Linfoma no Hodgkin: que es, síntomas y tratamiento
Contenido
- Los síntomas del linfoma no Hodgkin
- Cómo se hace el diagnóstico
- Tratamiento del linfoma no Hodgkin
- Pronóstico en caso de linfoma no Hodgkin
El linfoma no Hodgkin es un tipo de cáncer que afecta a los ganglios linfáticos, favoreciendo su aumento, y afecta principalmente a las células de defensa tipo B. Los síntomas de la enfermedad aparecen a medida que el sistema inmunológico se ve comprometido, con la aparición de síntomas como sudoración nocturna, fiebre y picazón en la piel, por ejemplo, sin embargo, puede haber otros síntomas dependiendo de dónde se esté desarrollando el cáncer.
Es importante que este tipo de linfoma se identifique en etapas tempranas, ya que es posible prevenir la diseminación del tumor y así tener mayores posibilidades de curación. El tratamiento debe ser guiado por el oncólogo, que puede realizarse mediante radioterapia, quimioterapia o el uso de fármacos monoclonales.
Los síntomas del linfoma no Hodgkin
En la mayoría de los casos, el linfoma no ocasiona ningún tipo de síntoma, solo se identifica en estadios más avanzados debido a cambios en la médula ósea, que interfiere directamente con la producción de glóbulos sanos. Además, los síntomas del linfoma no Hodgkin pueden variar según el lugar del cuerpo en el que se desarrolle. Así, en general, los principales síntomas relacionados con el linfoma no Hodgkin son:
Aumento de los ganglios linfáticos, también conocidos como linguales, principalmente en el cuello, detrás de las orejas, axilas e ingles;
- Anemia;
- Cansancio excesivo;
- Fiebre;
- Falta de energía para realizar las actividades diarias;
- Transpiración nocturna;
- Náuseas y vómitos;
- Picazón en la piel;
- Hinchazón en la cara o el cuerpo;
- Pérdida de peso sin causa aparente;
- Sangrado fácil;
- Aparición de hematomas en el cuerpo;
- Distensión y malestar abdominal;
- Sensación de estómago lleno después de ingerir poca comida.
É importante que a pessoa consulte o clínico geral assim que notar o aparecimento de ínguas, principalmente se estiver acompanhado de outros sintomas, pois assim é possível que sejam feitos exames que possam confirmar o diagnóstico e, assim, iniciar o tratamento mais indicado, promovendo a calidad de vida.
Cómo se hace el diagnóstico
El diagnóstico de linfoma no Hodgkin debe ser realizado inicialmente por el médico de cabecera y luego por el oncólogo mediante la evaluación de los síntomas presentados por la persona y la evaluación de la historia de la persona. Además, para confirmar el diagnóstico, también se recomienda realizarse análisis de sangre, biopsias, pruebas de imagen, como tomografía, cribado de infecciones de transmisión sexual, como VIH y hepatitis B, y mielograma.
Estas pruebas sirven para confirmar la existencia de la enfermedad e identificar el tipo de tumor y su estadio, que es fundamental para la elección del tratamiento.
Tratamiento del linfoma no Hodgkin
El tratamiento para el linfoma no Hodgkin debe realizarse de acuerdo con la orientación del oncólogo y varía según el tipo y estadio del linfoma, la cirugía y el uso de medicamentos que reducen la proliferación tumoral, estimulan la producción de células sanguíneas y mejoran la calidad de vida de la persona.
Así, el tratamiento de este tipo de linfoma se realiza con una combinación de quimioterapia, radioterapia e inmunoterapia, en la que se hace uso de fármacos que actúan con el objetivo de detener la proliferación de células cancerosas, favorecer la eliminación del tumor y aumentar la producción. indicado.Células de defensa del organismo.
Las sesiones de quimioterapia tienen una duración promedio de 4 horas, en las que la persona recibe medicamentos orales e inyectables, sin embargo, cuando el linfoma no Hodgkin es más severo, también se puede asociar a sesiones de radioterapia en el sitio del linfoma con el fin de promover la eliminación del tumor. Tanto la quimioterapia como la radioterapia pueden provocar efectos secundarios como náuseas y caída del cabello.
Además del tratamiento indicado por el oncólogo, es importante que la persona mantenga un estilo de vida saludable, practicando actividad física de forma regular y teniendo una dieta sana y equilibrada, la cual debe ser guiada por el nutricionista.
Pronóstico en caso de linfoma no Hodgkin
El pronóstico en caso de linfoma no Hodgkin es muy individualizado, ya que depende de varios factores como el tipo de tumor que tiene el individuo, su estadio, el estado de salud general del individuo, el tipo de tratamiento que se ha realizado y cuándo empezó.
La tasa de supervivencia de este tipo de tumor es alta, pero varía según:
- Edad: cuanto mayor sea la persona, mayores serán las posibilidades de que no se cure;
- Volumen tumoral: cuando supera los 10 cm, peores son las posibilidades de curación.
Por tanto, las personas mayores de 60 años que tienen tumores de más de 10 cm tienen menos probabilidades de curarse y pueden morir en unos 5 años.