Los efectos de la quimioterapia en su cuerpo
Contenido
- Sistemas circulatorio e inmunológico
- Sistemas nervioso y muscular
- Sistema digestivo
- Sistema tegumentario (piel, cabello y uñas)
- Sistema sexual y reproductivo
- Sistema excretor (riñones y vejiga)
- Sistema esquelético
- Peaje psicológico y emocional
Después de recibir un diagnóstico de cáncer, su primera reacción puede ser pedirle a su médico que lo inscriba en quimioterapia. Después de todo, la quimioterapia es una de las formas más comunes y poderosas de tratamiento del cáncer. Pero la quimioterapia hace mucho más que eliminar el cáncer.
Si bien estos medicamentos son lo suficientemente potentes como para matar las células cancerosas que crecen rápidamente, también pueden dañar las células sanas. Esto puede provocar varios efectos secundarios. La gravedad de estos efectos secundarios depende de su salud general, su edad y el tipo de quimioterapia.
Si bien la mayoría de los efectos secundarios desaparecen poco después de que finaliza el tratamiento, algunos pueden continuar mucho después de que finaliza la quimioterapia. Y es posible que algunos nunca desaparezcan. Asegúrese de discutir cualquier efecto secundario que esté experimentando con su médico. En algunos casos, dependiendo de las reacciones que tenga su cuerpo, es posible que su médico deba ajustar el tipo o la dosis de la quimioterapia.
Obtenga más información sobre cómo la quimioterapia afecta su cuerpo.
La forma en que se manifiestan los efectos secundarios de la quimioterapia para cada persona puede depender de otros factores, como la edad o las condiciones de salud existentes. Pero no importa cuán severos sean, estos efectos son notables para cada individuo.
Los medicamentos de quimioterapia pueden afectar cualquier sistema del cuerpo, pero los siguientes son los más susceptibles:
- tubo digestivo
- folículos pilosos
- médula ósea
- boca
- sistema reproductivo
Vale la pena comprender cómo estos medicamentos contra el cáncer pueden afectar los principales sistemas de su cuerpo.
Sistemas circulatorio e inmunológico
La monitorización de rutina del hemograma es una parte crucial de la quimioterapia. Eso se debe a que los medicamentos pueden dañar las células de la médula ósea, donde se producen los glóbulos rojos. Sin suficientes glóbulos rojos para transportar oxígeno a los tejidos, puede experimentar anemia.
Los síntomas de la anemia pueden incluir:
- fatiga
- aturdimiento
- piel pálida
- dificultad para pensar
- siento frio
- Debilidad general
La quimioterapia también puede reducir el recuento de glóbulos blancos (neutropenia). Los glóbulos blancos juegan un papel importante en el sistema inmunológico. Ayudan a prevenir enfermedades y combatir infecciones. Los síntomas no siempre son obvios, pero es posible que se enferme con más frecuencia de lo que solía hacerlo. Asegúrese de tomar precauciones para evitar la exposición a virus, bacterias y otros gérmenes si está tomando quimioterapia.
Las células llamadas plaquetas ayudan a que la sangre se coagule. Un recuento bajo de plaquetas (trombocitopenia) significa que es probable que le salgan hematomas y sangre fácilmente. Los síntomas incluyen períodos prolongados de hemorragias nasales, sangre en el vómito o las heces y una menstruación más abundante de lo normal.
Por último, algunos medicamentos de quimioterapia pueden dañar el corazón al debilitar el músculo cardíaco (miocardiopatía) o alterar el ritmo cardíaco (arritmia). Estas condiciones pueden afectar la capacidad de su corazón para bombear sangre de manera eficaz. Algunos medicamentos de quimioterapia pueden incluso aumentar su riesgo de ataque cardíaco. Es menos probable que ocurran estos problemas si su corazón está fuerte y sano cuando comienza la quimioterapia.
Sistemas nervioso y muscular
El sistema nervioso central controla las emociones, los patrones de pensamiento y la coordinación. Los medicamentos de quimioterapia pueden causar problemas de memoria o dificultar la concentración o pensar con claridad. Este síntoma a veces se denomina "niebla de quimioterapia" o "quimiocerebro". Este deterioro cognitivo leve puede desaparecer después del tratamiento o puede persistir durante años. Los casos graves incluso pueden aumentar la ansiedad y el estrés existentes.
Algunos medicamentos de quimioterapia también pueden causar:
- dolor
- debilidad
- entumecimiento
- hormigueo en las manos y
pies (neuropatía periférica)
Sus músculos pueden sentirse cansados, adoloridos o temblorosos. Y sus reflejos y habilidades motoras pequeñas pueden disminuir. También puede experimentar problemas de equilibrio y coordinación.
Sistema digestivo
Algunos de los efectos secundarios más comunes de la quimioterapia afectan la digestión. La boca seca y las llagas que se forman en la lengua, los labios, las encías o la garganta pueden dificultar la masticación y la deglución. Las llagas en la boca también lo hacen más susceptible a hemorragias e infecciones.
Incluso puede tener un sabor metálico en la boca o una capa amarilla o blanca en la lengua. La comida puede tener un sabor inusual o desagradable, lo que lleva a una pérdida de peso involuntaria por no comer.
Estos potentes fármacos también pueden dañar las células del tracto gastrointestinal. Las náuseas son un síntoma común y pueden provocar vómitos. Hable con su médico sobre los medicamentos contra las náuseas para reducir los vómitos durante el tratamiento.
Sistema tegumentario (piel, cabello y uñas)
La caída del cabello es quizás el efecto secundario más infame de los tratamientos de quimioterapia. Muchos medicamentos de quimioterapia afectan los folículos pilosos y pueden provocar la caída del cabello (alopecia) a las pocas semanas del primer tratamiento. La caída del cabello puede ocurrir en cualquier parte del cuerpo, desde las cejas y las pestañas hasta las piernas. La caída del cabello es temporal. El crecimiento de cabello nuevo generalmente comienza varias semanas después del tratamiento final.
También son posibles irritaciones leves de la piel como sequedad, picazón y sarpullido.
Su médico puede recomendar ungüentos tópicos para calmar la piel irritada. También puede desarrollar sensibilidad al sol y ser susceptible a quemaduras. Asegúrese de tomar precauciones especiales para evitar quemaduras solares cuando esté al aire libre, como usar protector solar o mangas largas.
A medida que los medicamentos afectan su sistema tegumentario, las uñas de las manos y los pies pueden volverse marrones o amarillas. El crecimiento de las uñas también puede disminuir a medida que las uñas se arrugan o se vuelven quebradizas y comienzan a agrietarse o romperse fácilmente. En casos graves, pueden separarse del lecho ungueal. Es importante cuidar bien las uñas para evitar infecciones.
Sistema sexual y reproductivo
Se sabe que los medicamentos de quimioterapia alteran las hormonas tanto en hombres como en mujeres. En las mujeres, los cambios hormonales pueden provocar sofocos, períodos irregulares o un inicio repentino de la menopausia. Puede experimentar sequedad de los tejidos vaginales que puede hacer que las relaciones sexuales sean incómodas o dolorosas. También aumenta la posibilidad de desarrollar infecciones vaginales.
Muchos médicos no recomiendan quedarse embarazada durante el tratamiento. Si bien algunas mujeres pueden volverse infértiles temporal o permanentemente como efecto secundario, los medicamentos de quimioterapia administrados durante el embarazo también pueden causar defectos de nacimiento.
En los hombres, algunos medicamentos de quimioterapia pueden dañar los espermatozoides o disminuir el recuento de espermatozoides. Como las mujeres, los hombres pueden tener infertilidad temporal o permanente debido a la quimioterapia.
Si bien los síntomas como la fatiga, la ansiedad y las fluctuaciones hormonales pueden interferir con el deseo sexual tanto en hombres como en mujeres, muchas personas que reciben quimioterapia aún pueden tener una vida sexual activa.
Sistema excretor (riñones y vejiga)
Los riñones trabajan para excretar los poderosos medicamentos de quimioterapia a medida que se mueven por su cuerpo. En el proceso, algunas células de los riñones y la vejiga pueden irritarse o dañarse.
Los síntomas del daño renal incluyen:
- disminución de la micción
- hinchazón de las manos
- pies y tobillos hinchados
- dolor de cabeza
También puede experimentar irritación de la vejiga, lo que provoca una sensación de ardor al orinar y aumento de la frecuencia urinaria.
Para ayudar a su sistema, su médico probablemente le recomendará que beba muchos líquidos para eliminar el medicamento y mantener su sistema funcionando correctamente. Además, tenga en cuenta que algunos medicamentos hacen que la orina se vuelva roja o naranja durante unos días, pero sepa que esto no es motivo de preocupación.
Sistema esquelético
La mayoría de las personas pierden algo de masa ósea a medida que envejecen, pero con la quimioterapia, algunos medicamentos aumentan esta pérdida al hacer que bajen los niveles de calcio. La osteoporosis relacionada con el cáncer tiende a afectar más a las mujeres que a los hombres, especialmente a las mujeres posmenopáusicas y aquellas cuya menopausia se produjo repentinamente debido a la quimioterapia.
Según los Institutos Nacionales de Salud (NIH), las mujeres tratadas por cáncer de mama tienen un mayor riesgo de osteoporosis y fracturas óseas. Esto se debe a la combinación de los medicamentos y a una caída natural de los niveles de estrógeno. La osteoporosis aumenta el riesgo de fracturas y roturas óseas. Las zonas más comunes del cuerpo que sufren roturas son la columna y la pelvis, las caderas y las muñecas. Puede ayudar a mantener sus huesos fuertes consumiendo suficiente calcio y haciendo ejercicio con regularidad.
Peaje psicológico y emocional
Vivir con cáncer y lidiar con la quimioterapia puede tener consecuencias emocionales. Puede sentirse temeroso, estresado o ansioso por su apariencia y salud. La depresión también es un sentimiento común, ya que las personas hacen malabares con las responsabilidades laborales, familiares y financieras además del tratamiento del cáncer.
Las terapias complementarias como el masaje y la meditación pueden ser una solución útil para la relajación y el alivio. Hable con su médico si tiene problemas para hacerle frente. Es posible que puedan sugerirle un grupo de apoyo local contra el cáncer donde pueda hablar con otras personas que se someten a un tratamiento contra el cáncer. Si los sentimientos de depresión persisten, busque asesoramiento profesional o pregunte a sus médicos acerca de los medicamentos. Si bien los efectos secundarios emocionales son comunes, también hay formas de reducirlos.
Independientemente de los efectos secundarios que cause la quimioterapia, es posible tomar medidas para mejorar su calidad de vida durante el tratamiento.