¿Qué es la mucormicosis, síntomas y tratamiento?
Contenido
- Principales signos y síntomas
- Tipos de mucormicosis
- Posibles Causas
- Cómo se hace el diagnóstico
- Tratamiento de la mucormicosis
La mucormicosis, antes conocida como cigomicosis, es un término que se usa para referirse a un grupo de infecciones causadas por hongos del orden Mucorales, más comúnmente por el hongo. Rhizopus spp. Estas infecciones no se transmiten de una persona a otra y son más frecuentes en personas con baja inmunidad o diabetes no controlada.
La enfermedad ocurre cuando los hongos se inhalan, van directamente a los pulmones, o cuando ingresan al cuerpo a través de un corte en la piel, dando lugar a la aparición de síntomas según el órgano infectado, pudiendo presentarse dolor de cabeza severo, fiebre , hinchazón, enrojecimiento de la cara y secreción intensa de los ojos y la nariz. Cuando la mucormicosis llega al cerebro, pueden producirse convulsiones, dificultad para hablar e incluso pérdida del conocimiento.
El diagnóstico de mucormicosis lo realiza un médico de cabecera o enfermedad infecciosa mediante tomografía computarizada y cultivo de hongos, y el tratamiento generalmente se realiza con medicamentos antimicóticos inyectables u orales, como la anfotericina B.
Principales signos y síntomas
Los signos y síntomas de la mucormicosis pueden variar según el grado de inmunodepresión de la persona y el órgano afectados por el hongo, pudiendo haber:
- Nariz: es uno de los órganos más afectados por esta enfermedad y conduce a la aparición de síntomas similares a la sinusitis, como congestión nasal, dolor en las mejillas y flema verdosa, pero en los casos más graves, hinchazón en la cara, pérdida de tejido de el cielo el cartílago de la boca o la nariz;
- Ojos: las manifestaciones de la mucormicosis se pueden observar a través de problemas en la visión como dificultad para ver, acumulación de secreción amarilla e hinchazón alrededor de los ojos;
- Pulmones: cuando los hongos alcanzan este órgano, puede producirse tos con una gran cantidad de flema o sangre, dolor en el pecho y dificultad para respirar;
- Cerebro: este órgano se ve afectado cuando la mucormicosis se propaga y puede causar síntomas como convulsiones, dificultad para hablar, cambios en los nervios de la cara e incluso pérdida del conocimiento;
- Piel: Los hongos de la mucormicosis pueden infectar regiones de la piel y pueden aparecer lesiones rojizas, endurecidas, hinchadas y dolorosas y, en algunas situaciones, pueden convertirse en ampollas y formar heridas abiertas de aspecto negro.
En casos más avanzados, la persona con mucormicosis puede presentar un tinte azulado en la piel y dedos morados y esto se debe a la falta de oxígeno provocada por la acumulación de hongos en los pulmones. Además, si la infección no se identifica y trata, el hongo puede extenderse rápidamente a otros órganos, especialmente si la persona tiene un sistema inmunológico muy comprometido, llegando a los riñones y al corazón y poniendo en riesgo la vida de la persona.
Tipos de mucormicosis
La mucormicosis se puede dividir en varios tipos según la ubicación de la infección por hongos y puede ser:
- Mucormicosis rinocerebral, que es la forma más común de la enfermedad, y la mayoría de estos casos ocurren en personas con diabetes descompensada. En este tipo, los hongos infectan la nariz, los senos nasales, los ojos y la boca;
- Mucormicosis pulmonar, en el que los hongos llegan a los pulmones, siendo esta la segunda manifestación más común;
- Mucormicosis cutánea, que consiste en la propagación de una infección por hongos en partes de la piel, que incluso pueden llegar a los músculos;
- Mucormicosis gastrointestinal, en el que el hongo llega al tracto gastrointestinal, siendo más raro que ocurra.
También existe un tipo de mucormicosis, llamada diseminada, que es más rara y ocurre cuando los hongos migran a varios órganos del cuerpo, como el corazón, los riñones y el cerebro.
Posibles Causas
La mucormicosis es un grupo de infecciones causadas por hongos del orden Mucorales, siendo las más comunes Rhizopus spp., que se encuentran en varios lugares del medio, como vegetación, suelo, frutos y productos en descomposición.
Normalmente, estos hongos no causan problemas de salud, ya que pueden ser combatidos por el sistema inmunológico. El desarrollo de enfermedades se da principalmente en personas que tienen un sistema inmunológico comprometido, siendo más frecuente en personas con diabetes descompensada. Además, las personas con baja inmunidad debido a enfermedades como el VIH, el uso de fármacos inmunosupresores o algún tipo de trasplante, como médula ósea u órganos, también tienen mayor riesgo de desarrollar mucormicosis.
Cómo se hace el diagnóstico
El diagnóstico de mucormicosis lo realiza un médico de cabecera o enfermedad infecciosa mediante la evaluación del historial de salud de la persona y la tomografía computarizada, que sirve para verificar la ubicación y extensión de la infección. También se realiza un cultivo de esputo, que se basa en analizar las secreciones pulmonares para identificar el hongo relacionado con la infección.
En algunos casos, el médico también puede solicitar un examen molecular, como PCR, para identificar la especie de hongo y, dependiendo de la técnica utilizada, la cantidad presente en el organismo, y una resonancia magnética para investigar si la mucormicosis ha alcanzado las estructuras de el cerebro, por ejemplo. Estas pruebas deben realizarse lo antes posible, porque cuanto más rápido se haga el diagnóstico, más posibilidades hay de eliminar la infección.
Tratamiento de la mucormicosis
El tratamiento de la mucormicosis debe realizarse rápidamente, tan pronto como se diagnostique la enfermedad, para que las posibilidades de cura sean mayores y se realice de acuerdo con la recomendación del médico, pudiendo ser posible el uso de antifúngicos directamente en la vena, como la anfotericina. B, o posaconazol, por ejemplo. Es importante que los remedios se utilicen de acuerdo con el consejo médico y que el tratamiento se suspenda incluso si no hay más síntomas.
Además, dependiendo de la gravedad de la infección, el médico puede recomendar una cirugía para extirpar el tejido necrótico causado por el hongo, lo que se denomina desbridamiento. También se puede recomendar la terapia de cámara hiperbárica, sin embargo, aún no hay suficientes estudios para demostrar su efectividad. Obtenga más información sobre cómo funciona la cámara hiperbárica.