¿Cuál es la diferencia entre el coma y la muerte cerebral?

Contenido

• 1. ¿Qué es un coma?
• ¿Qué sucede cuando la persona está en coma?
• 2. ¿Qué es la muerte cerebral?
• ¿Puede la persona con muerte cerebral volver a despertar?
• Cómo se confirma la muerte cerebral
• Qué hacer en caso de muerte cerebral

La muerte cerebral y el coma son dos condiciones muy diferentes pero clínicamente importantes, que generalmente pueden surgir después de un traumatismo cerebral grave, como después de un accidente grave, una caída desde una altura, un ictus, tumores o una sobredosis, por ejemplo.

Aunque el coma puede progresar a muerte cerebral, suelen ser fases muy diferentes y afectan la recuperación de la persona de forma diferente. En la muerte cerebral hay una pérdida definitiva de la función cerebral y, por lo tanto, la recuperación no es posible. El coma es una situación en la que el paciente mantiene cierto nivel de actividad cerebral, que puede detectarse en un electroencefalograma, y ​​hay esperanza de recuperación.

1. ¿Qué es un coma?

El coma es un estado de profunda pérdida de conciencia, en el que la persona no se despierta, pero el cerebro sigue produciendo señales eléctricas que se extienden por todo el cuerpo y que mantienen los sistemas más básicos e importantes para la supervivencia, como la respiración o la respuesta. de ojos a la luz, por ejemplo.

A menudo, el coma es reversible y, por tanto, la persona puede volver a despertar, sin embargo, el tiempo hasta que pasa el coma es muy variable, según la edad, el estado de salud general y la causa. Incluso hay situaciones en las que los médicos inducen el coma para aumentar la velocidad de recuperación del paciente, como en el caso de lesiones cerebrales traumáticas graves.

Se considera que una persona que está en coma está legalmente viva, independientemente de la gravedad o la duración de esa condición.

¿Qué sucede cuando la persona está en coma?

Cuando una persona está en coma, necesita estar conectada a un aparato respiratorio y su circulación, orina y heces se controlan constantemente. La alimentación se realiza mediante sondas porque la persona no muestra ninguna reacción y por tanto necesita permanecer en el hospital o en casa, necesitando cuidados constantes.

2. ¿Qué es la muerte cerebral?

La muerte cerebral ocurre cuando ya no hay ningún tipo de actividad eléctrica en el cerebro, aunque el corazón sigue latiendo y el cuerpo puede mantenerse vivo con un respirador artificial y alimentándose directamente a través de la vena.

¿Puede la persona con muerte cerebral volver a despertar?

Los casos de muerte cerebral son irreversibles y, por lo tanto, a diferencia del coma, la persona ya no podrá despertar. Por esta razón, la persona con muerte cerebral se considera legalmente muerta y los dispositivos que mantienen vivo el cuerpo pueden apagarse, especialmente si son necesarios para otros casos en los que hay posibilidades de éxito.

Cómo se confirma la muerte cerebral

La muerte cerebral debe ser confirmada por un médico, después de evaluar varios tipos de respuestas corporales involuntarias que evalúan la presencia de actividad cerebral. Por lo tanto, una persona se considera con muerte cerebral cuando:

• No responde a órdenes simples como "abre los ojos", "cierra la mano" o "mueve un dedo";
• Los brazos y las piernas no reaccionan cuando se mueven;
• Las pupilas no cambian de tamaño con la presencia de luz;
• Los ojos no se cierran cuando se toca el ojo;
• No hay reflejo nauseoso;
• La persona no puede respirar sin la ayuda de máquinas.

Además, se pueden realizar otras pruebas, como un electroencefalograma, para asegurarse de que no haya actividad eléctrica en el cerebro.

Qué hacer en caso de muerte cerebral

Al recibir la noticia de que el paciente tiene muerte cerebral, los médicos generalmente cuestionan a la familia directa de la víctima si autorizan la donación de órganos, siempre que estén sanos y puedan salvar otras vidas.

Algunos órganos que se pueden donar en caso de muerte cerebral son el corazón, los riñones, el hígado, los pulmones y la córnea de los ojos, por ejemplo. Dado que hay muchos pacientes esperando en la fila para recibir un órgano, los órganos del paciente con muerte cerebral pueden contribuir al tratamiento e incluso salvar la vida de otra persona en menos de 24 horas.