Cómo identificar y tratar la crisis de ausencia
Contenido
- Cómo identificar la crisis de ausencia
- Cuando ir al doctor
- Cómo tratar la crisis de ausencia
- Obtenga más información sobre la epilepsia y cómo distinguir la crisis de ausencia del autismo en: Autismo infantil.
Las convulsiones de ausencia son un tipo de convulsión epiléptica que se puede identificar cuando hay una pérdida repentina del conocimiento y una mirada vaga, quedándose quieto y luciendo como si estuviera mirando al espacio durante unos 10 a 30 segundos.
Los ataques de ausencia son más comunes en niños que en adultos, son causados por una actividad cerebral anormal y pueden controlarse con medicamentos antiepilépticos.
Generalmente, las convulsiones ausentes no causan daño físico y el niño ya no tiene convulsiones naturalmente durante la adolescencia, sin embargo, algunos niños pueden tener convulsiones por el resto de sus vidas o desarrollar otras convulsiones.
Cómo identificar la crisis de ausencia
La crisis de ausencia se puede identificar cuando el niño, durante unos 10 a 30 segundos:
- De repente pierde el conocimiento y deja de hablar, si estuvieras hablando;
- Quedarse quieto, sin caer al suelo, con el mirada vacía, generalmente desviado hacia arriba;
- No contesta lo que se le dice o reacciona a los estímulos;
- Después de la crisis de ausencia, el niño se recupera y continúa haciendo lo que estaba haciendo y no recuerdo que paso.
Además, pueden presentarse otros síntomas de la crisis de ausencia como parpadear o poner los ojos en blanco, apretar los labios, masticar o hacer pequeños movimientos con la cabeza o las manos.
Las crisis de ausencias pueden ser difíciles de identificar porque pueden confundirse con falta de atención, por ejemplo. Por eso, a menudo ocurre que una de las primeras pistas que un padre puede tener de que el niño está teniendo crisis de ausencia es que tiene problemas de atención en la escuela.
Cuando ir al doctor
Ante la presencia de síntomas de crisis de ausencia, es importante consultar a un neurólogo para realizar el diagnóstico mediante un electroencefalograma, que es un examen que evalúa la actividad eléctrica del cerebro. Durante el examen, el médico puede pedirle al niño que respire muy rápido, ya que esto puede desencadenar una crisis de ausencia.
Es muy importante llevar al niño al médico para diagnosticar la crisis de ausencia porque el niño puede tener dificultades de aprendizaje en la escuela, desarrollar problemas de conducta o aislamiento social.
Cómo tratar la crisis de ausencia
El tratamiento de la crisis de ausencia se suele realizar con remedios antiepilépticos, que ayudan a prevenir las crisis de ausencia.
Normalmente, hasta los 18 años de edad, los ataques de ausencia tienden a detenerse naturalmente, pero es posible que el niño tenga crisis de ausencia por el resto de su vida o desarrolle convulsiones.