¿Es la insulina basal adecuada para mí? Guía de discusión del médico
Contenido
- ¿Qué es la insulina basal y cómo se usa?
- ¿Es la insulina basal adecuada para mí?
- ¿Cambiará mi dosis de insulina basal?
- ¿Hay efectos secundarios con la insulina basal?
Si tiene diabetes, sabe que lidiar con el flujo continuo de nueva información sobre insulina, pruebas de glucosa en sangre y recomendaciones dietéticas puede resultar abrumador en ocasiones.
Si le diagnosticaron recientemente o si es un usuario experimentado que no está satisfecho con su tratamiento actual con insulina, entonces quizás sea el momento de preguntarle a su médico o endocrinólogo sobre la insulina basal.
Aquí hay algunas preguntas que podría considerar hacer durante su próxima cita.
¿Qué es la insulina basal y cómo se usa?
“Basal” significa fondo. Esto tiene sentido ya que el trabajo de la insulina basal es trabajar entre bastidores durante las horas de ayuno o sueño.
La insulina basal viene en dos formas: de acción intermedia y Actuacion larga. Ambos están diseñados para mantener los niveles de glucosa en sangre normales durante el ayuno. Pero difieren según la dosis y la duración de la acción. La insulina basal también se puede administrar mediante una bomba, utilizando insulina de acción rápida.
La insulina de acción prolongada, también conocida como insulina glargina (Toujeo, Lantus y Basaglar) e insulina detemir (Levemir), se toma una o dos veces al día, generalmente en la cena o antes de acostarse, y dura hasta 24 horas.
La insulina de acción intermedia, también llamada NPH (Humulin y Novolin), se usa una o dos veces al día y tiene una duración de 8 a 12 horas.
¿Es la insulina basal adecuada para mí?
Dado que cada persona es diferente, solo su médico puede decirle qué tipo de terapia con insulina se adapta mejor a sus necesidades.
Antes de recomendar la insulina basal, tendrán en cuenta los resultados más recientes del control de glucosa en sangre, la dieta, el nivel de actividad, los resultados de la prueba de A1C más recientes y si el páncreas sigue produciendo insulina por sí solo.
¿Cambiará mi dosis de insulina basal?
Su médico podría considerar cambiar su dosis de insulina basal por varias razones.
Si sus cifras de glucosa en sangre en ayunas o antes de las comidas son constantemente más altas que su nivel objetivo, es posible que deba aumentar su dosis de insulina basal. Si sus números tienden a ser más bajos que su objetivo y experimenta frecuentes niveles bajos de azúcar en sangre (hipoglucemia), especialmente durante la noche o entre comidas, es posible que deba reducir su dosis.
Si hay un aumento sustancial en su nivel de actividad, es posible que necesite una reducción de su insulina basal.
Si está crónicamente ansioso o estresado, sus niveles de azúcar en sangre pueden ser más altos y su médico puede decidir modificar su dosis. El estrés puede disminuir la sensibilidad a la insulina, lo que significa que la insulina no funciona tan bien en su cuerpo. En este caso, es posible que necesite más insulina para mantener bajo control el azúcar en sangre.
Si está enfermo, es posible que necesite un aumento temporal de la insulina basal para ayudar a reducir los niveles altos de glucosa en sangre causados por una infección, aunque esto solo sería necesario para una enfermedad a largo plazo. Según la ADA, la enfermedad crea una enorme cantidad de estrés físico en el cuerpo.
Además, la Clínica Mayo cita que la menstruación puede afectar los niveles de glucosa en sangre de una mujer. Esto se debe a que los cambios en el estrógeno y la progesterona pueden provocar una resistencia temporal a la insulina. Esto puede requerir un ajuste en las necesidades de dosis y también puede cambiar de un mes a otro dependiendo del ciclo menstrual. Los niveles de glucosa en sangre deben controlarse con más frecuencia durante la menstruación. Informe cualquier cambio a su médico.
¿Hay efectos secundarios con la insulina basal?
Como ocurre con la mayoría de los tipos de insulina, los niveles bajos de azúcar en sangre o hipoglucemia son el efecto secundario más común asociado con el uso de insulina basal. Si comienza a mostrar demasiados incidentes de niveles bajos de azúcar en la sangre a lo largo del día, será necesario cambiar su dosis.
Algunas otras posibles complicaciones de la insulina basal incluyen: aumento de peso (aunque es menor que con otros tipos de insulina), reacciones alérgicas y edema periférico. Al consultar con su médico, puede recopilar más información sobre estos efectos secundarios y si puede estar en riesgo o no.
Cuando se trata de insulina basal y otros tipos de terapia con insulina, su médico, endocrinólogo y educador en diabetes pueden guiarlo hacia el tratamiento que mejor se adapte a sus necesidades y estilo de vida.