Cómo identificar y diagnosticar el síndrome de Sjogren

Contenido

• Síntomas principales
• Otros tipos de síntomas
• Cómo confirmar el diagnóstico
• Cómo tratar

El síndrome de Sjögren es una enfermedad reumática crónica y autoinmune, caracterizada por la inflamación de algunas glándulas del cuerpo, como la boca y los ojos, que da como resultado síntomas como sequedad de boca y sensación de arena en los ojos, además de un mayor riesgo de infecciones. como caries y conjuntivitis.

El síndrome de Sjögren puede presentarse de 2 formas:

• Primario: cuando se presenta de forma aislada, debido a cambios en la inmunidad;
• Secundario: cuando aparece en asociación con otras enfermedades autoinmunes, como artritis reumatoide, lupus, esclerodermia, vasculitis o hepatitis crónica.

Esta enfermedad, aunque no es curable, tiene una evolución benigna y se desarrolla a lo largo de muchos años, y también existen opciones de tratamiento para aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de la persona, como colirios y saliva artificial.

Síntomas principales

En el síndrome de Sjögren existe una desregulación de la inmunidad de la persona, lo que provoca inflamación y autodestrucción de las glándulas, especialmente las glándulas salivales y lagrimales. Por lo tanto, estas glándulas no pueden producir secreciones y síntomas como:

• Sequedad de boca, conocida como xerostomía;
• Dificultad para tragar alimentos secos;
• Dificultad para hablar durante mucho tiempo;
• Dolor de estomago;
• Ojos secos;
• Sensación de arena en los ojos y enrojecimiento;
• Fatiga visual;
• Sensibilidad a la luz;
• Riesgo de ulceraciones corneales;
• Mayor riesgo de infecciones como caries, gingivitis y conjuntivitis;
• Piel seca y sequedad de la mucosa de las partes íntimas.

Este síndrome es más común en mujeres jóvenes, pero puede ocurrir en personas de todas las edades. En algunos casos, los primeros síntomas aparecen en el embarazo, ya que es un período en el que los cambios hormonales y los estímulos emocionales pueden agravar este tipo de enfermedades.

Otros tipos de síntomas

En situaciones más raras, este síndrome puede causar signos y síntomas que no están relacionados con las glándulas, llamados manifestaciones extraglandulares. Algunos son:

• Dolor de articulaciones y cuerpo;
• Cansancio y debilidad;
• Tos seca;
• Cambios en la piel, como urticaria, hematomas, heridas en la piel y cambios en la sensibilidad.

Además, el síndrome de Sjögren puede ocasionar síntomas neurológicos, siendo un tipo de manifestación más grave, que puede presentar pérdida de fuerza en una ubicación corporal, cambios en la sensibilidad, convulsiones y dificultades de movimiento.

Aunque es poco común, las personas con síndrome de Sjögren también pueden tener una mayor probabilidad de desarrollar linfoma, lo que puede ocurrir en etapas más avanzadas de la enfermedad.

Cómo confirmar el diagnóstico

El diagnóstico del síndrome de Sjögren lo realiza el reumatólogo, quien evalúa los síntomas, realiza un examen físico de las glándulas y puede solicitar pruebas como marcadores de inmunidad, denominadas anti-Ro / SSA, anti-La / SSB y FAN.

Se puede solicitar una biopsia de labio para confirmar cuando exista duda del diagnóstico o para valorar la presencia de otros factores que puedan provocar síntomas similares a este síndrome, como infecciones virales, diabetes, uso de algunos medicamentos o causas psicológicas, por ejemplo. Vea cuáles pueden ser otras causas de sequedad bucal y cómo combatirlas.

Además, también es importante investigar la existencia de Hepatitis C, ya que esta infección puede provocar síntomas muy similares a los del síndrome de Sjögren.

Cómo tratar

El tratamiento del síndrome de Sjögren se realiza principalmente para controlar los síntomas, mediante el uso de colirios lubricantes y saliva artificial, además de medicamentos como antiinflamatorios, corticoesteroides o hidroxicloroquina, por ejemplo, para reducir la inflamación, prescritos por el reumatólogo.

Otras alternativas naturales incluyen masticar chicle sin azúcar, beber agua con gotas de limón o té de manzanilla y consumir alimentos ricos en omega 3, como pescado, aceite de oliva y aceite de linaza. Obtenga más información sobre cómo tratar el síndrome de Sjögren.