¿Qué es una fractura de Jefferson?
Contenido
- Visión general
- ¿Cuales son los sintomas?
- ¿Cuáles son los factores de riesgo?
- ¿Cómo se diagnostica?
- Como es tratado?
- ¿Cómo es la recuperación?
- ¿Cuál es la perspectiva?
Visión general
Su columna está compuesta por una pila de huesos llamados vértebras. Protegen su médula espinal. Una fractura de Jefferson es otro nombre para una fractura ósea de los arcos delantero y trasero de la vértebra C1. La vértebra C1 es la superior, la más cercana a su cráneo.
Las fracturas C1 representan aproximadamente el 2 por ciento de todas las fracturas vertebrales, según una revisión de 2013. Las fracturas vertebrales son las fracturas más comunes relacionadas con la osteoporosis.
¿Cuales son los sintomas?
Una fractura de Jefferson causa dolor en la parte superior del cuello. Es posible que no tenga ningún problema con el movimiento, el habla o la función cerebral a menos que los nervios de la médula espinal también estén lesionados.
En algunos casos, hay daños en las arterias del cuello. Las lesiones de los vasos sanguíneos en la parte superior del cuello pueden provocar complicaciones neurológicas, como la ataxia. La ataxia es una pérdida de control muscular y equilibrio al caminar. Un moretón e hinchazón alrededor del sitio de la lesión son comunes.
Puede distinguir una fractura de Jefferson de otra lesión cervical (cuello) al observar dónde tiene síntomas:
- Puede haber dolor y rigidez, generalmente aislados en el área alrededor de la vértebra fracturada.
- Es posible que tenga problemas para caminar e incluso respirar si ha habido daño en la médula espinal.
- Puede sentir mucho dolor en otra parte del cuerpo y no ser consciente de su dolor de cuello.
El dolor que se irradia por la columna vertebral hacia las piernas probablemente proviene de un disco en la columna que presiona contra la médula espinal, no por una fractura de Jefferson.
¿Cuáles son los factores de riesgo?
Una fractura de Jefferson a menudo es causada por un traumatismo en la parte posterior de la cabeza. El contacto hace que el cuello se rompa violentamente hacia atrás o hacia adelante, agrietando el C1 en forma de anillo.
Los buzos tienen un alto riesgo de contraer esta fractura. Golpear el agua con la parte posterior de la cabeza puede ser bastante peligroso. Cualquiera que practique deportes de contacto también corre un mayor riesgo.
Otra causa común es un accidente automovilístico. Un conductor o pasajero que golpea la parte superior del automóvil podría sufrir una fractura en el C1 u otras vértebras superiores.
Las personas con osteoporosis también tienen un mayor riesgo de fracturar el C1 o cualquiera de los huesos de las vértebras.
¿Cómo se diagnostica?
Su médico revisará su historial médico y sus síntomas. Luego, realizarán un examen físico suave de su cuello, ya que puede haber hinchazón y hematomas por la lesión.
Una radiografía puede ayudar a determinar el tamaño y la ubicación de la fractura. Su médico también puede ordenar una tomografía computarizada para ver si la vértebra se ha desalineado.
Una tomografía computarizada es un tipo especial de rayos X que utiliza tecnología informática para crear cortes transversales del área que se escanea. Estas imágenes altamente detalladas también pueden revelar daños en los ligamentos y otras lesiones en los tejidos blandos.
Si tiene dolor de cuello, incluso si no parece demasiado intenso, informe a su médico. Ignorar el dolor de cuello después de un accidente u otra lesión puede provocar más lesiones.
Como es tratado?
Su plan de tratamiento dependerá de la naturaleza de la fractura. Una parte clave de la lesión es el daño al ligamento transversal. El ligamento transversal es una banda gruesa que ayuda a estabilizar el C1 en el cuello. La cirugía puede ser necesaria si el ligamento está muy roto.
También es posible que pueda acostarse en tracción con un dispositivo llamado halo alrededor de la cabeza y el cuello para evitar que se mueva. El halo se mantiene en su lugar con alfileres colocados en su cráneo.
Las fracturas menos graves se pueden estabilizar con un collarín.
Una ruptura de C1 puede ser muy inestable. La cirugía a menudo es necesaria para estabilizar las vértebras y evitar mayores daños. Se puede realizar un procedimiento llamado descompresión quirúrgica. Se trata de eliminar fragmentos de hueso y fragmentos de las vértebras para ayudar a asegurar que nada interfiera con la curación del C1 o que algo presione los nervios.
¿Cómo es la recuperación?
Si se necesita cirugía, la recuperación probablemente tomará alrededor de 12 semanas. Esto es independientemente del tipo de cirugía. Si la fractura es menor, es posible que pueda usar un collarín durante seis u ocho semanas. Un caso más grave podría requerir cirugía y luego un par de meses de tracción.
Evite levantar objetos pesados durante la recuperación. También debe evitar actividades en las que pueda volver a lesionarse el cuello, como buceo o deportes de contacto. Es posible que pueda evitar cualquier limitación o complicación a largo plazo si su cirugía fue exitosa y siguió los consejos de su médico.
Si el C1 está fusionado con las vértebras C2 y C3 debajo de él, es posible que tenga un poco menos de flexibilidad en su cuello. Incorporar fisioterapia durante su recuperación debería ayudarlo a compensar.
¿Cuál es la perspectiva?
Cualquier lesión en la columna es un asunto grave. La preocupación más grave es el daño a la médula espinal. Si ha experimentado una fractura de Jefferson sin ningún problema neurológico, debería poder lograr una recuperación completa. La clave será seguir los consejos de su médico todos los días.