Respiración lenta o detenida
La respiración que se detiene por cualquier causa se llama apnea. La respiración lenta se llama bradipnea. La respiración dificultosa o laboriosa se conoce como disnea.
La apnea puede aparecer y desaparecer y ser temporal. Esto puede ocurrir con la apnea obstructiva del sueño, por ejemplo.
La apnea prolongada significa que una persona ha dejado de respirar. Si el corazón todavía está activo, la condición se conoce como paro respiratorio. Este es un evento potencialmente mortal que requiere atención médica inmediata y primeros auxilios.
La apnea prolongada sin actividad cardíaca en una persona que no responde se llama paro cardíaco (o cardiopulmonar). En bebés y niños, la causa más común de paro cardíaco es el paro respiratorio. En los adultos, generalmente ocurre lo contrario, el paro cardíaco conduce con mayor frecuencia a un paro respiratorio.
La dificultad para respirar puede ocurrir por muchas razones. En la mayoría de los casos, las causas más comunes de apnea en bebés y niños pequeños son diferentes de las causas más comunes en adultos.
Las causas comunes de dificultades respiratorias en bebés y niños pequeños incluyen:
- Asma
- Bronquiolitis (inflamación y estrechamiento de las estructuras respiratorias más pequeñas de los pulmones)
- Asfixia
- Encefalitis (inflamación e infección del cerebro que afecta las funciones vitales del cerebro)
- Reflujo gastroesofágico (acidez de estómago)
- Aguantando la respiración
- Meningitis (inflamación e infección del tejido que recubre el cerebro y la médula espinal)
- Neumonía
- Nacimiento prematuro
- Convulsiones
Las causas comunes de dificultad para respirar (disnea) en adultos incluyen:
- Reacción alérgica que causa inflamación de la lengua, garganta u otras vías respiratorias
- Asma u otras enfermedades pulmonares
- Paro cardiaco
- Asfixia
- Sobredosis de drogas, especialmente debido a alcohol, analgésicos narcóticos, barbitúricos, anestésicos y otros depresores.
- Líquido en los pulmones
- Apnea obstructiva del sueño
Otras causas de apnea incluyen:
- Lesión en la cabeza o lesión en el cuello, la boca y la laringe (laringe)
- Infarto de miocardio
- Latido del corazón irregular
- Trastornos metabólicos (químicos corporales, minerales y ácido-base)
- A punto de ahogarse
- Accidente cerebrovascular y otros trastornos cerebrales y del sistema nervioso (neurológicos)
- Lesión en la pared torácica, el corazón o los pulmones.
Busque atención médica inmediata o llame a su número de emergencia local (como el 911) si una persona con algún tipo de problema respiratorio:
- Se vuelve flácido
- Tiene una convulsión
- No está alerta (pierde el conocimiento)
- Permanece somnoliento
- Se vuelve azul
Si una persona ha dejado de respirar, solicite ayuda de emergencia y realice la reanimación cardiopulmonar (si sabe cómo hacerlo). Cuando esté en un lugar público, busque un desfibrilador externo automático (DEA) y siga las instrucciones.
La RCP u otras medidas de emergencia se realizarán en una sala de emergencias o por un técnico médico de emergencia (EMT) de ambulancia o paramédico.
Una vez que la persona esté estable, el médico realizará un examen físico, que incluye escuchar los sonidos cardíacos y respiratorios.
Se harán preguntas sobre el historial médico y los síntomas de la persona, que incluyen:
PATRÓN DE TIEMPO
- ¿Esto ha pasado antes?
- ¿Cuánto duró el evento?
- ¿Ha tenido la persona episodios breves y repetidos de apnea?
- ¿Terminó el episodio con una respiración profunda y repentina?
- ¿Ocurrió el episodio estando despierto o dormido?
HISTORIA DE SALUD RECIENTE
- ¿Ha tenido la persona un accidente o lesión reciente?
- ¿Ha estado enferma la persona recientemente?
- ¿Hubo alguna dificultad para respirar antes de dejar de respirar?
- ¿Qué otros síntomas has notado?
- ¿Qué medicamentos toma la persona?
- ¿La persona consume drogas recreativas o de la calle?
Las pruebas de diagnóstico y los tratamientos que se pueden realizar incluyen:
- Soporte para las vías respiratorias, que incluye oxígeno, tubo de respiración a través de la boca (intubación) y respirador (ventilador)
- Análisis de sangre y orina.
- Tubo de cobre
- Radiografía de pecho
- Tomografía computarizada
- Desfibrilación (descarga eléctrica al corazón)
- ECG (electrocardiograma o rastreo cardíaco)
- Líquidos a través de una vena (intravenosa o intravenosa)
- Medicamentos para tratar los síntomas, incluidos antídotos para revertir los efectos de una intoxicación o sobredosis.
La respiración se ralentizó o se detuvo; Sin respirar; Paro respiratorio; Apnea
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