absorben poco en el intestino delgado y que son fermentados por bacterias pertenecientes a la microbiota intestinal, como fructosa, lactosa, galacto-oligosacáridos y alcoholes de azúcar.
Esta dieta debe llevarse a cabo durante un período de 6 a 8 semanas, y la persona debe estar consciente de cualquier mejoría de los síntomas gastrointestinales. En el caso de que los síntomas mejoren después de las 8 semanas, se debe reintroducir los alimentos de forma paulatina, comenzando un grupo de alimentos a la vez, ya que también es posible identificar qué causa el malestar abdominal, y se debe evitar su consumo o consumir en pequeñas cantidades. Obtenga más información sobre la dieta FODMAP.
Comidas que se deben evitar
Hay alimentos que contienen altas cantidades de fructosa y otras cantidades bajas, y deben ser excluidos de la vida diaria o consumidos según el grado de tolerancia de la persona, siendo ellos:
Categoría | Baja fructosa | Alto contenido de fructosa |
Fruta | Aguacate, limón, piña, fresa, mandarina, naranja, plátano, mora y melón | Todas las frutas que no se han mencionado anteriormente. Se debe prestar especial atención a los jugos, frutos secos como ciruelas, pasas o dátiles y frutas enlatadas, jarabes y mermeladas. |
Verduras | Zanahorias, apio, espinacas, ruibarbo, remolacha, patatas, hojas de nabo, calabaza, coles de Bruselas, coliflor, lechuga, repollo, tomates, rábanos, cebolletas, pimientos verdes, zanahorias blancas | Alcachofas, espárragos, brócoli, pimientos, setas, puerros, quimbombó, cebollas, guisantes, pimientos rojos, salsa de tomate y productos que contengan tomates. |
Cereales | Harina de trigo sarraceno, nachos, tortillas de maíz, pan sin gluten libre, galleta, palomitas y quinua | Alimentos con trigo como ingrediente principal (pan trifo, pasta y cuscús), cereales con frutos secos y cereales que contienen jarabe de maíz con alto contenido de fructosa |
También deben evitarse productos como yogures de frutas, helados, refrescos, jugos en caja, barras de cereales, ketchup, mayonesa, salsas industriales, miel artificial, productos dietéticos y ligeros, chocolates, pasteles, pudines, comidas rápidas, caramelo, azúcar blanco. ., miel, melaza, jarabe de maíz, fructosa, sacarosa y sorbitol, además de embutidos y embutidos procesados, como salchichas y jamón, por ejemplo.
Algunos alimentos como los guisantes, lentejas, frijoles, garbanzos, frijoles blancos, maíz y soja pueden producir gases y, por tanto, su consumo depende de la tolerancia de la persona. Aunque puede ser una tarea difícil, las personas con este tipo de intolerancia deben evitar el consumo de fructosa, ya que si no se controla el consumo pueden surgir complicaciones graves, como insuficiencia renal o hepática.
Menú de ejemplo para intolerancia a la fructosa
Un ejemplo de menú saludable para personas con intolerancia a la fructosa puede ser:
Bocadillo | Día 1 | Dia 2 | Día 3 |
Desayuno | 200 ml de leche + 2 huevos revueltos con queso + 1 rebanada de pan | 1 yogur natural + 2 cucharaditas de chía + 6 nueces | 200 ml de leche de cacao + 2 rebanadas de pan integral con queso blanco |
Bocado matutino | 10 anacardos | 4 tostadas enteras con cuajada | 1 pastel de avena casero endulzado con stevia |
Almuerzo | 90 gramos de pechuga de pollo a la plancha + 1 taza de arroz integral + ensalada de lechuga con zanahoria rallada + 1 cucharadita de aceite de oliva | 90 gramos de filete de pescado + 1 taza de puré de patatas + espinacas con aceite de oliva | 90 gramos de pechuga de pavo + 2 patatas cocidas + acelgas con aceite de oliva y 5 nueces |
Refrigerio de la tarde | 1 yogur natural | Infusión de hierbas + 1 rebanada de pan de centeno con queso ricotta | 200 ml de leche de cacao + mezcla de castañas, nueces y almendras |
Es importante recordar que siempre debes revisar la etiqueta de los alimentos procesados para asegurarte de que no contienen ingredientes prohibidos en la intolerancia a la fructosa, como miel, melaza, jarabe de maíz y edulcorantes sacarina y sorbitol. En general, los productos dietéticos y light, las galletas, las bebidas preparadas y los productos de panadería suelen traer estos ingredientes.
Síntomas principales
En personas que tienen intolerancia hereditaria, o que tienen mala absorción de fructosa debido a cambios en la flora intestinal o enfermedades inflamatorias, como el síndrome del intestino irritable, por ejemplo, el consumo de este azúcar puede ocasionar síntomas como:
- Náuseas y vómitos;
- Sudor frío;
- Dolor abdominal;
- Falta de apetito;
- Diarrea o estreñimiento;
- Exceso de gases;
- Vientre hinchado;
- Irritabilidad;
- Mareo.
Como la leche materna no tiene fructosa, el bebé solo comienza a tener síntomas cuando comienza a tomar leche artificial, utilizando fórmulas lácteas, o con la introducción de alimentos, como papillas, jugos o frutas.
Si la cantidad de este azúcar consumida por el niño intolerante es muy grande, puede haber síntomas más graves como apatía, convulsiones e incluso coma. Sin embargo, es importante recordar que la presencia de gases, diarrea y un vientre hinchado también pueden ser síntomas de intolerancia a la lactosa, y es importante que el niño sea evaluado por el médico.
Cómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico de intolerancia a la fructosa lo realiza el gastroenterólogo, endocrinólogo o nutrólogo, quien realiza una valoración de la historia clínica de la persona, y se realiza una prueba con eliminación de fructosa de la dieta y observación de mejoría de los síntomas.
En caso de duda, también se pueden realizar análisis de orina y sangre para evaluar los efectos de la fructosa en el organismo, además de la prueba del hidrógeno caducado, que es una prueba que mide, a través de la respiración, la capacidad de absorción de fructosa por parte del organismo.