Esclerosis múltiple y dolor articular
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Esclerosis múltiple
La esclerosis múltiple (EM) es un trastorno progresivo inmunomediado que hace que el cuerpo de una persona ataque por error al sistema nervioso central (cerebro, médula espinal, nervio óptico).
Cuando una persona tiene EM, su sistema nervioso central (SNC) se inflama de manera aguda. Esta inflamación daña los nervios al desgastar la capa protectora de mielina que aísla las fibras nerviosas y facilita la transmisión de señales nerviosas centrales.
Después de hacer suficiente daño a la mielina y las fibras nerviosas, la transmisión de señales se interrumpe e incluso se puede detener por completo. Como resultado de esta degeneración, se desarrolla una variedad de síntomas debilitantes.
Dolor articular indirecto
El daño nervioso y musculoesquelético asociado con la EM da como resultado un dolor progresivo que puede dejar a una persona con una variedad de síntomas, como:
- fatiga
- rigidez muscular
- pérdida del equilibrio
- sensación física alterada (opresión, hormigueo o entumecimiento)
- dificultad para hablar
- disfunción sexual
Los dos tipos de dolor que experimentan las personas con EM son el dolor nervioso y el dolor musculoesquelético. Ambos tipos contribuyen indirectamente al dolor en las articulaciones y los dolores corporales. Si bien la EM no afecta directamente las articulaciones, sí afecta otras áreas que pueden provocar dolor en las articulaciones y el cuerpo. Por ejemplo:
- Una pérdida de energía conduce al descondicionamiento físico, lo que resulta en músculos debilitados y vulnerables.
- Una pérdida de equilibrio y rigidez en las extremidades da como resultado una marcha desigual que afecta las articulaciones.
- Una postura débil resulta en presión dolorosa en la espalda baja.
- Los espasmos musculares frecuentes afectan la movilidad y la flexibilidad general que soportan las articulaciones.
El dolor indirecto en las articulaciones asociado con la EM suele ser más intenso alrededor de las caderas y la espalda, así como en las piernas. La energía, la postura, la flexibilidad y el equilibrio juegan papeles importantes en el dolor articular.
Si bien no existe una cura para la esclerosis múltiple, existen formas de controlar y mitigar el dolor mediante el uso de medicamentos, fisioterapia y cambios en el estilo de vida.
MS manejo del dolor articular
Según la Asociación de Esclerosis Múltiple de Estados Unidos, aproximadamente el 50 por ciento de las personas identifican el dolor como un síntoma principal después de ser diagnosticados con EM, y aproximadamente el 48 por ciento de las personas informan haber experimentado dolor crónico.
Si bien todas las personas con EM experimentan un dolor diferente, existen algunos remedios generales, terapias y medicamentos que se pueden usar para encontrar lo que es adecuado para usted.
Algunos métodos diarios que puede usar para mejorar los síntomas del dolor articular y muscular incluyen:
- ejercicio ligero
- estiramiento / yoga
- postura fortificante con cojines
- compresas frías y calientes
- cambios positivos en el estilo de vida, como dejar de fumar y perder peso
Además, a muchas personas les va bien con la fisioterapia para ayudar a controlar la rigidez, el equilibrio, la espasticidad y los espasmos. Un fisioterapeuta puede ayudar a detectar problemas con músculos débiles o tensos que pueden provocar dolor en las articulaciones en la EM.
El fisioterapeuta puede enseñarle ejercicios de estiramiento y fortalecimiento que mejorarán el dolor en las articulaciones. Un fisioterapeuta también puede evaluar los problemas de la marcha e incluso recomendar modificaciones que lo ayudarán a caminar mejor y ejercer menos presión sobre sus articulaciones.
Medicamento
Cuando se trata de medicamentos, los nervios sobreestimulados con EM se tratan comúnmente con medicamentos antiepilépticos, antidepresivos tricíclicos y medicamentos contra la espasticidad.
Los opioides se pueden recetar en casos más extremos, pero los analgésicos no son tan efectivos para tratar los síntomas de la EM y generalmente se evitan.
El dolor muscular se puede tratar con relajantes musculares, y el dolor en las articulaciones se puede tratar de manera efectiva con medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE).
Siempre discuta cualquier cambio en su tratamiento o plan de manejo del dolor con su médico.
Para llevar
El equilibrio, la energía y los problemas musculares son muy comunes con la EM, y el daño nervioso y musculoesquelético puede contribuir al desarrollo de articulaciones dolorosas y músculos doloridos.
Con la combinación correcta de fisioterapia, medicamentos y cambios en el estilo de vida, puede controlar su EM y llevar una vida rica y placentera.